Después de su presentación en Nana y yo, un segundo libro de la heroína y su hermana es Nana y yo de vacaciones, de Jenny Valentine. En ocho capítulos, Moni cuenta el viaje y la estancia en un camping y en la playa, de sus padres, ella y Nana. Todo viene condicionado porque la profesora de Nana le encarga que cuide, durante las vacaciones, a un osito llamado Rodolfo, lo que causa problemas logísticos y preocupaciones adicionales a todos. De nuevo, historia graciosa y amable, con un humor cotidiano reconocible, unas pocas veces de risa franca y, normalmente, de sonrisa. Por ejemplo, para ir de vacaciones el padre de las niñas alquila una caravana amarilla, algo que a las niñas les encanta: «era muy divertido pasar por las calles de nuestro barrio en un coche distinto. Era como ir... Leer más
El señor Tigre se vuelve salvaje, de Peter Brown, es un magnífico álbum con reminiscencias buscadas del pintor Henri Rousseau. Vemos una ciudad de aspecto decimonónico en la que todos sus habitantes son animales humanizados. Se nos dice que a todos les gustan las cosas como son menos al señor Tigre, aburrido del comportamiento reglado y tan formal de sus conciudadanos. Hasta que tiene una idea: empieza a andar a cuatro patas para escándalo de todos. Entonces sus amigos le dicen que, ya puestos, que se marche a la selva, cosa que hace. Pero, una vez allí, tiene nostalgia. Relato con mucho colorido. Los ambientes del principio, y también las ilustraciones, están muy ordenaditos, como corresponde al ambiente que se describe. La secuencia de las imágenes es clara y, en varios... Leer más
Graham Balfour (1858-1929), primo de Stevenson, se propuso escribir una biografía suya y, también con ese fin, vivió en su casa de Samoa dos años. Al margen de que la obra que luego publicó estuviera un tanto condicionada por los deseos de la esposa de Stevenson, en ella da todos los datos ordenadamente —antepasados, relaciones familiares, amistades de juventud, matrimonio, viajes, publicaciones, etc.—, y hace observaciones que van al fondo del modo de ser y de trabajar de su biografiado. Habla de la influencia que tuvo en él su nodriza, Alison Cunningham, o Cummie; de la rigidez y honradez escrupulosa de su padre; del espíritu optimista de su madre que, dice, «poseía en el más alto grado esa disponibilidad para la alegría que ilumina la incomodidad y... Leer más
Los niños, de la colombiana Carolina Sanín, es un cuento largo, un tanto fantasmal, que cabría llamar de intriga psicológica. Está bien narrado, con un tono frío y distante, se apoya en imágenes literarias poderosas e intenta un acercamiento sofisticado (demasiado sofisticado y ausente de verdadero afecto para mi gusto) a cuestiones de interés. Trata sobre una mujer llamada Laura que, un día, encuentra un niño a su puerta. Se interesa por él, lo lleva a su casa, averigua que se llama Elvis Fidel, y lo entrega a los servicios sociales de la ciudad. Más adelante pregunta por el chico, cuando ya está internado en una institución, empieza a visitarlo, se plantea cuidarlo e inicia los trámites para que se lo entreguen en adopción. Pronto se ve que si el niño necesita... Leer más
Después de la edición de Manos Kelly, otro volumen con historias ilustradas por Antonio Hernández Palacios: las cuatro primeras de Mac Coy tituladas «La leyenda de Alexis Mac Coy» (La Légende d'Alexis Mac Coy), «Un tal Mac Coy» (Un nommé Mac Coy), «Trampas contra Mac Coy» (Pièges pour Mac Coy), «El triunfo de Mac Coy» (Le Triomphe de Mac Coy). El personaje, creado por J. P. Gourmelen a semejanza de Blueberry, comienza sus aventuras a finales de la guerra de Secesión, en 1864, en Georgia, y es un militar sudista capaz de resolver bien las más acciones más desesperadas. Su compañero, el rubio y borrachín Charley, le pone un contrapunto cómico. Los guiones dejan mucho que desear pero no así las escenas barrocas de colores restallantes que pinta Palacios, unas... Leer más
