Monky, de Dieter Schubert, es un magnífico álbum sin palabras en el que todo se cuenta mediante una sucesión de formidables dibujos acuarelados. A un niño que viaja en la parte trasera de la bici de su madre, se le cae un monito de peluche cuando pasan por un parque, o un bosque, y empieza la lluvia. Lo buscan, pero no lo encuentran, por lo que regresan a casa. Entretanto, vemos lo que le ha ocurrido al monito: unos ratones lo encuentran y lo destrozan; un erizo se lo arrebata y los erizitos juegan con el muñeco; una urraca se lo quita a los erizos y, más adelante, se le cae al río; luego un pescador lo pesca… En cada cada doble página hay tres, cuatro, cinco, seis o siete imágenes distintas, cada una en un recuadro. Los personajes, animales y humanos, están bien... Leer más
¿Quién compra un rinoceronte barato?, un álbum de Shel Silverstein editado por Lumen hace veinte años, vuelve al mercado español en una nueva edición muy bien traducida. Es un ejemplo perfecto de humor de nonsense llevado al límite. Su autor deja libre la imaginación y piensa y dibuja toda clase de posibilidades disparatadas para usar un rinoceronte: como si un charlatán extraordinariamente convincente te quisiera explicar que, por supuesto, un rinoceronte es la mascota ideal, la más afectuosa y más útil y más fácil de cuidar; en fin, que serías tonto del todo si no tuvieras una en tu casa. Da idea del talento inusual del autor que pudiera hilar todas sus ocurrencias y convertirlas en un libro. (Conviene advertir que si alguien las interpreta literalmente puede ponerse... Leer más
Se ha publicado hace poco una edición en castellano de ¡Qué lejos llegarás!, uno de los álbumes más populares del Dr. Seuss, tal vez por lo que tiene de libro de autoayuda entusiasta y un tanto voluntarista. En él, las palabras le hablan a un personajillo, a quien vemos en las imágenes siempre del mismo tamaño y en medio de distintos escenarios, para decirle lo que le ocurrirá en su vida y para estimularle a luchar cuando se le presenten contrariedades. Aunque hay que decir que son muchos los aciertos de esta versión en español, vale la pena, una vez más, observar algunos ejemplos de la dificultad que tiene trasladar la sonoridad y el ingenio del inglés al castellano. Uno, de ánimo (aunque lo de subir como la espuma no lo veo claro), dice: «You'll be on your way... Leer más
Una pelota para Daisy, de Chris Raschka, es un álbum sin palabras. Se suceden imágenes, varias en cada doble página, en las que vemos a una perrita que juega con una pelota roja. Luego, Daisy sale a la calle y al parque con su dueña, que es quien, al principio, lleva la pelota. Cuando Daisy vuelve a jugar con la pelota entra en escena otro perro, que se hace con ella, lo que a Daisy no le gusta nada. El autor presenta unas características figuras como sin delinear y compuestas con trazos muy gruesos. Los contornos de Daisy son grises y son negras las orejas, la cola, el hocico, los ojos, el collar… La historia está bien secuenciada y se sigue con interés: al principio a la dueña no se la ve completa y todo se observa como a la altura de Daisy, con lo que al lector le resultan... Leer más
Elmore Leonard fue un conocido escritor de novelas policiacas que también publicó varios populares relatos y novelas del Oeste. Entre ellos están Hombre, uno de los primeros y que parece ser el mejor, y Que viene Valdez, uno de los últimos, que también es valioso aunque sea más tópico. Ambas tienen como protagonistas a personajes marginales y unos desenlaces notables. Hombre es uno de los nombres que se dan a John Russell, un lacónico tipo que vivió varios años con los apaches. Al comienzo de la historia el narrador indica que su jefe, el señor Méndez le dice: «Echa un buen vistazo a Russell. No volverás a ver otro como él en tu vida». Pues bien, Russell ha de ir a reclamar una herencia y, con ese fin, se sube a una diligencia en la que van el mismo dueño del... Leer más
