Cité días atrás la edición adaptada de la Divina Comedia que publicó hace años la Colección Araluce y reeditó Anaya en los años 90 del pasado siglo. Cito ahora dos adaptaciones excelentes de la misma colección: la de la Odisea y la de la Ilíada. Tal como indica Jaime García Padrino, las versiones que hace María Luz Morales respetan tanto los núcleos básicos de las historias originales —más en el caso de la Odisea que en el de la Ilíada que, como es lógico, se amplía para dar a conocer todo el relato de la toma de Troya— como el tono grandioso propio de Homero, como se aprecia bien en las ricas descripciones de los héroes, los ejércitos y las batallas. También son notables las ilustraciones dinámicas y serenas de José Segrelles. Homero. La Odisea relatada a... Leer más
Un par de ojos nuevos es un álbum que busca romper las expectativas de los lectores: es a ellos a quienes, aunque al principio no lo sepan, se les pide que lean y se acerquen a este relato (y luego a la realidad) con ojos nuevos. Esto lo empezamos a pensar cuando se nos dice que Ellen Duthie se ha ocupado de la dramaturgia y los ilustradores Javier Sáez Castán y Manuel Marsol del vestuario, la coreografía y la escenografía —y seguramente también del casting, al menos parcialmente…—, cuando leemos que la colección a la que pertenece se titula «Libros para rumiar», y cuando intuimos las risas de fondo y el espíritu de juego con que sus autores han compuesto la historia. Esta, en apariencia una más de las que habla de la vida propia de los juguetes, está escrita y... Leer más
Leí este verano pasado Los niños, un volumen en el que Miguel Delibes reunió relatos suyos, con niños como protagonistas, «bien sean cuentos o capítulos de novela». Así los presenta el mismo autor en el prólogo: «He aquí, pues, una antología sobre los niños a lo largo de mi obra. Hay en ella muchos niños y muchas obras, siete de ellas novelas (La sombra del ciprés es alargada, El Camino, Mi idolatrado hijo Sisí, Las ratas, Viejas historias de Castilla la Vieja, Las guerras de nuestros antepasados y Madera de héroe) de las que he entresacado uno o varios capítulos alusivos a la infancia, y tres cuentos de mayor o menor paginación, en cualquier caso breves, que se incluyen íntegros: «El Refugio», «La contradicción» y «El conejo», a más de un capítulo de mi... Leer más
Por casualidad cayó en mis manos, hace unas semanas, Las aventuras de Sherlock Holmes, un buen cómic de los italianos Giorgio Trevisan y Giancarlo Berardi. En él se reúnen seis historias del detective: Escándalo en Bohemia, Un caso de identidad, La liga de los pelirrojos, El misterio del valle de Boscombe, Las cinco pepitas de naranaja y El hombre del labio torcido. La introducción al volumen es excelente y explica los méritos de los autores: siguen con fidelidad las historias tal como las escribió Conan Doyle, narran sus argumentos con serenidad, emplean una composición convencional de las viñetas en la página pero alternan escenas donde se acentúa el dramatismo con los primeros planos, dan un tratamiento gráfico diferenciado a los flashback, los dibujos tienen calidad y la... Leer más
Matilda. La niñera mágica, de Christianna Brand, es un libro antiguo, editado en España por primera vez hace unos meses, que reúne tres relatos y que tiene como protagonistas a los traviesos y numerosos hermanos Brown (¿apellido inspirado, tal vez, en Guillermo Brown?) y, sobre todo, a una niñera que recuerda mucho a Mary Poppins y que logra meter a los chicos en vereda. Ella dice de sí misma que «cuanto menos me aceptan (los niños), más me necesitan. Ese es mi método de trabajo. Solo elijo quedarme en una casa cuando los niños no me quieren pero me necesitan. No me marcho hasta el momento en que ya me quieren pero no me necesitan». Son relatos en los que todo es hiperbólico: los niños Brown son tantos que no pueden listarse todos, el nivel de sus travesuras roza lo... Leer más
