Natalia Ginzburg describe así su oficio como escritora: «Normalmente, no da mucho dinero, es más, para vivir siempre hay que hacer otro trabajo al mismo tiempo. A veces también da un poco: y tener dinero gracias a él es una cosa muy dulce, como recibir dinero y regalos del ser amado. Así es mi oficio. No sé mucho, digo, sobre el valor de los resultados que me ha dado y que podrá darme, o mejor dicho, de los resultados obtenidos conozco el valor relativo, aunque no el absoluto. Cuando escribo algo, suelo pensar que es muy importante y que yo soy una gran escritora. Creo que a todos les ocurre igual. Pero hay un rinconcito de mi alma donde sé muy bien, y siempre, lo que soy, es decir, una escritora pequeña, muy pequeña. Juro que lo sé. Pero no me importa mucho. Sólo que... Leer más
El subtítulo de ¡Abajo el colejio!, de Geoffrey Willans y Ronald Searle, es «Un manual de instrucciones para la vida escolar destinado a alumnos y padres». Y, en la misma portadilla de presentación, bajo la palabra Contenidos, se dice: «Información privilegiada sobre colejios, empollones, chibatos, canallas, direztores, criquet, guarros, habusones, padres, profesores, hartistas del engaño, malas llerbas en jeneral, bromitas de dormitorio y desastres diversos… En realidad… EL TINGLADO AL COMPLETO». El narrador es nigel molesworth (con minúsculas) y el colegio del que habla es San Custodio, «un sitio húmedo y cutre», un «balle de lágrimas». Como corresponde a textos e imágenes publicadas, hace décadas, en la revista Punch, los destinatarios naturales del relato no... Leer más
Un libro en inglés, de ambiente hispano, que fue importante hace años y que tiene como protagonista a un simpático pastor de ovejas de doce años: ...And Now Miguel, de Joseph... Leer más
Con motivo de su 90 cumpleaños la prensa inglesa ha hablado mucho últimamente de Judith Kerr, como en este artículo. Por eso he añadido en la página uno de sus álbumes más populares Mog: the Forgetful Cat (1970), un olvidadizo personaje... Leer más
Tiempo atrás puse una nota titulada El gólem. La misma historia contada de otra manera: Jorge Bergoglio: «Cuando el hombre se ensoberbece, crea un monstruo que se le va de las manos. Es importante para la ciencia ponerse el límite para poder decir: “Desde acá ya no creo cultura sino que es otra forma de incultura, que es destructiva”». Abraham Skorka: «Ése es el mensaje que encierra la historia del Golem. En Praga, un rabí creó un muñeco, un autómata, para defender a los judíos de los ataques antisemitas. Le grabó la palabra “emet” en la frente, el tetragrama de Dios puso en su boca, y ordenaba al Golem que le sirviera a él. Una versión de la leyenda dice que un viernes, antes del Shabat, el muñeco se independizó y empezó a romper todo. El rabí le borró... Leer más
Lord Kitchener (1850-1916), un militar con una larga carrera en Sudán, Sudáfrica e India, fue nombrado secretario de Estado para la Guerra cuando comenzó la primera Guerra Mundial. Era un hombre admirado y querido por la gente pero rechazado por la clase política, pues «nunca fue y nunca quiso ser ni más ni menos que un buen militar», algo que Chesterton apreciaba mucho. Falleció durante un viaje a Rusia cuando su barco se hundió al chocar con una mina alemana cerca de las islas Orcadas. Pocas semanas después, el 17 de junio de 1916, Chesterton publicó «The Death of Kitchener», un artículo en The Illustrated London News elogiando las cualidades que, como jefe militar, había demostrado en el pasado: la de ser un hombre de tratados y no de guerra, un hombre de mente abierta y... Leer más
Sonallah Ibrahim, un conocido escritor egipcio, recrea en A escondidas algunas escenas de su infancia en un barrio popular de El Cairo, el año 1948. Un niño de diez años sin nombre narra, en presente, la vida cotidiana con su padre, un funcionario jubilado. Cuenta incidentes de su vida familiar y vecinal, deja entrever su enorme nostalgia de su madre, e indica de modo bastante aséptico los descubrimientos de la vida que hace o intuye. Al fondo, a través de lo poco que comprende el narrador, se aprecian las tensiones políticas del momento. Todo se cuenta con frases cortas, de forma sobria pero, a la vez, detallada, como con la intención de acentuar, a los ojos del lector, la curiosidad e ingenuidad infantil. No es una lectura memorable, pues nada digno de mención ocurre ni los... Leer más