Animales, Pájaros y Océanos, son tres álbumes espectaculares de gran formato firmados por los belgas Francesco Pittau y Bernadette Gervais. En los tres se proponen adivinanzas gráficas, sobre animales terrestres, animales marinos y pájaros. Se hacen preguntas del tipo ¿de quién es esta silueta, o este ojo, o esta huella, o estas escamas, o esas plumas?... Y, al levantar las solapas, vemos a los animales de los que se trata y obtenemos las respuestas. Este recurso y el tamaño, junto con la calidad de las imágenes, los hacen álbumes de contrastada eficacia con cualquier público. Se les podría reprochar que prometen más de lo que dan: en lo que se refiere a los conocimientos que proporcionan se podrían obtener los mismos resultados con álbumes de menor formato. En cualquier... Leer más
El barco de Camila, de Jirina Marton y Allen Morgan, es un relato amable y sugerente, apto para leer, para mostrar y para compartir. A Camila su padre le cuenta una historia justo antes de dormir. En ella, una niña llamada Camila sale a navegar por el río, al final del día, y encuentra por el camino a un cuervo, una vaca, unos gatitos, y cada uno aporta algo al viaje hasta que llegan al mar. Las ilustraciones son eficaces y evocadoras. Las repeticiones, en las escenas y en los diálogos, son recursos que hacen más familiar la historia y ayudan a fijarlo y recordarlo mejor. Lo explica bien esta reseña extensa que, además, hace otras sugerencias para sacarle más partido aún al álbum. Jirina Marton. El barco de Camila (Nicole’s Boat, 1987). Texto de Allen Morgan. Barcelona:... Leer más
Linterna mágica, de la norteamericana Lizi Boyd, es un álbum sin palabras de concepción tan brillante como sencilla. En sucesivas ilustraciones a doble página vemos el paseo nocturno de un niño que sale de su tienda de campaña y va descubriendo el bosque con su linterna. Luego tropieza y la linterna cae en manos de distintos animales que, a su vez, proyectan el haz de luz en otros rincones. Hasta que, en la última doble página, vemos al chico ya de regreso en su tienda. Todas las ilustraciones son dibujos de línea sobre un fondo negro excepto cuando presentan los seres y lugares que ilumina la linterna: murciélagos, búhos, un zorro, un ciervo…, y plantas, árboles, etc. Unos pequeños troquelados, en algunas páginas, dan más profundidad a las imágenes y subrayan la... Leer más
Marcelín, de Jean Jacques Sempé, es una narración que se cuenta con dibujos sucesivos en los que los personajes niños y, en general, humanos, aparecen en un tamaño muy pequeño, y con unos textos, muy breves, que figuran en la parte inferior de las páginas. Su protagonista principal es Marcelín Cerezo, un niño que se pone colorado con mucha facilidad, cuyo mejor amigo es Renato Piqueras, otro chico que, cada poco, estornuda fuertemente. Algunos diálogos de los personajes aparecen en globos al modo de los cómics. Es excepcional la capacidad del autor para que sus mínimos personajes, individuales o en grupos, resulten expresivos, y para conseguir, con escasísimas líneas, sugerir los escenarios urbanos donde se mueven sus héroes. Esta forma de representación resulta muy... Leer más
Conocí a un dinosaurio, de Chris Sheban, me ha recordado Mi dinosaurio, de Mark Alan Weatherby, por la historia, por el estilo de las ilustraciones, e incluso por el detalle de que la habitación de la protagonista está empapelada de modo similar. Pero, en este caso, estamos ante un álbum que también es de conocimientos. La niña narradora, que cuenta en verso lo que le ocurre (con muy buena traducción al castellano), empieza diciendo que conoció a un dinosaurio en el Museo. A partir de ahí, en situaciones en las que sus padres ven otros seres, ella ve dinosaurios ocultos. Las imágenes son realistas y vistosas. En la parte inferior de cada página izquierda se indica que tipo de dinosaurio está viendo la niña en cada caso (triceratops, alosaurio, apatosaurio, etc.) y, al... Leer más
