Las vacaciones de Pato, el primer álbum del ilustrador israelí Gilad Soffer, es muy divertido y un buen ejemplo de relato metafictivo de los que transmite bien que cuando lees siempre pasan cosas: será su protagonista, igual que los de algunos álbumes de Hervé Tullet o de Mo Willems, quien se dirija imperiosamente al lector y le haga notar que sus acciones le afectan.
Con unas eficaces ilustraciones, en lápices de colores, y figuras graciosas, en la primera doble página se nos muestra a Pato, feliz, en la playa y tomándose un helado en su hamaca y, en la segunda, vemos que el helado vuela de sus manos y a Pato exclamando, enfadado, «¿Se puede saber quién ha pasado la página?» A partir de ahí, en dobles páginas sucesivas, Pato se va indignando cada vez más pues, al pasar cada página, le ocurre algo que no esperaba… El relato tiene un excelente desenlace doble. Uno, que podría ser el comienzo de una historia completamente distinta. Y otro, un toque final como un disclaimer típico, en el que se nos comunica que en todas las escenas de riesgo a Pato lo ha sustituido un profesional de gran experiencia y, por tanto, Pato no ha sufrido daño alguno.
Gilad Soffer. Las vacaciones de Pato (Duck’s Vacation, 2015). Madrid: Bruño, 2020; 38 pp.; col. Cubilete; trad. de Pilar Roda; ISBN: 978-84-696-2638-2. [Vista del álbum en amazon.es]