Las maletas encantadas, de Joan Manuel Gisbert, es un estupendo relato, cuya segunda parte no sorprenderá a quien conozca al autor y cuyo arranque tiene un atractivo tono de fábula de animales pícaros. Una musaraña decide hacerse con una maleta abandonada en medio del bosque y, para eso, la camufla de modo que nadie la encuentre. Pero un lagarto que la ve, le cuenta lo que le ocurrió a su prima la sabandija, y la musaraña se asusta y se marcha. Entonces el lagarto decide hacerse con la maleta pero, entretanto, la musaraña habla con el caracol que le hace darse cuenta de la trampa y regresa. Poco a poco, todos los animales del bosque acaban implicados en la historia: desean abrir la maleta y hacerse con lo que contenga pero, como son muchos, establecen un procedimiento justo para... Leer más
¿Quién come a quién?, de los polacos Aleksandra Mizielińska y Daniel Mizieliński, es un álbum de hace algún tiempo que representa el ciclo de la vida (en este caso la cadena alimenticia) de una forma diferente a las más habituales en álbumes (de los que yo conozco). Con dibujos a plumilla, en blanco y negro, se suceden ilustraciones a doble página que van acompañadas de pocas palabras. En la primera se dice «nació una flor», en la siguiente que «los pulgones se comieron la flor», luego que «la mariquita se comió a los pulgones», que «la lavandera blanca se comió a la mariquita», «el zorro se comió a la lavandera blanca», «el lobo devoró al zorro», «y se murió (era muy viejo)»… Y, con las moscas que nacen del zorro, todo vuelve a comenzar con otro ciclo.... Leer más
¿Sales a jugar?, de María Pascual, es un álbum que resultará entrañable para muchos adultos, que podrán hablar con sus hijos de los juegos infantiles de un tiempo sin aparatos electrónicos. En él vemos a once niños y niñas, junto a un perro y un gato, jugando al escondite inglés, el pañuelo, la sogatira, el balón prisionero, policías y ladrones, y el churro-va (que yo conocí como «el burro» o «huevo, pico, araña»). Hay un breve comentario introductorio a cada juego —que no es descriptivo sino que apunta brevemente cómo se juega y las tensiones entre quienes lo practican— y luego, sin palabras, sucesivas escenas que muestran lo que pasa y la distinta forma de actuar, no siempre limpia, de cada uno de los niños. Las figuras, niñas y niños cabezones de pies... Leer más
Hubo un momento en la vida de Stevenson, en los años finales de su primera estancia en Estados Unidos, en el que, de un modo un tanto desafiante frente a modos de actuar y de vivir que veía en su entorno, decidió cambiar sus obras de orientación y volver al mundo feliz de su infancia. En esa época escribió sus obras juveniles y de aventuras más destacadas y, también, Jardín de versos para niños, su primer libro de poemas, que dedicó a la que fuera su niñera. Hoy se considera uno de los libros clásicos de poesías para niños por más que, según cuenta en sus memorias su hijastro Lloyd Osbourne, la actitud de Stevenson hacia él era de indulgente indiferencia: consideraba que los poemas tenían encanto, sí, pero que eran insignificantes. Sin embargo, en ellos brilla una... Leer más
Lila era un personaje un tanto marginal en las novelas previas de Marilynne Robinson, Gilead y En casa. En la primera era el anciano pastor congregacionalista John Ames quien ponía por escrito su vida en una larga carta a su hijo pequeño. La segunda estaba narrada por la hija de su vecino y amigo Robert Boughton, pastor presbiteriano. Esta nueva historia, que se cuenta en tercera persona, sigue la vida y los pensamientos de la joven y silenciosa mujer de misterioso pasado con la que sorprendentemente se casó John Ames al final de su vida. La autora concibió Gilead como una larga reflexión meditativa. En casa fue pensada para ser simbiótica con la novela previa pero, al irla escribiendo, la autora introdujo más diálogos de los que había previsto inicialmente. Lila, en cambio,... Leer más
