Hotel para perros, de Lois Duncan, es un relato de 1971 del que se hizo una película hace poco. Según parece, con ese motivo se cambiaron algunas cosas en la novela original: nombres de personajes, trabajo profesional de la madre de los niños, y algunos toques modernos —como la cámara digital del chico protagonista—. La familia de Andi, una niña de once años, y Bruce, unos trece, debe trasladarse de ciudad con motivo del nuevo trabajo de su padre. Han de vivir en casa de su tía-abuela Alice, alérgica a los perros y, por eso, deben dejar a su perro atrás. Pero Andi y Bruce encuentran una perra que acaba de tener cachorros y, al no poder alojarlos en su casa, los acomodan en una casa vecina vacía sin que nadie lo sepa. Y, poco a poco, otros perros irán uniéndose a los... Leer más
Nat y el secreto de Eleonora, de Rebecca Dautremer y Anik Le Ray, cuenta una historia sobre la fascinación que ejercen los cuentos, y sobre un niño que, cuando vence las dificultades que tiene para leerlos por sí mismo, descubre la satisfacción de la lectura. La familia de Natanael pasa los veranos en una casa en Kérity, un pueblo costero de Bretaña. La propietaria de la casa, Eleonora, deja a Nat en herencia la gran biblioteca pero Nat acepta que, cuando la casa sufre grandes destrozos en un temporal, se vendan los libros a un anticuario. Pero entonces intervendrán los personajes de los cuentos clásicos, como Alicia y el Conejo Blanco, o Peter Pan y el Capitán Garfio, entre otros. Si consideramos la historia tal como se presenta en el álbum —pues el argumento es el de... Leer más
Casi siempre que pongo en la página un relato sobre perros tengo luego algún o algunos ecos, cosa que no suele pasar con libros sobre otros temas. Así que, ya que cité hace unos días indirectamente a Marc Simont, pongo hoy la ficha de un álbum sensacional suyo, The Stray Dog, sobre un perro callejero. Por lo que sé, no está editado en... Leer más
Algunos escolios de Gómez Dávila sobre cuestiones educativas: Sobre la educación y la instrucción: —«Lo eficaz no es denunciar la vileza de lo vil, sino mostrar la nobleza de lo noble». —«Educar es enseñar a apasionarse por lo que carece de vigencia». —«Mientras no tropezamos con tontos instruidos la instrucción parece importante». —«El episodio más patético es el de la indiferencia con que la mera juventud finalmente mira la vejez más ilustre». —«Una gran tradición intelectual es una garantía de sensatez para quien la hereda y un rico repertorio de tonterías para quien meramente se la apropia». Sobre la educación literaria: —«Las admiraciones... Leer más
Con más motivo que cuando lo escribió Chesterton, hoy podemos decir que «las últimas décadas se han caracterizado por el cultivo intensivo de la novela futurista. Parecería que nos hubiéramos resuelto a no querer comprender el pasado y que nos inclináramos a enunciar lo que es aparentemente más fácil: aquello que habrá de ocurrir». «Este culto del futuro no solamente constituye una debilidad, sino también una cobardía de la época», pues así rehuimos la competencia que nos hacen nuestros antepasados y nos conformamos con un muro en blanco donde cada uno puede escribir su propio nombre todo lo grande que quiera. «Y el resultado de esta moderna actitud es realmente el siguiente: los hombres inventan nuevos ideales porque no se atreven a poner en práctica los viejos... Leer más
En La Grecia antigua contra la violencia, Jacqueline de Romilly habla de cómo los clásicos griegos «lucharon contra la violencia con las palabras, palabras insertadas en obras literarias, palabras portadoras de sentido». Entre muchas otras consideraciones interesantes, al final pone un ejemplo para señalar una importante diferencia de tono entre las obras modernas y las clásicas tragedias griegas cuando tratan sobre la violencia. Cuando la Antígona de Sófocles es conducida a la muerte se lamenta de su destino y de que vaya a morir «sin lecho nupcial, sin canto de bodas, sin haber tomado parte en el matrimonio ni en la crianza de hijos»: «los deleites de la vida, dice Romilly, siguen estando ahí, como un furtivo pesar en el corazón de la tragedia. Por el contrario, en la... Leer más