Cuantos más libros de pequeños conoces, más valoras el mérito de algunos que parecen muy sencillos pero aciertan de lleno en la forma, en el contenido y en el tono. Es el caso de Su propio color, de Leo Lionni, todo un ejemplo de cómo un libro para lectores pequeños puede cumplir la función de sembrar en ellos conocimientos y sensaciones que luego crecerán por sí mismas. El autor simplemente va señalando y mostrando que «los loros son verdes», «las carpas doradas son rojas», «los elefantes son grises», «los cerdos son rosados»…, y que todos los animales tienen su propio color excepto los camaleones… Al final Lionni consigue un álbum que habla bien de los colores y que, además, da una buena lección sobre amistad. Leo Lionni. Su propio color (A color of his own,... Leer más
He leído en los últimos meses varias adaptaciones de clásicos antiguos. Entre otras, de la Divina Comedia, un libro con muchos problemas para ser adaptado a un público joven. Una se tituló Historias de Dante: La Divina Comedia, la publicó hace muchos años la Colección Araluce y la reeditó Anaya en los años noventa: solo trata del Infierno y un poco del Purgatorio, cuenta con unas buenas ilustraciones de José Segrelles, y está redactada con cuidado, pero, al menos en mi opinión, no la veo como un buen modo de acercarse a la obra de Dante. Otra es una edición de Gádir titulada Divina Comedia. Una adaptación para todas las edades: es completa, sintetiza bien la obra, y creo que acierta al sustituir la primera persona del original por una narración en tercera persona; las... Leer más
La mala pipa de Pete Oswald y Jory John, es un álbum que busca ser educativo y ayudar a los lectores a comprender a otros y a comprenderse a sí mismos. La protagonista es una «pipa» (una semilla) muy mala: tiene mal carácter, malos modales, malas disposiciones (debido a una experiencia traumática previa…, claro está). «Pero, ¿qué pasa cuando una mala pipa quiere dejar de serlo? ¿Podrá cambiar sus maaaaaaaaalas maneras?». Las ilustraciones, coloristas y expresivas, hacen gracia. La tipografía es enfática pero está bien usada (se puede apreciar en este enlace de amazon.com, no en el equivalente de amazon.es, donde sólo figura la imagen que abre la historia). Dejando de lado que el libro sea útil o no para discusiones familiares o en clase, como los textos de lanzamiento... Leer más
Mejores amigas es un cómic autobiográfico de Shannon Hale, de incidentes de su vida de adolescente, ilustrado por Leuyen Pham (quien había ilustrado ya otros libros de Hale como La princesa de negro). Es el segundo de una trilogía (que no conozco completa) con iguales personajes. En este, como en ¡Sonríe!, de Raina Telgemeier, la protagonista cuenta sus problemas, en parte propios de la edad y del ambiente colegial, y en parte debidos a su ansiedad, y habla de que su forma de intentar manejarlos pasa por imaginarse y redactar historias. La protagonista vive angustiada porque depende mucho de la aprobación de las demás, en especial de la líder del grupo; porque nunca logra saber qué programas de televisión o qué canciones son las que debe conocer para estar en el ajo; y en ese... Leer más
La preocupación de Lucía, de Tom Percival, es un álbum bien compuesto, con simpatía y amabilidad, que encaja de lleno con esta línea, tan frecuente hoy, de presentar emociones o estados de ánimo de los niños. Su protagonista, Lucía, una chica que siempre había sido muy alegre, descubre un día que tiene una preocupación…, que va creciendo y ocupando cada vez más espacio en su vida. Al fin descubre por sí misma cómo lidiar con ella cuando empieza a tratar a un niño solitario que tiene sus propias ansiedades (pues en la historia no aparece ningún adulto a quien puedan confiarse). Como es habitual en él, el autor sabe hacer atractiva su historia y a sus personajes. Tom Percival. La preocupación de Lucía (Ruby’s Worry, 2018). Madrid: SM, 2018; 40 pp.; trad. de Inés... Leer más
