La herencia me ha gustado más que todos los libros que ha venido publicando John Grisham en los últimos años. En él vuelve a los escenarios y personajes de su primera novela, Tiempo de matar, aunque no es necesario conocerla para seguir esta otra historia bien. La acción se desarrolla unas décadas después de lo sucedido entonces y plantea el conflicto derivado de que un hombre rico se suicida y deja su herencia, casi íntegra, a la mujer negra que le cuidó los dos últimos años. El comienzo es espectacular y el desarrollo de la trama, con enfrentamientos de distinto tipo fuera y dentro de los tribunales, es sobresaliente. Grisham habla de un mundo que conoce bien y cuenta cuenta las cosas con soltura y sin derivaciones innecesarias. Si al comentar Los litigantes dije que... Leer más
La lectura de Perillán, del recientemente fallecido Terry Pratchett, fue una decepción. Igual que algunos libros últimos de su producción, se ve que confeccionados no tanto por él como por personas de su entorno debido a su enfermedad, está por debajo de su categoría. Seguramente sería un libro elogiable si viniera firmado por un autor joven, pues es ameno, pero de Pratchett esperamos más... y otra cosa. Aquí no brilla su ingenio despreocupado típico: todo es demasiado pedagógico para los lectores jóvenes y al narrador se le nota el afán por ofrecer una novela políticamente correctísima. Se me ha ocurrido en el pasado releer pasajes de novelas del Mundodisco, y seguro que se me ocurrirá de nuevo en el futuro, pero no se me ocurrirá nunca volver a esta novela. El... Leer más
Matemos al tío, de Rohan O’Grady, es una novela que tuvo éxito cuando se publicó, que luego ha estado treinta años olvidada, y que últimamente ha vuelto a ser editada con renovados elogios. Es un relato que coincide con Huracán en Jamaica, de Richard Hughes, en que ambas hablan de niños que se comportan de un modo inocentemente cruel, y con La noche del cazador, de Davis Grubb, en que hay un psicópata que persigue a la pareja de niños con saña. A una pequeña isla canadiense llegan dos niños de diez años a pasar unos meses. Uno es Barnaby Gaunt, huérfano y futuro heredero de una gran fortuna, que se alojará con los señores Brooks a la espera de que llegue su tío y tutor. La otra es Christie MacNab, que vivirá con la señora Nielsen, la cabrera, una conocida de su... Leer más
Hace años leí las novelas más conocidas de Raymond Chandler —El sueño eterno y El largo adiós— que, al menos en mi recuerdo, permanecieron como parecidas pero inferiores a Cosecha roja de Dashiell Hammet, que también leí por la misma época. He vuelto a reencontrarme con el género, que no he frecuentado mucho, con La rubia de ojos negros, de Benjamin Black, firma de John Banville para novelas como esta. Según parece, los herederos de Chandler invitaron a Banville a escribir una nueva historia de su detective Marlowe y el resultado es excelente: sin duda la plantilla está más que contrastada pero la imitación es de alta calidad. La narración es buena, la trama es tensa —aunque ya se sepa que Marlowe recibirá varias palizas y que la chica tiene un secreto—, y los... Leer más
El argumento básico de La lista, de Frederick Forsyth, es que hay un tipo de origen pakistaní, al que se conoce como el Predicador, que lanza mensajes incendiarios en la red llamando a realizar atentados terroristas, y el gobierno norteamericano pide a Kit Carson, el Rastreador, que dé con él. Lo interesante, como suele ocurrir en los thrillers del autor, son dos cosas: que todo se narra con claridad y agilidad, sin absurdas concesiones y sin los clichés descriptivos que vemos en otros autores; y que hay mucha información, bien dosificada y a la vez abundante, sobre cómo funcionan el espionaje y sus tapaderas gubernamentales, siempre con la necesaria salvedad de que tenemos delante una novela. Lo interesante también, a otro nivel, es la inmoralidad de muchos planteamientos... Leer más