Siento prevención ante las novelas en las que un escritor viene y cuenta un conflicto de otro país: siempre me parece que, por muy bien que lo conozca, tiene difícil hacerse cargo de toda la carga histórica y emocional que suele haber detrás. Al mismo tiempo es cierto que, a veces, es una manera, incluso la única, en la que podemos empezar a comprender algunas cosas. Luego, mi desconfianza inicial puede crecer con la lectura, o porque ya conozco algo sobre la materia o porque hay comportamientos o situaciones que no me parecen creíbles; o puede disminuir, sobre todo cuando la narración no pretende ser más que un buen relato y una buena exposición de los hechos. Este último es el caso de Llora Jerusalén, de Santiago Herraiz, cuya protagonista, Nora, una chica de dieciséis... Leer más
El proyecto Tetraedro, de Shelley Pearsall, es una novelita escolar entretenida y bien hecha. Es un ejemplo de cómo una buena elección de lo que se cuenta y lo que se deja fuera, y el mismo hecho de optar por un relato más bien esquemático, hace que el lector pase por alto los defectos y acabe interesado en las historias y los motivos de los... Leer más
Dos antologías de Celia Viñas: Celia Viñas para niños y niñas… y otros seres curiosos, un libro con una selección de poemas de la autora que tiene aspecto de álbum, que se publicó a finales del año pasado; y Celia Viñas para niños y jóvenes, donde hay más poemas y un buen estudio introductorio de su... Leer más
Arándanos para Sal, de Robert McCloskey, es un premiado álbum de hace décadas, con grandes dibujos en blanco y negro, que conserva su encanto y que ha sido publicado ahora en España. Su argumento es que la pequeña Sal va con su madre a buscar arándanos; al mismo tiempo, una osa y su osito se dedican a lo mismo; la niña y el osito se pierden y acaban tropezándose con la madre que no es la suya. Las ilustraciones son excelentes y la historia es simpática. Con todo, algunos pensarán que puede confundir a los niños lectores, pues quienes conocen el asunto de primera mano saben que las cosas no son tan sencillas cuando encuentras una osa con su cría. Robert McCloskey. Arándanos para Sal (Blueberries for Sal, 1948). Barcelona: Corimbo, 2010; 58 pp.; trad. de Ana Galán;... Leer más
Algunos escolios de Gómez Dávila sobre madurez, sabiduría, vulgaridad: —«La madurez del espíritu comienza cuando dejamos de sentirnos encargados del mundo». —«Ser joven es temer que nos crean estúpidos; madurar es temer serlo». —«Madurar no consiste en renunciar a nuestros anhelos, sino en admitir que el mundo no está obligado a colmarlos». —«El primer paso de la sabiduría está en admitir, con buen humor, que nuestras ideas no tienen por qué interesar a nadie». —«La sabiduría se reduce a no enseñarle a Dios cómo se deben hacer las cosas». —«La vulgaridad consiste en pretender ser lo que no somos». —«Los argumentos con que justificamos... Leer más
El concepto restrictivo de Cultura de Matthew Arnold, el de conocer lo mejor que se ha dicho y pensado, decía Chesterton que vale para la literatura pero no en general (Maestro de ceremonias). Lo entendemos mejor si pensamos en que «cultura» es la mitad de palabras como «agricultura» u «horticultura»: de ahí podemos concluir que cultura es el crecimiento sano de las ideas a partir de sus semillas originales y es la exploración de antiguas raíces profundas y vivas («Journalism and Culture», vol. XXIX, Collected Works, llustrated London News, 9 de noviembre de 1912). Y por eso «la verdadera tarea de la cultura no es hoy una tarea de expansión sino, muy señaladamente, de selección y de exclusión» (Lo que está mal en el mundo). Para empezar, eso quiere decir que Cultura... Leer más