Cayeron en mis manos hace unas semanas unos Cuentos populares británicos recopilados y recontados por Kevin Crossley-Holland. El autor indica en el Prólogo que eligió «treinta y nueve de entre los más de diez mil cuentos populares británicos que existen» atendiendo a que hubiera mucha «variedad de personajes: reyes y héroes, soñadores y locos, gigantes, habitantes del mar, bestias fabulosas (...), fantasmas y todo tipo de seres mágicos». Entre ellos hay cuentos muy conocidos, como Dick Whittington, Jack y el tallo de las judías, y Ricitos de oro y los tres osos. Al final, con buen criterio, el autor explica de dónde tomó cada cuento y algunas opciones que tomó al recontarlos. Buen libro. Kevin Crossley-Holland. Cuentos populares británicos (The British Folktales,... Leer más
El increíble barco del Capitán Marco, de Cecilia Moreno y Alicia Acosta, es un álbum sobre el mundo imaginativo de un niño llamado Marco, a quien se nos presenta como viviendo en el desierto y que un día, «cansado de tanta arena y sequedad», decide ponerse al mando de un barco, con una tripulación formada por sus amigos, en busca de aventuras y un gran tesoro. El álbum propone al lector que construya su propio barco de papel y en él replique lo que les va sucediendo a Marco y sus marineros. Las excelentes y sugerentes ilustraciones de los escenarios y de las figuras de los personajes, representados como piratas característicos, así como de los distintos seres con los que van encontrándose, están confeccionadas a base de bloques de color con técnicas digitales: en el vistazo... Leer más
Como Mi gran árbol, Las estrellas, de Jacques Goldstyn, es un álbum largo cuyo argumento se cuenta con unos dibujos que recuerdan los de Sempé. La historia tiene lugar en Montreal y se centra, primero, en la amistad infantil entre Jacob, un niño judío, y Aisha, una niña musulmana, que se conocen en un parque y descubren que comparten entusiasmo por las estrellas. Pero a los padres de los dos les disgusta que sean amigos y su relación termina cuando la familia de Aisha se traslada de barrio. Después la narración continúa contando la vida y el crecimiento de Jacob, poco interesado en el negocio familiar y empeñado en conocer más las estrellas y llegar a ser astronauta. Relato emotivo, contado sin énfasis, que habla bien de cómo cuaja una amistad infantil gracias a una pasión... Leer más
Alma de elefante, de Andrea Maceiras, es una novela que se desarrolla, dice la narración, en un rincón de Asia. Su narrador se llama Suy, tiene diez años cuando suceden los acontecimientos y debe estar atento a su hermana gemela Lawen, que tiene alguna clase de trastorno autista pues no es expansiva con sus sentimientos y se inquieta mucho en las situaciones nuevas. La historia comienza cuando Suy y Lawen siguen en la selva las huellas que va dejando un elefante, cuyo nombre luego sabrán que es Tep, y encuentran herido al chico que lo llevaba. Cuando lo conducen junto a la viejecita Champey, que vive cerca, y saben que tardará en curarse, cae sobre Suy y Lawen la misión de conducir al elefante a una tierra donde podrá vivir seguro, pero no conocen bien el camino. La voz narrativa... Leer más
El gato que amaba los libros, de Sosuke Natsukawa, es una novela de gran éxito en muchos países, según parece. Su protagonista es Rintaro Natsuki, un hikikomori, un chico tímido y retraído, huérfano, de unos dieciséis años. Todo comienza cuando se queda como propietario de una vieja librería que regentaba su abuelo. Se plantea dejarla pero entra en escena un insolente gato hablador, llamado Tora, que le desafía y le propone tareas. A través de los pasillos de la librería, que se convierten en el acceso a mundos desconocidos, Tora conduce a Rintaro frente a cuatro personajes. Uno, que piensa que lo importante es leer cuantos más libros mejor; otro que desea simplificar los libros y se conforma con sinopsis brevísimas; un tercero, un editor que solo desea publicar libros con... Leer más