Un lector ingenuo de novelas juveniles escritas en las últimas décadas y ambientadas en el pasado podría suponer que, continuamente, las chicas se disfrazaban de chicos para ir allí donde nadie las dejaba ir... Esto hay quien lo plantea mal pero hay quien lo plantea bien..., tal como una novela de hace algún tiempo ya: La Expedición del Pacífico, de Marilar... Leer más
Dos libros infantiles, algo distintos a los habituales, del israelí David Grossman: Un niño y su papá, que son seis relatos cortos, y Duelo, sobre la amistad de un chico con dos... Leer más
Entre los álbumes humorísticos de Babette Cole de hace ya un tiempo, hubo varios que presentaban cuentos populares donde las chicas ocupaban el lugar de los chicos y los chicos el lugar de las chicas, como La princesa listilla, El príncipe ceniciento o ¡Tarzana! Tienen gracia pero, como corresponde a este tipo de relatos que triunfan, en cuanto la marea baja ya no vuelven: de hecho, ninguno está en el mercado español ahora. (Los pongo ahora también porque no estaban aquí todavía pero los cito en Emociones en... Leer más
Abraham Skorka: «El libro de Job nos da una gran enseñanza, porque —en síntesis— dice que no podemos entender cómo se manifiesta exactamente Dios en las acciones individuales. Job, que era un hombre de justicia, de rectitud, quiere saber por qué perdió todo, hasta su salud. Sus amigos le dicen que Dios lo castigó porque ha pecado. Él les contesta que aun si hubiera pecado, no era para tanto. Recién cuando aparece Dios, Job se queda tranquilo. No obtiene una respuesta, lo único que existe es un sentir del Señor. De este relato se pueden deducir varias cosas que marcan mi personal percepción de Dios. Primero: que los amigos de Job —que defendieron una tesis que decía “has pecado, por ende, Dios te ha castigado”, transformando a Dios en una especie de computadora que... Leer más
En los próximos sábados pondré varias notas para completar el plan de reseñar obras de Chesterton. Empiezo por The Blatchford Controversies. En su juventud, a Chesterton le causaron gran impresión los artículos del fundador y editor del dominical The Clarion (El Clarín), Robert Blatchford, un hombre influido por William Morris y sus ideas acerca de las sociedades preindustriales donde los trabajadores eran artistas y artesanos. Un libro de Blatchford titulado Merrie England (1893), muy vendido, tuvo mucho peso en la gran admiración de Chesterton por la Edad Media, aparte de confirmar sus simpatías primeras por las ideas socialistas. Pasado el tiempo diría que se hizo socialista porque, cuando era joven, le parecía intolerable no serlo ya que los socialistas parecían ser... Leer más
Hace años leí El final del cielo, de Alejandro Gándara, un buen relato cuyo protagonista reflexiona sobre sus cobardías y dejaciones como padre al encontrarse en una situación... Leer más
Dos valiosas novelas juveniles no traducidas al castellano: Moccasin Trail, del Oeste, y The Golden Goblet, ambientada en el antiguo Egipto, de Eloise Jarvis McGraw. Están ambientadas con rigor, son ricas en vocabulario y su acción es lenta, pues el interés y el punto fuerte de la escritora es mostrar los conflictos emocionales de sus héroes. Es decir, requieren atención y... Leer más
Muchos buenos escritores tenían una gran inclinación, y con frecuencia un gran talento, para la pintura o el dibujo (Lewis Carroll, Ruyard Kipling, G.K. Chesterton…). Es como si sus creaciones literarias dependieran muchísimo de las imágenes que primero tuvieron en la mente y que incluso, en muchos casos, intentaron llevar antes al papel. Un buen ejemplo es Tolkien, como se puede ver en J.R.R. Tolkien: Artista e ilustrador, un libro dedicado al estudio de todas las imágenes que preparó él mismo para sus obras. Los autores hablan de las influencias artísticas que Tolkien hizo suyas —pintores como Van Gogh o Munch, ilustradores como Arthur Rackham— y se indican otras de las que intentó distanciarse —como del ornamentalismo de Kay Nielsen—.... Leer más