No puedo decir que haya leído bien Por qué debemos considerarnos cristianos, de Marcello Pera —presidente del Senado italiano entre 2001 y 2006—, pues, para eso, tendría que haber leído bien, y en algunos casos haber leído antes, a muchos pensadores con los que dialoga en su libro, como Benedetto Croce, John Rawls, Kant, Locke... En cualquier caso, me ha interesado mucho por las cosas que explica y por cómo las explica. Incidentalmente, me ha gustado ver que, al menos en otros lugares, hay políticos (en este caso de izquierda) que saben lo que dicen y saben decirlo. El autor comienza con una introducción en la que declara que «desconfío de las ideas difundidas cuando no consigo explicármelas personalmente, desconfío de la sabiduría popular cuando va en contra de mis... Leer más
Los 13 relojes, de James Thurber, es un buen relato que, sin embargo, llega en una edición con demasiados o, mejor, con impropios y desmedidos elogios. Ni las comparaciones de la contracubierta —con Grimm, La Fontaine, Tolkien— son correctas, ni le hace un favor el prólogo de Neil Gaiman indicando que, probablemente, es «el mejor libro del mundo» (aunque, ciertamente, los seguidores de Gaiman entenderán fácilmente por qué lo... Leer más
Filo entra en acción, un relato de Christine Nöstlinger del que acabo de ver una nueva edición, es uno de los mejores relatos que recuerdo acerca de una pequeña intriga policiaca colegial, no por la intensidad de lo que ocurre sino porque todo encaja de modo inteligente y... Leer más
Se acaba de publicar en España uno de los álbumes más populares en Inglaterra en las últimas décadas, Peluche (Dogger), de Shirley Hugues, una gran ilustradora que se caracteriza, entre otras cosas, porque sus personajes infantiles son siempre muy... Leer más
Una aldea en tiempos del románico, con texto de Jaime Nuño González, arqueólogo, y dibujos de Chema Román, historiador e ilustrador, es un muy buen álbum de conocimientos. En 28 dobles páginas se muestran distintos aspectos de la vida de una aldea medieval inspirada en un pueblo del norte de Palencia. La estructura —una ilustración grande a la derecha, textos con dibujos y otras ilustraciones pequeñas a la izquierda— está bien pensada para facilitar la lectura. Las explicaciones son sobrias y precisas, y las ilustraciones son claras y coherentes. En mi opinión, sin embargo, le pasa lo que decía Dylan Thomas en uno de sus relatos cuando rememora el regalo de unos «libros que me contaban todo sobre las avispas, excepto por qué». Es decir: falta un capítulo más... Leer más
Escolios de Gómez Dávila sobre la libertad, la verdad y el relativismo. Acerca de la libertad: —«Libertad es el término que más se emplea sin saber qué significa». —«La libertad merece únicamente el respeto que merezca la actividad en la que se vierte». —«Libertad real no existe sino donde una pluralidad de amos permite trasladarse de uno a otro fácilmente». —«La libertad auténtica consiste en poder adoptar un amo auténtico». —«Ninguna obra, en ningún campo, es producto de la libertad. Todas son consecuencias de yugos que la libertad acepta». —«La dignidad del hombre no está en su libertad, está en la clase de restricciones a su voluntad que libremente... Leer más
Decía Chesterton que «hay tres maneras distintas de escribir historia. La antigua, que solíamos encontrar en los libros de nuestra infancia, era pintoresca y en extremo falsa. La última, más ilustrativa, adoptada por las autoridades académicas, es la de pensar que se puede seguir siendo falso, siempre que se evite ser pintoresco. (...) La tercera forma es utilizar lo pintoresco (lo que constituye el instinto natural del hombre desde que el mundo es mundo) pero haciéndolo de tal forma que parezca un símbolo de la verdad en lugar de un símbolo de la mentira. Relata al lector el verdadero significado del incidente pintoresco en lugar de dejarlo en suspenso o de darle un matiz decepcionante: es pintar un cuadro verdadero en lugar de uno falso, pero sin evitar que el cuadro sea... Leer más
