The Bears on Hemlock Mountain, de Alice Dalgliesh, con ilustraciones magníficas de Helen Sewell, es una novela cortita que obtuvo una mención de honor Newbery en 1953 y cuyo argumento está basado en un cuento popular de Pennsylvania. Jonathan, un chico de seis o siete años, sabe que no hay osos en Hemlock Mountain, pues se lo han dicho muchas veces, así que no tiene miedo ninguno cuando, un día de invierno, tiene que atravesarla para ir a darle un recado a su tía. Además, su madre le tranquiliza: «Stuff and nonsense», «bobadas, yo nunca vi un oso, se ve que tu tío te ha contado historias…; además, si los hubiera, en esta época del año estarían dormidos… ». Jonathan se entretiene en casa de su tía más tiempo del que pensaba; además, al poco tiempo de salir de allí se da cuenta de que ha olvidado un pote que debía devolver a su madre, por lo que vuelve a por él, y se retrasa más… Así que, durante su regreso, se hace de noche.
El relato presenta con calidez la vida familiar y vecinal, y con encanto las relaciones del pequeño Jonathan con los animales. Se cuenta muy bien su camino por la montaña con los acentos propios de un relato oral: «Drip, drip, drip», caen las gotas de los árboles; «crunch, crunch, crunch», suenan sus botas… El narrador se detiene a poner de manifiesto el curso de los pensamientos de Jonathan cuando va y cuando vuelve, y cómo, para mantener alto el ánimo, en el camino de regreso se va diciendo a sí mismo una y otra vez: NO HAY OSOS EN LA MONTAÑA, NO HAY NINGÚN OSO, NO HAY OSOS, NO HAY OSOS, NO HAY OSOS…
Alice Dalgliesh. The Bears on Hemlock Mountain (1952). Atheneum Books for Young Readers, 1992; 64 pp.; ilust. de Helen Sewell; ISBN: 978-0689716041. [Vista del libro en amazon.es]