En paralelo con La recta y el punto, de Norton Juster, por razones formales, aunque con otras intenciones en su confección, recuerdo un álbum importante (que cito en Emociones en construcción) que no había puesto aquí todavía: La línea, de Ayax Barnes y Beatriz Doumerc.... Leer más
Los relatos protagonizados por El Pequeño Rey, de Javier Sáez Castán, son un acercamiento perspicaz y singular al mundo imaginativo del niño. En el primero, el protagonista se da cuenta de que tiene tres soldados rotos y sale a buscar bichitos para su ejército, gorgojos, cochinillas y cucarachos. En el segundo piensa que el sonajero no es suficiente y sale también a formar una orquesta más rica con grillos, cigarras y chicharrones. En el tercero, harto de compota, sale a buscar ayudantes en los gorgojos, cochinillas y gusarapos, para fabricar platos más variados. Los tres álbumes cuentan las historias con ilustraciones circulares, tal vez como si estuviéramos contemplando lo que ocurre por un agujero. Los tres tienen la misma estructura: un contratiempo inicial, una... Leer más
Abraham Skorka: «En la literatura rabínica se pregunta qué es lo que no le gustó a Dios en la torre de Babel. ¿Por qué frenó la construcción confundiendo las lenguas? La explicación más simple de la lectura del texto es porque esas construcciones que trataban de llegar a los cielos eran parte de un culto pagano. Implicaba un acto de arrogancia con respecto a Dios. El midrash dice que a Dios le molestó que a los constructores de la torre les importara más perder un ladrillo que si desde semejante altura se cayera un hombre. Eso es lo que pasa hoy, es el juego entre el don y la tarea. El equilibrio tiene que ser exacto, el hombre tiene que progresar pero para volver a ser hombre. Si bien el que sembró y generó todo es Dios, el centro de lo material y de la gran obra divina es... Leer más
Para los seguidores de Chesterton es una gran noticia la nueva edición de Ortodoxia. En sábados sucesivos volveré a poner aquí reseñas de algunos libros de y sobre Chesterton qué faltaban para completar este panorama que muy pronto, espero, será un... Leer más
En el postfacio a Enterrado en vida se cuenta que Arnold Bennett (1867-1931), un novelista inglés muy prolífico y popular en su tiempo, perdió relieve debido al enfrentamiento que tuvo con Virginia Woolf y el círculo de Bloomsbury. La principal razón es que a Bennett no le interesaba entrar en las interioridades de sus personajes sino, principalmente, ganar dinero y lograr buenas tramas que entretuvieran al lector: «si alguien piensa que mi objetivo es el arte por el arte siento decirle que está tremendamente equivocado», decía. No es extraño que se le acusase de «ser un mercenario de la sintaxis, un mercader del párrafo y un fariseo de la literatura». Bien, pues para comprobar su valía es una buena recomendación Enterrado en vida, que su mismo autor consideraba la mejor... Leer más
Aunque admiro mucho a Roberto Innocenti y aunque me parece magnífica esta reseña de La niña de rojo —pues dice todo lo que hay decir y subraya la importancia y la calidad del diseño, la crítica social y política que contiene la trama, el contraste de las dos versiones del relato (la de Perrault y la de Grimm)—, debo decir que no me gusta la forma en que se cuenta la historia. Una primera razón se podría buscar en la edad (la mía): parece que cuando uno va siendo mayor tal vez tiende a estar más apegado a versiones anteriores de los relatos. Pero esto no está claro: cuantas más versiones conoces de algunas historias más facilidad tienes para ver los méritos de las nuevas, méritos que no pueden apreciar igual quienes se acercan al relato por primera vez. En cualquier... Leer más
De las novelas publicadas recientemente y citadas en la página, las que me han gustado de los últimos meses son: El libro de la señorita Buncle. D. E. Stevenson. El caso de la sirvienta desaparecida. Tarquin Hall. El caso del hombre que murió riendo. Tarquin Hall. Los litigantes. John Grisham. El despertar de la señorita Prim. Natalia Sanmartín. Libros de no-ficción: El viaje de Bilbo. Joseph Pearce. Contra toda esperanza: memorias. Nadiezhda Mandelstam. La vida inmortal de Henrietta Lacks. Rebecca Skloot. Haciendo historia. John Elliott. El mundo invisible de Hayao Miyazaki. Laura Montero... Leer más