La librería, de Penelope Fitzgerald, es un buen relato pero no tanto como esperaba. En fin, es la consecuencia de leer reseñas muy elogiosas previamente que, una vez más, me hacen caer en la trampa gracias a un comentario, como casual, con el que conecto especialmente: el de que la autora es la más privilegiada heredera de Jane Austen. 1959, Hardborough, una pequeña ciudad costera inglesa. Florence Green, viuda, decide poner en marcha una librería. Compra una vieja casa que llevaba sin ocupar muchos años, hace pequeñas campañas de marketing a su nivel, y, como consecuencia del enfrentamiento que tiene con una aristócrata local, ve peligrar el futuro de su negocio. La autora escribe bien, es sutil, ofrece una visión que parece ajustada de un mundo provinciano inglés, deja... Leer más
Blanca como la nieve, roja como la sangre, de Alessandro D'Avenia, es una novela que, por el tipo de narrador y el tipo de relato, se podría comparar con otra italiana, de hace tiempo, Jack Frusciante ha dejado el grupo, de Enrico Brizzi, o con Y decirte alguna estupidez, por ejemplo te quiero, de Martín Casariego —más adelante pondré reseña de ambas aquí—, o con Vigo es Vivaldi, de José Ramón Ayllón. Es también, como esta última citada, una «novela de profesor» —escrita por un profesor con intención de reflejar preocupaciones y preguntas de los chicos y chicas, y, en la medida de lo posible, de dar algunas respuestas o de mostrar algunas salidas—. Está bien escrita, es fresca, por momentos divertida y por momentos con acentos poéticos, y busca (y en muchos casos... Leer más
Mi hermano el genio, de Rodrigo Muñoz Avia, es un muy buen relato familiar, del mismo tipo que Los perfectos. Lola, diez años, jugadora del equipo de fútbol de su colegio, habla de su vida familiar, dominada porque su hermano Gracián, mayor que ella, es un pianista prometedor a quien sus padres, y especialmente su madre, consideran un genio. El conflicto estalla cuando sus padres quieren que Lola vaya a ver un concurso que puede ganar su hermano y que, por ese motivo, no juegue un partido de fútbol importante. El obvio acento crítico hacia actitudes como la de la madre de Lola es amable y no está recargado. La narración es divertida pues Lola, aunque sea muy peleona, tiene un humor casero muy eficaz: «¿Qué ha pasado?», le pregunta su madre cuando oye un ruido en la... Leer más
Ya que se cumplen veinte años del nacimiento de Maisy, el famoso personaje de Lucy Cousins, ahí va un simpático libro reciente de la ilustradora inglesa: ¡Ñam, ñam! Mis cuentos infantiles favoritos. Son unas versiones muy sencillas, pero se podría decir que con el argumento íntegro, de Caperucita, Las tres cabritas, El nabo más grande del mundo, La gallina Marcelina, Ricitos de Oro, la gallinita roja, Los tres cerditos, Los músicos de Bremen. Son un buen primer acercamiento a esos relatos también porque, como saben quienes conocen a la autora, sus coloristas ilustraciones tienen calidad y un gran tirón con su público natural de prelectores. Lucy Cousins. ¡Ñam, ñam! Mis cuentos infantiles favoritos (Yummy: My Favourite Nursery Stories, 2009). Parramón, 2010; 124... Leer más
Escolios de Gómez Dávila sobre la cultura. Acerca de la verdadera cultura: —«En un siglo donde los medios de publicidad divulgan infinitas tonterías, el hombre culto no se define por lo que sabe sino por lo que ignora». —«Hombre culto es aquel para quien nada carece de interés y casi todo de importancia». —«Lo que distingue al hombre culto del inculto es su manera de ignorar». —«La cultura es básicamente el código de los buenos modales de la inteligencia». —«Las culturas se resecan cuando sus ingredientes religiosos se evaporan». —«Frente a la pluralidad de civilizaciones y culturas, no debemos ser ni relativistas, ni absolutistas, sino... Leer más