He puesto los datos de una nueva y cuidada edición que contiene una selección de relatos de Alexandr Afanasiev, titulada Basilisa la Bella y otros cuentos populares rusos. También se ha editado hace poco uno de los relatos más conocidos del folclorista ruso en formato álbum: La princesa Rana. La historia comienza cuando tres príncipes disparan una flecha cada uno, en distintas direcciones, para encontrar así esposa, y al pequeño, el zarevich Iván, le corresponde una Rana. Así que, como ha de cumplir su palabra, se casa con ella. Pero, cuando el zar pone distintas pruebas a sus hijos, es la Rana, que por la noche se transforma en Vasilisa la Sabia —en esta versión con «v»—, quien sabe cumplir sus peticiones. Luego, para liberar a la princesa del encantamiento al que la... Leer más
Hay historias que a unos les pueden hacer mucha gracia pero a otros no tanta. Si alguien ha vivido de cerca experiencias trágicas debidas al juego, por ejemplo, no querrá ni de broma un relato en el que la abuela enseña a su nieta a jugar al póker… Es el caso del singular Memorias de una abuela apostadora, de Dayal Kaur Khalsa. En la primera parte la nieta habla de lo que a ella le contó la abuela de su vida: nació en Rusia, los cosacos invadieron su pueblo, siendo niña emigró a América, donde creció; luego se casó, su marido trabajó para un gánster muy importante y ella, para complementar los ingresos familiares, se convirtió en una experta jugadora de póker; después tuvo dos hijos, y uno se fue a California y otra, la madre de la narradora, se quedó a vivir en... Leer más
Cuidado con la rana, de William Bee, es uno de esos álbumes de humor sarcástico —como algunos de Jon Klassen o Emily Gravett— que a unos les gusta mucho y a otros les da un poco de repelús. Una anciana encantadora llamada Desazón Zozobra vive en una casita al lado del bosque. Para protegerse cuenta con una ranita instalada en el felpudo y un cartel a la entrada de su finca que advierte: «Cuidado con la Rana». Cada vez que alguien se acerca de modo amenazador a la casita, el narrador nos avisa: «¡Mirad!». Y vemos como, sucesivamente, un ladrón malvado, un Bicho Apestoso, y un Ogro Zampabollos intentan burlar a la Rana. La narración se cuenta en versos sencillos —para leer y compartir en alto, más sonoros en el original inglés como suele ocurrir— y con cambios en... Leer más
Sam y Leo cavan un hoyo, con texto de Mac Barnett e imágenes de Jon Klassen, es un álbum un poco enigmático. Los protagonistas, hermanos o amigos, cavan un hoyo a las afueras de su casa, en busca de algo espectacular, mientras un perro les observa. Después de un rato trabajando deciden dejar de ahondar en vertical y hacerlo en horizontal; luego deciden separarse y seguir cada uno por su cuenta. Las imágenes van dejando claras las consecuencias de sus decisiones: cada cambio de rumbo provoca que no descubran grandes diamantes. Tal como acostumbra Klassen, las ilustraciones están muy bien compuestas con una paleta de colores limitada, en este caso a colores terrosos, y los personajes tienen divertidos aires impasibles. También, como vimos en la colaboración anterior entre los... Leer más
En la antología de sesenta y seis poemas de Stevenson titulada De vuelta del mar, preparada por Javier Marías, hay una breve introducción a la obra poética de Stevenson. Allí se indica que publicó cuatro libros de poesía durante su vida: Moral Emblems (1880), un panfleto con una tirada de noventa ejemplares; Jardín de versos para niños (1885), Underwoods (1887) —divididido en dos libros con poemas en inglés y en escocés—, y Ballads (1890). Un año después de su muerte se publicó Songs of Travel and Other Verses (1895), un libro que había dejado ya preparado y que es su mejor obra poética, y en 1918 se publicó New Poems and Variant Readings, que contenía ciento cuarenta y siete poesías. El antólogo explica sus elecciones en una nota introductoria.... Leer más