Libros infantiles, casi juveniles algunos, que me han gustado más en los últimos meses: En busca de WondLa. Tony Diterlizzi. La lección de August. R. J. Palacio. El Falso Príncipe. Jennifer Nielsen. Como un galgo. Roddy Doyle. Cuentos de Diego y Daniela. Verónica Uribe. Muncle Trogg. Janet Foxley. Libros juveniles: Maravillas. Brian Selznick La isla de Bowen. César Mallorquí Bajo la misma estrella. John Green. El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares. Ramson Riggs. Verano en English Creek. Ivan Doig. Cuando me alcances. Rebecca Stead. Cosas que nadie sabe. Alessandro D’Avenia. Loba. Verónica Murguía. El acusado. John Grisham. Entre tonos de gris. Ruta Sepetys. Álbumes o novelas... Leer más
Los mejores álbumes para prelectores leídos en los últimos meses: Te quiero un montón. María Luisa Torcida y Juan Carlos Chandro. El libro del oso. Georg Hallensleben y Kate Banks. ¡Oh no, Lucas! Chris Haughton. ¿Cómo te sientes? Anthony Browne. Te desafío a no bostezar. Serge Bloch y Hélène Boudreau. ¡Mamá! Mario Ramos. La brujita Mimí. Kathleen Amant. Para primeros lectores: Historia de Nuk. Natascha Rosenberg y Paloma Sánchez Ibarzábal. ¡A la cola! Tomoko Ohmura. Un regalo muy especial y Entre monstruos. Vanessa Cabrera y Amaia Cia. Un perro. Alberto Gamón y Daniel Nesquens. Mamá Muu. Sven Nordqvist y Jujja Wieslander. ¡Todos a comer! Eva Armisén y Marc Parrot. Para... Leer más
La influencia en nosotros de las ficciones la describe así Frank Kermode: «Nunca corremos el peligro de creer que la muerte del Rey Lear, que tanto explica, sea verdad. A la afirmación de que murió en tales y cuales circunstancias —pronunciando estas palabras sobre el cuerpo de Cordelia, pidiendo un espejo, jugando con un botón— damos un asentimiento experimental. Si lo hacemos bien, nos beneficiamos porque nunca volveremos a adoptar del todo la posición ante la vida y la muerte que teníamos antes. Desde luego, puede decirse que al cambiar nosotros mismos hemos cambiado el mundo de la mejor manera indirecta posible». Frank Kermode. El sentido de un final. Estudios sobre la teoría de la ficción (The Sense of an Ending, 1966). Barcelona: Gedisa, 2000, 2ª ed.; 175 pp.; col.... Leer más
Algunos textos de Emociones en construcción: «Las emociones propias de los niños y de los jóvenes, las que figuran en los libros que se les dirigen y que, por lo general, ellos aceptan con gusto, coinciden con las de la metáfora que, durante la Edad Moderna, se asociaba con la identidad: la figura del peregrino. En cambio, no coinciden con las que nos sugieren las metáforas posmodernas de la identidad: la del turista, o la del paseante, o la del vagabundo». «Los álbumes ilustrados emplean recursos como la autorreferencialidad, la metaficción o la ironía, precisamente para orientar a sus lectores dentro de un mundo confuso. Más aún: en el caso de los mejores álbumes se ve cómo esos recursos están puestos al servicio de lograr una claridad narrativa que deje fuera lo... Leer más
Unos párrafos de Cosas que nadie sabe, a propósito de la lectura de grandes libros. Hay un momento de la historia en el que la protagonista se ve retratada cuando leen en alto, en clase, La Odisea: «¿Es que la Odisea podía ser su historia? (...) En el hijo de Ulises, Margherita encontró un amigo capaz de escuchar su dolor. (…) Sintió el miedo de Telémaco y su esperanza. Sintió que el chico le entraba en la piel. Él también sin padre, él también niño llamado a convertirse en adulto. Nada había cambiado a lo largo de los siglos. El mayor poema jamás escrito empezaba con un chiquillo que debe buscar a su padre». Más adelante, cuando su profesor lee un fragmento sobre un padre y una hija de una obra de Shakespeare, el narrador indica que «Margherita se preguntó si... Leer más
Estos útlimos meses he leído varias novelas que podrían llamarse luminosas —como La lección de August o El despertar de la señorita Prim—, y, ahora, Cosas que nadie sabe, de Alessandro D'Avenia. Es una novela de primer amor pero también de amores adultos, unos que se han roto y otros que han sobrevivido, y es una grandísima «novela de profesor»: del impacto que puede tener una enseñanza entusiasta de los... Leer más