El Museo de Tronquito, de la noruega Ashild Kanstad Johnsen, es un álbum con personajes simpáticos e imágenes atractivas. Su protagonista principal es Tronquito, un ser que, gráficamente, responde por completo a su nombre, y cuyo mejor amigo es un abetito llamado Abeto. Al héroe le gusta recoger, reunir y clasificar las cosas sueltas que encuentra: no discrimina mucho. Cuando acumula demasiadas y su abuela le aconseja montar un Museo con todas ellas, lo hace, para encontrarse, poco después, con que su capacidad de almacenamiento es insuficiente. Las ilustraciones, tan ordenaditas, y a la vez caóticas, como corresponde al voluntarioso Tronquito, están muy bien compuestas. El trabajo de Tronquito es abrumador: para muchos de sus lectores será admirable pero no imitable. En... Leer más
Los libros que aplauden y difunden el uso de las bibliotecas, y además lo hacen de modo simpático, tienen asegurada una gran difusión. Es el caso del gracioso ¡Se busca! Lili la liebre, ladrona de libros, primer álbum de la escocesa Emily Mackenzie. Por su argumento se podría comparar con El Trincalibros. La liebre protagonista está tan obsesionada con los libros que los roba continuamente. Hasta que, un día, desaparece un libro de Arturo, que lo denuncia y, cuando la policía detiene a Lili, Arturo ha de acudir a una rueda de reconocimiento de sospechosos… La historia está bien llevada, las figuras son graciosas, las composiciones de páginas son acertadas, hay guiños bien pensados —que no siempre se pueden trasladar bien: un libro con los Bunniver's Travels, por... Leer más
La editorial Kalandraka sigue publicando, en buenas ediciones, los libros de Maurice Sendak. Recientemente le ha tocado el turno a El letrero secreto de Rosie, brevemente comentado en la voz de Sendak: la protagonista, Rosie, es una chica fabuladora que se viste como Alinda, la bella cantante, que da conciertos para sus amigos Kathy, Dolly, Pudgy y Sal en el patio de su casa. Sendak contó cómo, en este relato, recreó el ambiente de su casa y barrio de Brooklyn en 1948. La imaginativa Rosie, de ocho años, era una vecina, que vivía enfrente de su casa, a la que él veía desde su ventana mientras alegraba la vida de otros niños inventando juegos. Incluso, decía Sendak, en una ocasión, la oyó y vio encandilar a su público diciéndoles cómo había muerto su abuela esa noche y... Leer más
El cuarto libro de Spirit Animals, titulado Fuego y hielo, está escrito por Shannon Hale y centrado en Rollan: en su relación con el halcón Essix —menos fluida que la que tienen sus compañeros con sus espíritus animales—, y en que descubre, aún confusamente, que su pasado es más complicado de lo que sabía. En esta ocasión todos viajan a Ártica con la intención de conseguir el talismán de Suka, la Osa de Cristal, que está congelada bajo tierra. Algunos capítulos sueltos insinúan ya la gran amenaza que supondrá la gran serpiente Gerathon. A la espera de ver cómo los autores resuelven los conflictos que asolan Erdas, resumo así mi juicio provisional: las narraciones están construidas y escritas de modo más que competente; todo se alarga demasiado y algunos lectores... Leer más
La tercera entrega de Spirit Animals es Lazos de sangre, novela escrita por Garth Nix y Sean Williams. El argumento sigue dos hilos. En uno, los protagonistas van en busca del elefante Dinesh y, para llegar hasta él, deben lidiar con los Tergesh, unos feroces guerreros que montan en rinocerontes. En otro, el relato sigue a Meilin en su regreso a Zhong. En los dos casos aparecerán en su camino Capas verdes que les ayudarán. Entretanto se ve que los Conquistadores van ganando terreno y que, por otro lado, los héroes van superando sus recelos mutuos y se afianzan los lazos entre ellos, entre Meilin y Rollan en especial. Está bien pensada la combinación de cualidades de los héroes para cubrir todos los intereses posibles de los lectores: la chica guapa guerrera, Meilin —a la que... Leer más