Me ha deslumbrado el trabajo literario que hay detrás de Las luminarias, de Eleanor Catton. En esta reseña se indican bien parte de los motivos: la construcción narrativa es meticulosa —argumento con una estructura circular; división en doce partes, cada una de la mitad de extensión que la previa; uso de los significados del zodiaco de una forma coherente sin que, por ese motivo, se lastre la lectura de quien no los conozca ni la cuestión le importe—, y el estilo con el que todo se cuenta es limpio —frases bien medidas, descripciones perfectas, precisión detallista en cualquier tema que se toque—. 1866, Hokitika, una joven ciudad con minas de oro en la costa oeste de la Isla Sur de Nueva Zelanda. Todo comienza cuando el recién llegado Walter Moody acaba en medio de una... Leer más
Erik Vogler y los crímenes del Rey Blanco y Erik Vogler en Muerte en el balneario, de Beatriz Osés, son dos relatos policiaco-humorísticos con un protagonista conseguido: un chico que vive en Bremen con su padre, obsesivo, exquisito, maniático, supersticioso y muy asustadizo. Ha salido un tercer libro que no conozco. En el primero su padre se marcha a Nueva York y él ha de irse a Grasberg, con su abuela, con la que no se lleva bien: unos sucesos paranormales le acaban conduciendo justo a la casa del asesino de unos jóvenes jugadores de ajedrez. En el segundo, para descansar del estrés anterior, se va, con su abuela y su vecino Albert Zimmer, al que conoció en la historia previa, a un balneario de superlujo del norte de Italia; pero, cuando entra en una de las salas, tropieza... Leer más
No había leído Emily, la de Luna Nueva, primer libro de una famosa trilogía de Lucy Maud Montgomery. Gran error, porque tiene mucho encanto y gran calidad —no en vano Alice Munro lo ha elogiado como uno de los mejores libros de la literatura canadiense— (que quedan un poco deslucidos por erratas y fallos de traducción y edición). Isla del Príncipe Eduardo, Canadá. Cuando su padre fallece, Emily tiene que irse a vivir a la Granja Luna Nueva con sus tías Murray, hermanas de su madre, una dulce y otra muy, muy rígida; ha de ir al colegio y aprender a convivir con distintos vecinos, unos con rivalidades históricas con los Murray, otros con historias tristes en su pasado… Y todo va cambiando. Cuando el relato termina, tiene trece años. A quien haya leído Ana la de Tejas... Leer más
Dadá, un álbum de los suizos Germano Zullo y Albertine, tiene un argumento inusual y eso ya es algo que merece ser destacado. Sus protagonistas son Rogelio Corcel, un jinete, y Dadá, su caballo. Son campeones mundiales de salto de obstáculos pero, al principio de la historia, tienen distintos problemas al competir, por lo que Dadá debe ir al médico y al psicólogo, antes de su prueba más importante. Las ilustraciones tienen mucho colorido. Las figuras son estilizadas y se presentan siempre a la misma distancia, salvo en un primer plano de Dadá. Abundan las bromas visuales y el argumento, en sí mismo, propicia momentos cómicos de distinto tipo —trompazos contundentes, situaciones insólitas, guiños irónicos…—. Se puede ver, si se quiere, como un relato acerca de la... Leer más
Dos álbumes de Kazuno Kohara: Jack Escarcha y El pequeño Mago. El primero habla de un niño que, durante el invierno, se hace amigo de Jack, «una figura blanca que estaba cubriendo toda su casa de hielo y escarcha» hasta que, al final del invierno se rompe el hechizo y deben despedirse. En el segundo el pequeño Mago está preocupado porque no puede volar, pero se hace amigo de un dragón y, cuando ve a un caballero que va en busca del dragón, decide avisarle… Gráficamente son álbumes muy parecidos a La biblioteca nocturna. En ellos las imágenes son como grabados, la autora juega con colores limitados, usa iguales recursos al disponer las ilustraciones en las dobles páginas, las figuras también se parecen. Del mismo modo, los personajes resultan atrayentes para los lectores... Leer más
En el pasado he leído muchos textos de Alexis de Tocqueville, e incluso hace años comencé pero no acabé La Democracia en América. Ahora, gracias a la recomendación de un amigo, he leído una biografía suya firmada por André Jardin, que me ha parecido magnífica. En el epílogo se indica cómo la reputación de Tocqueville fue muy grande durante su vida, luego sufrió un oscurecimiento de varias décadas y, a partir de 1930, volvió a crecer. En las circunstancias históricas de aquellos años se puso de manifiesto el gran acierto con el que Tocqueville supo ver los peligros que han de afrontar las sociedades democráticas: decía que en ellas hay gérmenes que, «abandonados a su libre crecimiento, debían producir la sumisión indefinida de la inteligencia, el materialismo de... Leer más