«He llegado a pensar, decía Chesterton, que si la gente sólo aprendiera Historia, llegaría a aprender todo lo demás»: geografía y Napoleón, álgebra y las Cruzadas, griego y la historia de Grecia, etc. «La historia es simplemente humanidad. Y la historia es capaz de humanizar todos los estudios, incluso el de antropología». Pero en nuestra época, seguía, «no hay historia; sólo historiadores», y «todos los historiadores modernos se dividen en dos categorías: los que narran sólo la mitad de la verdad, como Macaulay o Froude, y los que no narran verdad alguna, como Hallam y todos los imparciales. Los historiadores airados ven sólo una de las caras del problema. Los historiadores serenos no ven nada, ni siquiera el problema». Por tanto, tal vez, la actitud correcta... Leer más
Cuatro hermanas, de Jetta Carleton, es el único libro de su autora, como lo fue Matar un ruiseñor, de Harper Lee. En ella se cuenta la vida de la familia Soames. La pequeña, Mary Jo, cuenta el primer capítulo en primera persona: hacia 1950, una reunión familiar en una granja en Misuri, que sirve para presentar a sus padres, Matthew y Callie, a sus hermanas mayores, Jessica y Leonie, y a un hijo de Leonie; y para enterar al lector de que había otra hermana Mathy, que falleció joven y tuvo un hijo, Peter, que ahora está de viaje por Europa. Los capítulos posteriores, en tercera persona, se centran en cada uno de los demás miembros de la familia. Es una buena narración, cálida y cordial, en la que todo va desplegándose con orden. Los personajes quedan bien dibujados en sus... Leer más
He leído los tres primeros libros de la serie de Ulysses Moore, de Pierdomenico Baccalario, y he echado un vistazo a los dos siguientes. Están publicados originalmente por la misma editorial italiana a la que pertenecen los libros de Stilton, y parecen confeccionados también con el propósito de armar una serie comercial juvenil. Todos ellos comienzan con una carta del autor a la editorial: supuestamente, les envía, traducidos, unos manuscritos de un misterioso personaje, Ulysses Moore, antiguo propietario de una casa llamada Villa Argo, situada en la bahía de Kilmore Cove, costa de Cornualles. El primer libro, La puerta del tiempo, contiene la presentación de los personajes y es, en realidad, sólo la primera parte de una historia pues se interrumpe en el momento clave (una... Leer más
He incluido datos de nuevas ediciones de: Una rueda en el tejado, La historia del Doctor Dolittle, Anastasia Krupnik, Niña de todos los países, Yo las... Leer más
Me han preguntado algunas veces qué opino de los libros de Gerónimo Stilton y Tea Stilton. La primera salvedad que hago es la de que no los he leído todos, sino sólo unos diez, por lo que mi comentario no puede ser completo. La segunda es que son libros que han de juzgarse como lo que son, como un producto cuyas pretensiones son comerciales, y en este sentido pocas pegas se les pueden poner: son un éxito arrollador. Esta forma de confeccionar historias es muy antiguo en la literatura popular y, por supuesto, en la literatura infantil y juvenil: el ejemplo más característico es el de las series que, a principios del siglo XX, puso en marcha Edward Stratemayer (en su juventud secretario de Horatio Alger, otro maestro de los libros infantiles de gran éxito popular), y que duran... Leer más
¡¡Máass!!, de Peter Schössow, es un álbum sin palabras o, mejor, con aquella única palabra. En la doble página de presentación, donde van el título y los datos editoriales, vemos un hombre mayor, con abrigo, bufanda y sombrero, paseando por una playa en un día ventoso. En la segunda doble página vemos que le vuela el sombrero. En la tercera, que comienza a correr tras él. En la cuarta, que el viento lo levanta... Relato de argumento elemental, aparentemente, pero gráficamente muy bien construído pues, con las distintas ilustraciones y con su secuencia, logra transmitir los sentimientos del protagonista: de susto y de miedo en su primera parte, de gozo y asombro cuando al fin se ve volando por encima del mar y de los campos... El colorido es escaso, como corresponde a un... Leer más