De mal humor, un texto de Charlotte Zolotow titulado The Quarreling Book y editado en 1963 como álbum ilustrado por Arnold Lobel, fue publicado de nuevo en 2004, pero en francés y con el título Mauvais Poil, con unas excelentes y cálidas ilustraciones de la canadiense Geneviève Godbout. El relato comienza cuando una mañana lluviosa y gris el señor James sale de casa con prisa y se olvida de darle un beso a su mujer; la señora James traslada su mal humor a su hijo Jonathan cuando baja a desayunar; Jonathan se comporta agriamente con su hermana Sally, Sally lo hace en el colegio con su amiga Marjorie, esta con su hermanito Eddie, y este, por último, con su perro Charlot que, sin embargo, sigue siendo igual de cariñoso con Eddie… Y, a partir de ahí, todo cambia. La... Leer más
Bajo el título Banner. Historia de una ardilla, de Ernest Thompson Seton, se contienen ese relato (Bannertail: The Story of a Graysquirrel, 1922), y otros tres más cortos: Lobo, el rey de Currumpaw (Lobo) —ya mencionado en Los lobos de Currumpaw y en Lobo: el rey de Currumpaw—, Cuellirrojo, la historia de la perdiz del valle del Don (Redruff), Jirón, la historia de un conejo de cola de algodón (Raggyluff), y Raposa, la zorra de Springfield (Vixen). Los relatos originales pueden leerse en el proyecto Gutenberg: el primero en este enlace y los restantes en el correspondiente a una edición titulada Lobo, Rag and Vixen (1899-1902). Y, aunque no se lean, vale la pena echar un vistazo a esas ediciones para conocer y recrearse en los magníficos dibujos con los que Seton acompañaba... Leer más
La versión en cómic que firma Sandra Hernández de El hombre que plantaba árboles, de Jean Giono, es una adaptación respetuosa del original que gustará a quienes leyeron ya el relato y a quienes no lo conozcan todavía, que seguramente se sentirán animados a buscarlo y leerlo por primera vez. Las ilustraciones recuerdan un poco las pinturas naif de Henri Rousseau, que tan bien le van a esta historia; el colorido de la mayoría de las escenas contrasta con los tonos más oscuros de unas pocas viñetas que presentan momentos del mundo en guerra. Sandra Hernández. El hombre que plantaba árboles (1953). Basado en el relato de Jean Giono. Barcelona: Bang, 2021; 40 pp.; col. ClasiCómic; ISBN: 9788418101830.... Leer más
Serafina: el cumpleaños, de Albertine, es un álbum divertido para primeros lectores. Es una buena recomendación, antes de abrir el libro, echar un vistazo a la contracubierta: en ella conocemos los nombres de los extravagantes personajes que viven con Serafina. En las sucesivas dobles páginas los veremos hacer toda clase de preparativos; luego llegarán más invitados no menos extravagantes y tendrán la fiesta; por último, los invitados se marcharán. Son muchas las pequeñas historias y los detalles curiosos en el interior. En cada doble página hay un color dominante que más o menos va de acuerdo con el estado de ánimo de cada situación. El álbum transmite bien el espíritu caótico y frenético de la fiesta. Puede servir al pequeño lector para que aumente su vocabulario y... Leer más
En la misma línea de La canción del oso y Osito y un rayo de sol se sitúa La gran casa de osito Pompón, de Benjamin Chaud, un álbum cuyo argumento recuerda un poco el de Ricitos de Oro. La familia Oso, compuesta por los padres, el pequeño Osezno, y osito Pompón, están en el bosque pero, se nos dice, Osito Pompón se aburre mogollón, por lo que decide dejar el bosque e irse a una gran casa humana. Sabe que los osos no tienen derecho a entrar en las casas humanas pero él considera que puede hacerlo pues quiere ser un niño humano… Así lo hace y, después de divertirse un rato, empiezan toda clase de sonidos raros que le hacen entrar en pánico. Relato bienhumorado en el argumento y en las imágenes. Hay varias dobles páginas con multitud de detalles a los que atender... Leer más