Ya que contrasté brevemente, hace unos días, dos thrillers de John Le Carré, menciono ahora dos de John Grisham. Me gustó, como dije, Los litigantes, porque tiene las cualidades narrativas que se le suponen al autor y porque allí se movía en un terreno que domina del todo. En cambio, me ha parecido bastante floja El estafador, primero, porque no me acaba de convencer que Grisham use la voz narrativa de un abogado negro, y, sobre todo, porque la segunda parte del relato es tan hollywoodiense que no hay por donde agarrarla. Su protagonista es Malcolm Bannister, un abogado negro de cuarenta y pocos años, condenado injustamente y que lleva varios años en la cárcel. Cuando fallece asesinado un juez federal y él sabe quien fue, decide llegar a un acuerdo con el FBI: darles el nombre... Leer más
No soy un lector habitual de John Le Carré. Leí sus primeras novelas y, no hace mucho, leí El jardinero fiel (The Constant Gardener, 2001), una novela que no me gustó, a pesar de que tenga diálogos excelentes, de que bastantes tramos de la historia sean buenos, y de que su denuncia de los abusos de las farmacéuticas en África, con el consentimiento de los gobiernos occidentales, dé de lleno en el blanco. Pero la novela es muy hollywoodiense al definir a los personajes, algunas de las relaciones que mantienen entre sí resultan poco creíbles, hay pasos de la historia que no encajan bien, y el autor se alarga y se atasca mezclando de modo innecesario muchas cosas distintas. La misma tesis, de la integridad por parte de quienes ocupan puestos intermedios para, desde sus lugares,... Leer más
El protagonista de Cómo empezó mi vida prestada, de Jenny Valentine, es Chap, un chico vagabundo de 16 años. Su relato comienza cuando, después de una pelea en el albergue de Londres donde se aloja desde hace dos días, lo encierran y entonces alguien descubre que sus rasgos coinciden con otro chico desaparecido hace dos años: Cassiel Roadnight. Le preguntan si es él y, por distintas razones, dice que sí. A continuación viene la hermana de Cassiel, Edie, a buscarlo y se lo lleva. En la casa de los Roadnight, en el campo, le espera su madre, Helen, y, al día siguiente, llega su hermano mayor Frank. La narración alterna el presente —las dudas y temores del protagonista, sus deducciones sobre los misterios de su nueva familia, sus intervenciones cuidadosas para no delatarse—... Leer más
Sobre Canadá, de Richard Ford, es suficientemente clarificadora esta reseña. Coincido con ella, en particular, en la excelencia de la primera parte del relato: la descripción de la vida familiar del narrador, Dell Parsons, después de un comienzo con tanto tirón como este: «Primero contaré lo del atraco que cometieron nuestros padres. Y luego lo de los asesinatos, que vinieron después». Debo decir que me pareció inferior a sus novelas largas previas —que, por orden de preferencia, son El día de la independencia, Acción de gracias, y El periodista deportivo— pero, en cualquier caso, me atrajo. Eso, seguramente, se debe también a que conecto bien con el narrador sereno típico de Ford y porque, aunque me parezca pobre, comprendo y me parece revelador su enfoque vital tipo... Leer más
Mencioné, tiempo atrás, tres novelas policiacas de Dorothy Sayers y su héroe, lord Peter Winsey: Los nueve sastres, El misterio del Bellona Club y Veneno mortal, donde introduce a Harriet Vane, una escritora de novelas policiacas que ocupa un papel central en Los secretos de Oxford, la novela más valorada de la serie y que yo he leído hace poco. En ella, lord Peter Winsey no entra en acción hasta bien pasada la mitad de la historia pues, hasta ese momento, la protagonista es Harriet Vane, que se ha ofrecido a investigar discretamente unos amenazadores mensajes en su antiguo college, una institución completamente femenina. Cuando el asunto se vuelve más complicado y ya es público, las autoridades académicas deciden llamar al detective. La novela tiene otros dos hilos de... Leer más
