Halt en peligro, el noveno libro de la serie Aprendiz de Guardián, de John Flanagan, tiene lugar cuando, resueltos los problemas de Clonmel, Halt, Will y Horace van en persecución de Tennyson y sus hombres. Obligan a un contrabandista que facilitó su fuga a decirles que huyó a Picta, al norte de Araluen. Tennyson envía, para detenerles, a dos mercenarios genovesanos: los héroes se dan cuenta de que les esperan y avanzan de modo muy cauteloso. Logran matar a uno pero, en el intercambio de flechazos, Halt es herido y pronto descubren que la flecha que le hirió estaba envenenada con un potente alucinógeno. Will decidirá, después de un tiempo angustioso, ir en busca de Malcolm, un curandero que conoció en el libro El hechicero del norte, y también en busca del genovesano para saber qué veneno empleó. Todo se resolverá en un enfrentamiento que tendrán los tres héroes contra una multitud en una gran caverna.
Son varios los capítulos dedicados a la lenta e intensa persecución, que se describe con muchos pormenores: algunos lectores pueden considerarlos excesivos. Abundan las bromas de los jóvenes hacia el adulto y se hace notar la conciencia creciente del adulto de que debe dejar paso a sus antiguos alumnos, pues, además, por primera vez Halt es consciente de sus limitaciones y de que ya no puede tomar decisiones sin consultarlas como siempre había hecho. Igual que en la novela previa (y en otras), pero quizá con más intervenciones, se subraya el papel de los respectivos caballos que llevan cada uno, todos con comportamientos muy inteligentes. La narración es muy hábil a la hora de subrayar oportunamente algunas obviedades que suenan como pensamientos muy sabios: por ejemplo, que los planes simples suelen funcionar mejor que los complicados…
John Flanagan. Halt en peligro (Halt’s Peril, 2009). Madrid: Hidra, 2024; 420 pp.; trad. de Guiomar Manso de Zúñiga; ISBN: 978-8410163232. [Vista del libro en amazon.es]