Varios escolios de Gómez Dávila sobre la historia y el trabajo de los historiadores: —«La tarea del historiador consiste menos en explicar lo que pasó, que en hacer comprender cómo el contemporáneo comprendía lo que pasó». —«La historia no tiene leyes que permitan predecir; pero tiene contextos que permiten explicar; y tendencias, que permiten presentir». —«La historia se suicida al negar toda trascendencia. Si la realidad es sólo temporal, su lugar es el presente. El pasado carece de importancia. Para que la historia nos concierna, algo en ella debe trascenderla: algo debe haber en la historia más que historia». —«El historiador que desdeña la “superficie pintoresca de la historia”,... Leer más
Chesterton tuvo una especial querencia por la Edad Media, a la que veía como una época llena de posibilidades que, sin embargo, se truncaron. Pero, aunque sus comentarios subrayaron mucho lo positivo de aquella época, también porque fueron hechos para replicar otros comentarios precipitados o ignorantes, estaban llenos de matices: «La sociedad medieval no era el lugar correcto, era sólo la dirección correcta. Era sólo el camino correcto, o quizás sólo el principio del camino correcto. La Edad Media estaba muy lejos de ser la Edad donde todo estaba bien. Sería más correcto decir que era la Edad en la que todo fue mal. Fue el momento en el que las cosas podían haberse desarrollado bien pero lo hicieron mal». (The New Jerusalem) Por un lado, están los comentarios... Leer más
El buen ladrón, de Hannah Tinti, es una novela que se desarrolla en Nueva Inglaterra, en el siglo XIX, y cuyos protagonistas son pícaros con grandes dosis de humanidad aunque saqueen cementerios y cadáveres, como algunos personajes dickensianos de Historia de dos ciudades o de Nuestro común amigo. Comienza en un orfanato llevado por unos frailes, donde un chico de doce años al que le falta una mano, Ren, es reclamado un día por un tipo con mucha labia, Benjamín, que dice ser familiar suyo. Ren acaba siendo cómplice de las andanzas de Benjamin y su socio Tom, que ganan dinero desvalijando cadáveres o, incluso, los cadáveres completos (fresquitos, porque si no, no sirven) para venderlos a un médico con intereses científicos. A pesar de lo grotesco de tipos y situaciones, y... Leer más
El ojo del cuervo, de Shane Peacock, es un relato pensado para enganchar a todos los seguidores de Sherlock Holmes o, al revés, para conducir a otros lectores hacia el personaje de Arthur Conan Doyle. La historia tiene lugar en 1867, en Londres. El joven Sherlock Holmes tiene trece años y es un chico especial: «una máquina de observar». Deja de ir a clase muchas veces porque allí se siente acosado y vagabundea por el centro de la ciudad. Sus padres tienen pocos medios económicos: su padre es un científico judío pobre y su madre una mujer rechazada por su aristocrática familia debido a su matrimonio. Cuando sucede un cruel asesinato, Sherlock decide investigar: le ayudará una chica también especial, Irene Doyle; gracias a ella también lo hará una banda de chicos, los... Leer más
Hace pocos meses se publicó Johnny y la bomba, de Terry Pratchett, el tercer libro de la trilogía de Johnny Maxwell: el primero fue Sólo tú puedes salvar a la humanidad y el segundo, no traducido al castellano, que yo sepa, fue Johnny and the Dead. El protagonista es un chico tímido —«era un perdedor. (...) Titubeaba. Decía mmm a todas horas»—, pero a cuyo alrededor pasan cosas, y en sus aventuras le acompañan unos compañeros con apariencias de delincuentes o de colgados, y que también tienen sus problemas. A través de un juego de ordenador, en el primer libro entra en contacto con unos alienígenas. En el segundo libro descubre que puede comunicarse con los espíritus del cementerio de la ciudad, a punto de ser demolido. En el tercero, por medio de un carrito de... Leer más