Como apunté al principio de estos comentarios, en sus ensayos literarios Stevenson apunta siempre hacia la vida misma y nunca se queda en consideraciones puramente librescas. Más de vez dijo que los los libros son «un pálido sustitutivo de la vida». También hacía un interesante paralelismo cuando afirmaba que «en literatura, como en nuestra conducta, nunca podemos esperar haber acertado completamente. Lo único que podemos hacer es asegurarnos lo más posible, y para ello sólo existe una regla: no hacer precipitadamente aquello que puede hacerse despacio». En una de sus cartas se reafirma en su decisión de no decir en sus obras una sola palabra en contra del esplendor de la vida y de aplaudir siempre cualidades como el valor, la veracidad, la... Leer más
Acabo de publicar en amazon UNA BREVE HISTORIA, un primer libro que tiene su origen en las clases que, durante varios años, he dado en el Máster en Álbum Infantil Ilustrado. En la página de amazon se puede acceder a la presentación del libro y a unas páginas de la introducción. La ilustración de la portada es un recorte de Juana de Arco. El libro contiene una historia de los pasos que se fueron dando hasta la publicación de los primeros álbumes, a finales del siglo XIX; luego, un recorrido por el trabajo de algunos autores y por distintas obras que son hitos del género, hasta llegar al punto de inflexión que significó la publicación de Donde viven los monstruos, en 1963; después, una relación comentada de muchos álbumes extraordinarios que ven la luz en las décadas... Leer más
Acabo de publicar en amazon UNA POSIBLE DEFINICIÓN, un segundo libro que tiene su origen en las clases que, durante varios años, he dado en el Máster en Álbum Infantil Ilustrado. En la página de amazon se puede acceder a la presentación del libro y a unas páginas de la introducción. La ilustración de portada es un recorte tomado de La ola. Es una mirada al interior de los álbumes, es decir, a la forma en que se da en ellos la relación entre palabras e imágenes, a sus formas propias de articular la secuencialidad y la narratividad, a su modo concreto de usar las distintas elipsis, y al hecho básico de que un álbum es un libro, con todo lo que físicamente significa eso. Después de señalar algunos antecedentes de la historia del arte donde se usan los recursos gráficos... Leer más
Conocí hace poco, cuando los vi en una librería, la edición facsímil reciente de dos libros publicados en México hace varias décadas: La cucarachita Mondinga y el Ratón Pérez, de Fernán Caballero, (una versión de La ratoncita presumida), y El Zar Saltán, de Alexander Pushkin. Ambos formaron parte de la «Biblioteca de Chapulín» varios libros editados entre 1942 y 1947 con la intención de componer una colección bien hecha de libros infantiles. En particular, me ha interesado conocer el trabajo de los ilustradores mexicanos Angelina Beloff y Julio Prieto. Fernán Caballero. La cucarachita Mondinga y el Ratón Pérez. Edición bilingüe, según la edición mexicana de Vanegas Suárez Arroyo, versión castellana de Rosario Rubalcava, versión inglesa de Christina Linares.... Leer más
Mi tío Harjir, álbum de Fermín Solís, es un álbum chispeante. El narrador cuenta lo que sucedió cuando su tío Harjir llegó a su casa por sorpresa, desde la India. Las ilustraciones muestran que tanto el niño como sus amigos están felices con todas las novedades que les trae Harjir: el colchón de púas en el que duerme, su costumbre de poner cristales en las comidas, la diversión que les proporciona su elefante Teo, su habilidad para resolver el problema en el que se mete un niño cuando se queda en un árbol y no puede bajar…, y muchas más cosas. Relato en la tradición de otros con un personaje asombroso que irrumpe por sorpresa en la vida cotidiana de un niño y la transforma (El gato garabato, Mary Poppins...). El relato se cuenta con gracia y se sigue con interés.... Leer más