Dentro de la línea, tan frecuente hoy, de intentar enseñar a los niños a ser menos brutos y más sensibles, o la de intentar dejarles claro que uno puede ser muy fuerte y no tener miedo a mostrar sus sentimientos, está el álbum de Keith Negley titulado Tipos duros. En él vemos, en cada doble página, cómo lo ejemplifican algún o algunos personajes robustos: un tipo musculoso de un gimnasio, un astronauta, unos ninjas, un superhéroe, un cowboy, un pirata, un caballero medieval, un piloto de carreras, un marino, un robot, un tipo tatuado en moto, etc. Las palabras son escasas y dejan todo el peso del álbum a las ilustraciones en colores vivos muy contrastados, que están bien compuestas y presentan figuras contundentes y amables. Keith Negley. Tipos duros (también tienen... Leer más
Ñac-Ñac, El Monstruo Comelibros, de Emma Yarlett, es un álbum de argumento mínimo y bromista que me ha recordado a Al señor zorro le gustan los libros. Su protagonista es un monstruo regordete llamado Ñac-Ñac al que le encanta comer libros. Vemos cómo da mordiscos a Ricitos de oro, a Caperucita roja, a Jack y las habichuelas mágicas… Al final, el narrador consigue atraparlo y encerrarlo. El libro se caracteriza porque cada cuento que muerde Ñac-Ñac está confeccionado de modo diferente —incluso con hojas de tamaños y formas distintas— y con abundancia de troquelados, la mayoría con forma de mordisco. Emma Yarlett. Ñac-Ñac, El Monstruo Comelibros (Nibbles, The Book Monster, 2016). Madrid: Bruño, 2016; 20 pp.; col. Cubilete; trad. de Virtudes Tardón Sánchez; ISBN:... Leer más
El segundo libro de la serie Spirit Animals, La caza, escrito por Maggie Stiefvater, comienza en el castillo de Puertoverde, donde los cuatro héroes están entrenándose para los desafíos futuros. Especialmente les insisten en que deben aprender a luchar juntos. En busca de una de las Grandes Bestias, el Jabalí Rumfuss, viajan a Trunswick, de donde procede Conor, que ha de luchar contra su gran rival de la infancia, y que, al final, ha de optar entre salvar a su familia o actuar de un modo que sabe que sus amigos entenderán como una traición (llegado el momento su madre le dirá el inevitable «sigue tu corazón, hijo»). Además, Meilin está cada vez más nerviosa por el peligro que corren Zhong y su padre, y se plantea dejar a sus compañeros. En esta novela, y en las otras dos... Leer más
Los libros de la serie titulada Spirit Animals, pensados para ser multiplataforma, nacieron cuando la editorial Scholastic pidió a Brandon Mull (el autor de Fablehaven) que diseñara el mundo en el que se desarrollarían las aventuras, la línea argumental básica, y el primer libro. En notas sucesivas hablaré de los cuatro que se han publicado en castellano hasta el momento. Erdas es un mundo con cuatro continentes principales —Nilo (como África), Eura (como Europa), Amaya (como América), Zhong (como Asia)—, y dos pequeños —Ártica y Stetriol—. Antes de cumplir los doce años, los chicos de Erdas pasan por un ritual en el que descubren si tienen o no un espíritu animal, algo que (al modo de unas conocidas novelas de Philip Pullman) les concede las cualidades propias de... Leer más
El pequeño jardinero, de la hawaiana Emily Hughes, es un niño que cuida de un jardín con una vegetación exuberante, con tantas ganas como poco éxito. Hasta que un día se queda dormido y alguien, ¿un hermano mayor?, cuida el jardín por él. Por un lado, parece difícil comprender parte de la historia: en concreto, que se diga que el pequeño jardinero «pasó todo el día, toda la semana, todo el mes durmiendo», y que no se sepa quién es y de dónde sale y por qué actúa como lo hace el misterioso ayudante. Lo anterior es menos comprensible si, tal como he leído en algunos sitios, la historia se presenta como un canto a la perseverancia, o a la esperanza, o al trabajo en equipo, o al cuidado del medio ambiente. Por otro, la historia como tal puede tener su sentido si la... Leer más