El octavo día fue la última novela de Thornton Wilder. Ese dato importa porque sólo una gran madurez da el dominio necesario para abordar y controlar un argumento que, centrado en un acontecimiento singular, abarca cuatro generaciones y toca muchas teclas distintas. Puede dar idea de lo anterior decir que tiene partes de intriga detectivesca, y de huida y persecución; otras de lucha por sobreponerse a la pobreza, y también de ascensos sociales fulgurantes; otras de denuncia de los abusos laborales sobre los que se construyen algunas fortunas; otras de reflexión, sobre las consecuencias que tiene una u otra educación; más, sobre los cimientos de los Estados Unidos y sobre la imposibilidad de comprender los destinos humanos… Luego, el relato avanza hacia delante y hacia atrás con... Leer más
Los litigantes, de John Grisham, no aporta nada nuevo a quien ha leído otras novelas del autor pero algunos de sus entusiastas la han calificado de gran comeback. La razón es que se centra por completo en el mundo que Grisham mejor conoce y usa el hilo argumental que tan buenos resultados le ha dado siempre: un joven abogado que hace lo que cree correcto y, entonces, a la vez que su vida familiar mejora, triunfa en su trabajo. Chicago. David Zinc, joven prometedor que trabaja desde hace cinco años en el inmenso y poderoso bufete de Rogan Rothberg, se siente mal un día, cuando está entrando en el edificio. Así que, en vez de seguir su rutina, huye a un bar cercano donde se emborracha, lo que al fin le conduce, inesperadamente, al miserable bufete de Finley & Figgs. Después de... Leer más
He descubierto hace poco a una escritora de novelas históricas y de intriga que fue muy popular: Georgette Heyer. En su biografía se dice que, a pesar de su éxito, la edición de 1974 de la Enciclopedia Británica no le dedicó una voz propia (lo mismo que, en la 15ª edición, que es la que yo consulté en su momento, no había menciones de Enid Blyton ni de Richmal Crompton). Allí también se lee que las dos novelas protagonizadas por el comisario Hannasyde publicadas por Salamandra, contrariamente a lo que dicen las cubiertas, no son las primeras de la serie y van en el orden opuesto al que se indica en ellas: Muerte en el cepo es anterior a Aquí hay veneno, además de que un personaje de la primera reaparece como ya conocido en la segunda. Muerte en el cepo comienza cuando... Leer más
En El asesinato como diversión, de Fredric Brown, se cuenta que un día comienzan a suceder asesinatos que coinciden con unos guiones inéditos que Bill Tracy, guionista de un popular serial de radio titulado Los millones de Millie, había preparado para que fueran una nueva serie radiofónica que se titularía El asesinato como diversión. Las coartadas de Tracy tampoco son realmente fuertes y, por tanto, no se puede reprochar a los amables policías que tengan sus sospechas. El mismo Tracy cuenta el relato, que resulta intrigante al principio, aunque la resolución final se basa en información que se había ocultado al lector (y que un protagonista que no estuviera medio borracho, día sí día también, habría adivinado antes). Sea como esa, es una narración amena, que da idea... Leer más
El núcleo de La confesión, de John Grisham, es que un chico negro, acusado de un crimen que no cometió, está esperando ya el día de su ejecución. Los protagonistas principales son su abogado, que lo intenta todo para evitarlo, y un pastor luterano de otro estado, que conoce al tipo que cometió el crimen y viaja con él a Texas para que confiese. Es un relato largo pues Grisham, un buen narrador, no sintetiza nada y multiplica personajes y escenarios relacionados con el caso. La maldad y corrupción de algunos personajes quedan claras pronto —el narrador puede llamar imbécil a un tipo nada más presentarlo— pero no así de otros, de quienes se nos cuenta bien por qué han llegado a ser delincuentes —«el sistema de justicia para menores solo es un caldo de cultivo de... Leer más