La granja de dinosaurios, de Frann Preston-Gannon, es un álbum que hace gracia. En la primera doble página vemos al granjero en la cama cuando suena el despertador y leemos: «el trabajo de un granjero es muy duro». Y a partir de ahí lo vemos trabajar todo el día hasta que, nos dice, «puedes regresar a casa sabiendo que tu granja está bien cuidada y tus animales contentos». La simpatía está en lo que las imágenes muestran y las palabras no dicen: los dinosaurios grandes y pequeños alrededor del granjero. Unos dinos afectuosos y agradecidos, por cierto, aunque a veces se vean como amenazantes por el tamaño. Las letras son gruesas y las ilustraciones, en las que se integran bien dibujos y collages, son contundentes como cabría esperar... Frann Preston-Gannon. La granja... Leer más
En relación a los escritores, Stevenson admira mucho a su compatriota Walter Scott, al que califica como el rey de la novela. Indica sus cualidades y defectos —excelente en momentos románticos, descuidado y flojo en otros puntos, personajes escoceses buenos pero rasgos estereotipados en otros— y da una clave importante para comprenderlo: «del mismo modo que sus libros son un juego para el lector, eran un juego para él. Le gustaba evocar el ambiente de la novela, pero no tenía paciencia para describirlo. Era un gran soñador, alguien que tenía visiones pertinentes, hermosas y humorísticas, pero no un gran artista; no era, en el sentido valiente, un artista en absoluto. Se complacía a sí mismo y del mismo modo nos complace a nosotros. Los placeres del arte los... Leer más
Una mujer de recursos es una novela epistolar inspirada en la vida de la abuela de la autora, Elizabeth Forsythe Hayley, que debutó con ella y obtuvo un gran éxito. En el prefacio que pone a su relato, veinte años después, indica las ventajas del género: «las cartas son un excelente recurso dramático, abarcan el tiempo, hacen innecesaria la descripción narrativa y, lo más importante, incitan al lector a que se imagine la acción omitida». También señala cómo, el consejo habitual a los escritores «escribe sobre lo que conoces» ella suele formularlo de otro modo: «escribe sobre lo que puedas imaginarte que conoces». La primera carta de la heroína, Bess Stead, es de 1899, cuando es una niña pequeña, y la última es de 1967, poco antes de morir. Contra el telón de... Leer más
El jefe de la manada, de Inés Garland, es una buena novela corta: tensa e inquietante, pero amable y bienhumorada. La acción se desarrolla en Buenos Aires. Nina, una chica de once años, y su primo suelen jugar en un parque cercano a sus casas, donde conocen a Gudrek, un vagabundo de origen rumano que vive allí con sus perros. Un día ven a un tipo misterioso, de negro, que hace fotografías y se lo dicen a Gudrek. Luego ellos se van unos días a vivir con su abuelo, que les ha prometido enseñarles unos ejercicios de telepatía. En esos días salvan de morir atropellado a un perro, al que llaman López, al que traen con ellos de regreso. Pero, entonces, los perros del barrio empiezan a desaparecer y arrestan a Gudrek. Nina es una narradora más que competente. Casi no va por... Leer más
El dragón de papá, de Ruth Stiles Gannett y su madre, la ilustradora Ruth Chrisman Gannett, es un libro infantil norteamericano de 1948 que se ha traducido al español hace poco. Es el primero de una trilogía. Quien cuenta la historia habla de que su padre, Elmer Elemento (Elmer Elevator en el original), «que entonces era pequeño», recoge a un gato callejero que le habla de que, si va a la Isla Mandarina y a la Isla Salvaje, podrá cumplir su deseo de volar: sólo tendría que liberar a un dragoncillo preso que, agradecido, le dejaría volar con él. Y, como su madre se comporta de modo grosero con el gato, Elmer se enfada con ella y decide marcharse a buscar al dragón: debe salvar las amenazas de unos tigres, un rinoceronte, un león, un gorila…; también tendrá que... Leer más