Nieve, de Kaori Tajima, es un elegante álbum bedtime. Su composición es sencilla y eficaz: primero una doble página en la que vemos un bosque con un lecho de hojas rojas en el que caen copos de nieve, y dos animales, el conejito blanco protagonista y otro; después, otra doble página en la que el conejito observa cómo el otro animal se refugia. Los copos de nieve van en aumento y los cuatro animales, a los que se ve pero no se nombra, se refugian, uno en su nido, otro en su refugio, otro en su madriguera, y otro en su guarida. Cuando ya todo está blanco y no hay nadie a su alrededor, el conejito parece sentirse perdido... Las palabras que acompañan las imágenes son las justas. La única frase que los distintos animales repiten antes de ocultarse es la de «¡estoy tan... Leer más
León Tolstoi escribió en 1886 un relato acerca de la codicia y ambición humanas titulado ¿Cuánta tierra necesita un hombre?, del que no hace mucho se han publicado una versión ilustrada por Elena Odriozola, otra con formato de novela gráfica ilustrada por Miguel Ángel Diez, y, más recientemente, una versión en álbum firmada por Annelise Heurtier y Raphaël Urwiller. Como es sabido, su protagonista es un rico campesino siberiano llamado Pahom que nunca está conforme con la tierra que tiene. Después de aumentar sus posesiones varias veces, averigua que los habitantes de la región de Baskiria ofrecen tanta tierra como pueda recorrer en un día de marcha, con la condición de que al atardecer haya vuelto a su punto de partida. En el álbum citado arriba en último lugar,... Leer más
Había visto hace tiempo, y he podido ver con más calma hace poco, Animalium, de Katie Scott y Jenny Broom, un libro de gran formato y espectaculares ilustraciones. Es original su planteamiento: no se presenta como un libro sino como un Museo «abierto las veinticuatro horas del día, los siete días de la semana», del que las autoras son comisarias y en el que no hay capítulos sino seis grandes salas —Invertebrados, Peces, Anfibios, Reptiles, Aves, Mamíferos—, en cada una de las cuales hay varias especies. No es un álbum de conocimientos con bromas gráficas o de contenido —como Bestiario— sino más bien una enciclopedia en la que, dicen las autoras, han organizado las especies «según un orden evolutivo para mostrar cómo el árbol de la vida ha evolucionado desde la... Leer más
Busqué Otto, el perro cartero, de Tor Freeman, gracias a este comentario, en el que se habla de que es un libro de los que divierte y entretiene a un lector pequeño durante mucho tiempo, y que por eso es de los que permanecerá en su recuerdo. En él vemos una oficina de correos con empleados de todo tipo. El protagonista, Otto, es un perro cartero que ha de hacer una ronda y algunas entregas de paquetes: en el invernadero, el Mercado, el Museo de los Dinosaurios, un laboratorio, una orquesta, y un lugar especial. Después de una doble página, con varias viñetas, en las que vemos la preparación de la entrega, viene otra doble página en el lugar de destino, un sitio siempre abigarrado —en el que se le dice al lector que localice al destinatario del paquete y otros objetos—.... Leer más
Los rascacielos, de Albertine y Germano Zullo, es uno de esos álbumes que intentan sacar el máximo partido al formato vertical y cuya ironía de fondo se dirige principalmente a lectores mayores. En sus páginas enfrentadas vemos crecer dos edificios debido a que los dos propietarios compiten para ver cuál construye una casa más alta y cuál va poniéndole los añadidos más llamativos. No faltan las bromas, en las cosas que ocurren y en las cosas que dicen los personajes. En las ilustraciones, que son dibujos de línea, hay muchos detalles que harán sonreír a un lector pequeño. Pero parte del desarrollo de la historia y parte de los comentarios que se hacen sólo serán comprensibles para un lector consciente de muchas tontas vanidades y rivalidades del mundo adulto. Hay más... Leer más
