Cabría llamar novela de no-ficción a La joven artista, de Valérie Mréjen. La narradora cuenta tramos de su vida, y hace observaciones de lo que ve alrededor, en cada una de las partes de este relato corto: su primer intento de ingreso en una escuela de Bellas Artes; el examen en el que accede y comentarios sobre sus compañeros y su vida en la Facultad; un tercer apartado comenta la importancia de los museos y centros de arte para ella; y en un cuarto, después de obtener su diploma, habla sobre viajes y contactos con personas del mundo artístico.
No hay diálogos, el interés de la narradora es dar cuenta de sus procesos mentales ante lo que vive y lo ve, señalar las peculiaridades que observa en quienes le rodean, indicar las conjeturas que atraviesan su mente y las referencias artísticas que ocupan su cabeza, hacer notar sus inseguridades y los modos que tiene de afrontarlas, mostrar cómo se formó su propia sensibilidad, hablar también de los descubrimientos que hará en el futuro… Todo está bien contado, de modo muy visual, con buen humor y una cordialidad irónica, con abundantes referencias a obras de arte y artistas contemporáneos.
Valérie Mréjen. La joven artista (Le Jeune artiste, 2017). Cáceres: Periférica, 2024; 144 pp.; col. Largo recorrido; trad. de Vanesa García Cazorla; ISBN: 978-8410171312. [Vista del libro en amazon.es]