Como esperarán los conocedores de Shinsuke Yoshitake, su álbum o cómic ¡No soy un monstruo! está lleno de ingenio en las situaciones que presenta y en las soluciones que les da la protagonista. Esta va contando que le dicen cosas horribles y que la gente es odiosa; va deseando toda clase de males a quienes la tratan y se le ocurren formas de fastidiar a quienes la molestan; busca formas de intentar llevar mejor los días malos aunque también reconoce que a veces un detalle inesperado le quita las malas pulgas, y expone sus estrategias para prepararse para los momentos peores; pero, sobre todo, se imagina que las personas que no le gustan están manipuladas por un monstruo que las azuza, se imagina cómo es y cómo actúa el monstruo, y también piensa trucos para fastidiarlo y que... Leer más
La isla de los frailecillos, de Michael Morpurgo, es un relato excelente cuyo atractivo se multiplica por las buenísimas ilustraciones de Benji Davies, algunas a doble página y varias de página completa. El niño narrador, Allen Williams, habla de que, cuando tenía cinco años y naufragó su barco en las costas de Cornualles, Benjamin Postlethwaite, el silencioso y adusto farero de la isla de los Frailecillos, arriesgó su vida para salvarle a él, a su madre, y a otros treinta pasajeros de una goleta que viajaba de Nueva York a Liverpool. El farero, además, le regaló un cuadro, pintado sobre una madera, que había hecho de una goleta de cuatro mástiles como la que había naufragado. Desde los lugares en los que después vivió —con sus abuelos, en un internado, con su... Leer más
Me alegran las ediciones de álbumes antiguos que tuvieron éxito en su tiempo porque, con mucha frecuencia, son toda una lección para quien compone y edita álbumes hoy. Un caso es Pretzel, de Margret y H. A. Rey, una historia que cuenta que nacen unos cachorros de perros-salchicha; que Pretzel es uno de ellos y, enseguida, crece y acaba siendo más largo que sus hermanos y hermanas; que después, aunque gana concursos de belleza, no le hace caso justo quien él desea que se lo haga, una perra de lo más altiva llamada Greta… Aparte de que sea un álbum para entusiastas de los perros, o al menos de los teckel, es un álbum permanente pues cuenta un relato de amor sencillo, sin adornos, de los que además muestra que, a veces, lo que parece un defecto acaba siendo una ventaja. Las... Leer más
El elefante, de Peter Carnavas tiene como protagonista a una niña, Olivia, cuya madre ha fallecido y que ve a su padre, muy abatido, siempre acompañado de un gran elefante. Olivia intenta modos de hacer desaparecer el elefante pero, aunque cuenta con el apoyo de su abuelo, no le resulta fácil. Novela corta muy premiada en Australia, bien contada y acompañada de unos excelentes dibujos de línea, muy a tono con los sucesos de la historia. La forma de superar la dificultad por parte de los personajes, no es, para mí al menos, convincente; a diferencia, por ejemplo, de un relato de planteamiento parecido como Mimi. Así, nada se dice de la posible tristeza de la niña ante la falta de su madre, ni hay nada parecido a rezar por parte de ningún personaje. Además se da por supuesto, pues... Leer más
Fiesta de pijamas y otras historias, de Sergio Ruzzier, es el tercer libro protagonizado por la pareja de Fox y Chick. De nuevo se nos cuentan tres historias: «Fiesta de pijamas» —Chick se presenta en casa de Fox, a la noche, para una fiesta de pijamas…—, «El martillo» —Chick encuentra un martillo que perdió… y lo vuelve a perder—, «La sorpresa» —Chick pide a Fox que le prepare una fiesta sorpresa de cumpleaños… —. A quien haya leído alguno de los relatos previos ya no les sorprenderá el comportamiento paciente de Fox y el insistente de Chick, pero les harán gracia igual las ilustraciones tan simpáticas y los golpes de buen humor de la historia. De paso, como quien no quiere la cosa, los lectores más pequeños aprenderán aspectos importantes de la... Leer más