Centauros del desierto, escrita por Alan Le May casi al final de su carrera, es la novela en la que se basó la película de John Ford con el mismo título en castellano. En Texas y Nuevo México, Amos Edwards y Martin Pauley, tío y hermano adoptivo de dos niñas raptadas por una partida de comanches después de asesinar a sus padres y hermanos, las buscan durante años. Aunque regresan a sus casas algunas veces, reemprenden de nuevo la búsqueda, casi inmediatamente, siempre impulsados por noticias que les llegan. Hasta que, por fin, dan con el jefe Cicatriz, que parece ser el hombre a quien desean ver. Historia bien contada de una búsqueda épica y agotadora, con una «terquedad más allá de los límites de la razón», que acaba siendo una leyenda de la frontera. Todo se... Leer más
Poco tiempo después de publicar La lección de August, R. J. Palacio publicó un volumen que contenía tres relatos que, en España, se han publicado en libros distintos: La historia de Julian, El juego de Christopher y Charlotte tiene la palabra. En el prefacio a aquel libro, la autora explicaba que esos relatos formaban parte del trabajo que hizo para escribir La lección de August pero que, como no hacían avanzar su argumento principal, prescindió de ellos. En conjunto dan idea del trabajo que se tomó la escritora para construir su novela inicial y, aunque no son la explicación del éxito que tuvo, sí se pueden ver como una prueba de que la solidez de un buen libro depende de un gran trabajo escondido. En el tercer libro la narradora y protagonista es Charlotte, la chica a la... Leer más
El navegador de cristal, de Nancy Kunhardt Lodge, es una novela precedida de premios y comentarios positivos que la presentaban como un viaje al modo de El mago de Oz. Su protagonista es Lucy Nightingale, una niña a la que su profesora encarga un trabajo sobre algunos pintores del pasado. Para eso, gracias a un perro llamado Wilbur que, con ayuda del Navegador (una especie de brújula con interruptores llenos de joyas, engranajes y demás), logra viajar en el tiempo y hablar con ellos acerca de algunas de sus obras. Lo rescatable de la novela son algunos diálogos de la heroína con los pintores a los que visita: Boticelli, Leonardo da Vinci, Miguel Angel, Jacobo Pontormo, Van Gogh. Hay comentarios certeros sobre sus personalidades —que ayudan a Lucy a superar sus propios complejos... Leer más
En El museo, un álbum firmado por Susan Verde y Peter Reynolds, vemos a una niña que va recorriendo salas de un museo y contándonos cómo se siente arrebatada delante de distintos cuadros y esculturas —de Degas, Rodin, van Gogh, Picasso, Munch, etc.—. Incluso, cuando está delante un cuadro todo blanco, «un lienzo todo en blanco, no me lo creo», piensa «¿será una broma?», y nos dice que entonces cierra los ojos «y pasa algo maravilloso». La idea del álbum es excelente y está magníficamente compuesto, al modo habitual del ilustrador, que siempre busca que las palabras, escritas a mano, formen parte del diseño de las páginas. Ahora bien, conviene advertir que, en la mayoría de los casos, ocurrirá que las niñas o niños lectores del álbum pensarán que a ellos no... Leer más
Tenía pendiente desde hace tiempo poner aquí El libro negro de los colores, de Menena Cottin y Rosana Faría, uno de esos álbumes diferentes que merece la pena conocer. Todo él está en negro. En las páginas izquierdas hay un texto en blanco en la parte de abajo, y el mismo texto, en braille, en la parte de arriba. En las páginas derechas hay unas figuras impresas en relieves suaves, que se corresponden con aquello que se menciona en la izquierda, que siempre es la descripción de un color a través del sabor o el tacto de algo: «el color amarillo sabe a mostaza, pero es suave como las plumas de los pollitos», «el rojo es ácido como la fresa y dulce como la sandía, pero duele cuando se asoma por el raspón de la rodilla», etc. Al final del libro figura el alfabeto en... Leer más