Va la vaca, de Simone Rea y Pablo Albo, presenta distintos animales humanizados: después de la figura y el nombre en una doble página, otra doble página vuelve a mostrar el animal con una expresión tomada de su nombre. Así, La vaca… / va, El jabalí… / ¡ja!, El bisonte… / bis bis, etc. Es, pues, un álbum para compartir y para jugar sacando partido humorístico a las palabras. Empieza y termina con la vaca, tiene un falso final en el medio, y en algunas ilustraciones aparece, junto al animal correspondiente, una cacatúa despistada o entrometida. Un álbum con imágenes graciosas en las que fijarse, con subrayados en la tipografía que señalan los sonidos, con una secuencia de ritmo perfecto, y con la función de ser un aperitivo para prolongar el juego con más animales u... Leer más
Hay álbumes como Siempre pienso en ti o Siempre te querré que son como declaraciones de amor de las madres hacia los hijos, y que subrayan cómo siempre estarán ahí, pase lo que pase, a lo largo de toda una vida. Uno formidable que habla de lo mismo pero recorriendo toda la vida de la protagonista, desde que nace hasta que ella misma tiene otra hija, es Algún día, de Peter Reynolds y Alison Meghee. Esta misma idea, formulada de un modo más general, es la del álbum también titulado Algún día y firmado por Mónica Gutiérrez Serna. El texto que acompaña las ilustraciones —imágenes estilizadas y coloristas de barcos, puertos y mares, que se presentan reducidas a sus formas y colores básicos— es el de una madre que habla a su hijo, que mira el mar con él, y que, por... Leer más
Hay álbumes que no se dirigen tanto a los niños como a los adultos como con la intención de transmitir el encanto de la infancia y de revivir los sentimientos de afecto que suscita un niño. En esa dirección va Nuestra niña, de Anthony Browne, un buen álbum precisamente por su falta de pretensiones y su sencillez argumental y compositiva (que, sin embargo, pocos podrían imitar). La cubierta sirve de anuncio de lo que aparecerá en el interior, aunque luego no se nos hablará de los sentimientos que despierta la niña en distintos miembros de su familia sino que, simplemente, se mostrarán sus cualidades y habilidades: la veremos con distintos atuendos y disfraces, casi siempre de figura completa pero, a veces, en primeros planos con gestos graciosos. Las imágenes son simpáticas y... Leer más
Cuando hay un libro excelente dentro de un subgénero, como Los incursores, es difícil valorar cómo apreciarán los lectores que no lo conozcan otro libro que use parecidos recursos, como Los miniseres, de Eva Manzano. También en este caso la historia trata de que los personajillos protagonistas, que viven en distintos lugares de las viviendas humanas tienen problemas y, contra todas sus reglas de prudencia y discreción, entran en contacto con niñas y niños. A diferencia de los incursores, iguales entre sí, los miniseres me han parecido demasiado variados: sofazanes o sofazosos, alfombrillos, parédulas, cristalritas, mesaposas y sillapejos, motas de polvo, minifantasmas, armarionones o puertitis, chupapasillos, bolampompas, basuretas… Por otro lado, y esta es otra diferencia con... Leer más
Nikolai el Gimnasta y un ladrón muy plasta, de Štefan Turk y Klarisa Jovanović, es un relato con un protagonista y unos ambientes de aires decimonónicos. En él se cuenta que Nikolai, un tipo que «hacía mucho ejercicio / porque este era su oficio» y que es «supermuculoso / como un barman coloso», ve cómo un hombre misterioso en un parque roba un sonajero a un bebé pero no reacciona a tiempo; que, «unos días más tarde», vuelve a ver en acción «al rufián de ayer» (aquí parece haber un desajuste), pero se le escapa de nuevo; pero, unos días después, lo encuentra otra vez en su barrio… El álbum pretende y consigue hacer pasar un buen rato al lector. Para eso se apoya en unas rimas graciosas y en unas imágenes, en tonos ocres y rojos, que desean avivar la imaginación... Leer más
La guerra de los botones, de Avi, es un buen relato que no está pensado para quienes deseen, sin más, un libro de aventuras o de intriga. Agosto de 1914. Pueblo polaco rodeado de bosques. Al principio está controlado por soldados rusos pero, después de un bombardeo, lo abandonan; poco después el pueblo es ocupado por soldados alemanes. La narración está completamente centrada en una pandilla de siete chicos que siguen a dos líderes: Jurek, un chico muy competitivo y violento, y el protagonista y narrador, Patryk, que hace frente a Jurek para que no se salga con la suya, por más que sabe que no debería dejarse arrastrar por él. El título alude a que los chicos se desafían entre sí a ver quién logra robar, del modo que sea, los mejores botones a los trajes de los militares... Leer más
Museum Trip, de Barbara Lehman, es un álbum sin palabras no publicado en España. Es sencillo y eficaz: un autobús escolar llega a un museo; los niños pasan de sala en sala; el protagonista se despista del grupo y, cuando se quiere dar cuenta, está perdido; atraviesa una puerta y entra en una sala distinta; en ella se queda fascinado por unos laberintos, que ve en una vitrina, y se va perdiendo en varios imaginativamente…; cuando al fin sale, reencuentra a sus compañeros. La historia habla bien de cómo funciona, a veces, la imaginación de un niño, y puede ser hipnótica para los entusiastas de los laberintos. Además, hace pensar en que cada visita a un museo es una nueva oportunidad y en cómo, en cada una, puede saltar una sorpresa inesperada; también, en que cada... Leer más
Minipedia, de Ingela P. Arrhenius, es un álbum para prelectores de gran formato y hojas en cartoné, cuyo subtítulo explica bien su contenido: «más de 200 palabras ilustradas para las personas pequeñas». Es un álbum en el que se nombran y muestran figuras de seres vivos y de objetos que se agrupan por alguna cualidad o característica. Son nueve dobles páginas, cada una con un color clarito de fondo, tituladas: «Dulce y suave como…» —una mantita, un plátano...—, «¡Cómo pica!» —una barba, una avispa...—, «¡Qué frío!» y «¡Está caliente!» —un helado, el fuego...—, «¡Qué ruido!» —una gaviota, un claxon...—, «¡En el cielo!» —un rayo, un águila...—, «¡En el agua!» —una gamba, un ancla...—, «¡Mi casa!» —la charca, la... Leer más
Por donde entra la luz, de Lucía Fernández Alcalde, puede ser una excelente lectura veraniega. La narradora y protagonista, Elena, ha suspendido asignaturas en junio, y para que pueda recuperarlas y presentarse a la selectividad, sus padres deciden que pase los meses de verano con su abuela, en un pueblo de Levante. Allí, además de estudiar, hará buenas amigas, cambiará ciertos planteamientos de su vida y encontrará novio. Es una novela bien escrita (Elena es lectora de poesía selecta) y tiene buenos diálogos (que, como suele ocurrir en este tipo de novelas, tal vez sean demasiado buenos...); está bien atrapado el tono insolente y desafiante propio del adolescente con sus padres, y están bien presentadas las perplejidades y los conflictos interiores de la protagonista; hay... Leer más
¡Deprisa, deprisa!, de Clotilde Perrin, es un álbum simpático, bien construido, que parcialmente vuelve a incidir en la importancia de que los niños no lleven unas vidas aceleradas y sepan pararse a mirar alrededor (como Espera o Un camino de flores). El libro se abre con una «Cita para los mayores» —«La vida es una intensidad, el tiempo una medida» (Pascal Quignard) y una «Cita para los pequeños» —«¡Deja de meterme prisa, que no he acabado de jugar!» (Hélène, mi hija). En primera persona, una niña cuenta cómo comienza el día, de modo muy apresurado, levantándose, desayunando, yendo al colegio, montándose primero en un autobús para una excursión al campo, luego en una lancha y después en un avión… que pierde pues, dice, «una vez más no he sido lo bastante... Leer más