El fugitivo, de John Grisham, es la quinta novelita protagonizada por Theodore Boone. Esta vez, con motivo de un viaje de estudios a Washington, cree ver en el metro a Pete Duffy, un acusado de asesinato que, en la primera novela de la serie, había huido de su ciudad, Strattenburg. Primero lo graba con el móvil y lo sigue un poco. Luego llama a su tío Ike, que se presenta en Washington. Por último, ponen sobre aviso al FBI. Como es habitual en las secuelas, se vuelven a dar las explicaciones pertinentes para quien no haya leído las novelas previas —se recuerdan cuestiones relacionadas con la vida familiar del héroe y los pormenores del asesinato que había cometido Duffy—, y como es habitual en Grisham, hay abundancia de detalles acerca del sistema judicial y las formas de... Leer más
En la LIJ hay libros con un humor del que los niños disfrutan, hay libros con un humor dirigido a que los adultos disfruten de los niños, y hay libros con aires infantiles que ocultan un humor irónico adulto (a veces certero, a veces cínico, a veces con el tono «entérate cuanto antes, la vida es así»…). Un ejemplo de los últimos es Todos mis patitos, de Janosch, un libro basado en una canción popular alemana que, después de un comienzo amable —«Todos mis patitos / nadaban en el lago, / nadaban en el lago. / Las colitas hacia arriba, / las cabecitas hacia abajo»—, presenta como van llegando un labrador, un gran pez, un cazador, un zorro, el lobo, Germán el malvado, un águila, el tejón, etc., hasta que sólo quedan una patita y un patito… que vuelven a tener diez... Leer más
Al final del comentario sobre La luz que no puedes ver incluí un párrafo acerca de «la simultaneidad de los instantes». De lo mismo trata el álbum El primer paso, del norteamericano-australiano Bob Graham. En él todo empieza cuando una niña, Rosie, está a punto de dibujar el último botón de plata de un pato, escena que vemos antes de los datos editoriales del álbum y de que comience la historia, y todo termina cuando lo dibuja. El acontecimiento que narra el album es que Rosie ve que su hermano pequeño Pablo, justo a las diez menos un minuto, da su primer paso, y lo anuncia a su alrededor: a continuación vemos diversas escenas de todo tipo que ocurren al mismo tiempo, de un modo parecido a cómo las veríamos si una cámara se alejase y fuese mostrándonos en ese mismo... Leer más
Es una buena noticia que llegue al mercado español un álbum más de Pat Hutchins, como Una fiesta sorpresa. En él Conejo le dice a Búho, al oído, que va a dar una fiesta que será una sorpresa; y luego la noticia va circulando de animal en animal…, pero levemente deformada según pasa de uno a otro. No es un álbum excepcional como El paseo de Rosalía o ¡Buenas noches, Búho!, pero es igualmente un modelo de claridad gráfica, de sencillez constructiva, y de relato simpático para que los más pequeños disfruten y también aprendan algunas cosas. Pat Hutchins, Una fiesta sorpresa (A Surprise Party, 1991). Pontevedra: Kalandraka, 2016; 32 pp.; trad. de Sandra y Oscar Senra Gómez; ISBN: 978-84-8464-958-8.... Leer más
Los descazadores de especies perdidas es otro feliz relato, en la mejor tradición de las historias inglesas de nonsense, firmado por Diego Arboleda y Raúl Sagospe. Si el título ya indica el tono humorístico, el subtítulo, «Genios e ingenios de los años del vapor», hace pensar enseguida que la historia tendrá ciertos aires steampunk. La narración tiene varios capítulos desconectados entre sí pero que, más o menos, al final confluirán. Después de un episodio de presentación, empieza en 1920, con la pequeña Minerva Vapour, «última descendiente de una familia de genios». Continúa, en 1916-1918, con el relato de la válvula del señor Bisiesto. Luego, en 1840, se narrará «el sueño de Victoria Vapour», una antepasada de Minerva. El siguiente tramo, entre 1867 y... Leer más