Cobra, de Frederick Forsyth, es un thriller en el que un personaje particularmente bien preparado, por encargo del presidente de los Estados Unidos urde un plan para proporcionar un golpe mortal al tráfico de drogas. Durante varios meses recluta los hombres y da los pasos previos para, llegado el momento, actuar por sorpresa sobre los barcos y aviones que trasladan la droga y provocar una gran confusión entre los traficantes. Como se podría esperar, lo mejor de la novela es la maestría de Forsyth para contar las cosas: da mucha información de forma ordenada y sintética, alterna escenarios y cambia de personajes con fluidez, huye de los excesos descriptivos y de (casi) cualquier exageración, y trufa su narración de las frases contundentes propias del género —como la de que... Leer más
Ojos de agua y La playa de los ahogados, de Domingo Villar, son dos novelas policiacas que se desarrollan en Vigo y sus alrededores. En la primera el inspector Leo Caldas descubre quién asesinó a un saxofonista y en la segunda desenreda el caso de un marinero ahogado en Panxón. Como Kurt Wallander, el protagonista de las novelas detectivescas de Mankell, Caldas es un tipo concienzudo en su trabajo que, aunque sabe tratar bien a las personas con las que se relaciona, no acierta como le gustaría en su vida personal que, por otra parte, está más centrada que la del sueco y resulta más cercana para un lector de aquí. Luego, es un acierto el contraste continuo entre la manera de actuar de Caldas y la de su ayudante aragonés, Estévez, un tipo impulsivo al que, salvada la... Leer más
Ya que hablé, no hace mucho, de biografías de Shakespeare, y ya que las semanas anteriores colgué reseñas de importantes novelas policiacas, traigo aquí un breve comentario de una interesante novela: La hija del tiempo, de Josephine Tey (no They, como pone la portada de la primera edición que cito abajo). El protagonista, el inspector de Scotland Yard Alan Grant, está en cama sin poder moverse. A partir de que le muestran un retrato de Ricardo III se pregunta qué clase de persona fue y, con ayuda de las enfermeras y de compañeros amigos, va recopilando información histórica para saber si fue o no el autor del asesinato de sus dos sobrinos. Sus conclusiones serán muy distintas a las que los textos escolares habituales enseñan y a las del estereotipo difundido por la obra de... Leer más
El contexto. Una parodia, es una novelita de Leonardo Sciascia útil para estos tiempos en que vivimos. Una nota final aclara un poco el sentido de su obra: por qué la llama una parodia cuando viene a ser un apólogo sobre el poder que degenera en una red mafiosa. El protagonista es el inspector Rogas, un personaje del que se nos dice que detesta cualquier tipo de apuesta porque no quiere correr el riesgo de ganar ya que siente debilidad por las derrotas y por los derrotados. Su intención de descubrir al asesino, primero del fiscal Varga y luego de otras personas, topará con un muro de miedos y silencios. El relato, igual que otros del autor siciliano, habla de un país en el que las ideologías se reducen a puras denominaciones en el reparto de papeles atribuidos por el poder y... Leer más
Una novela que, como Calix, está situada en los años de la inmediata posguerra en España: Antes del invierno, de Carlos Pujol. El protagonista y narrador, don Emilio, es un abogado, ya mayor, que vuelve a España desde Londres, cuando la guerra mundial está en su apogeo, su mujer le ha abandonado, y su hijo, que vive en Barcelona, es un conocido y bien situado poeta falangista. Cuando un día un inglés le aborda por la calle y le propone ser espía comienzan a pasar cosas extrañas a su alrededor. Relato en el que, sobre todo, importa la voz del narrador: bromista e irónica, comprensiva y culta, con oportunas y frecuentes referencias literarias. En él hay un poco de callejeo descriptivo por la Barcelona de la época y mucho espadachineo hábil en los diálogos. Tiene algo de... Leer más
Calix, de Sergio Lechuga, es una novela centrada en si el santo Cáliz de Valencia, que llegó a esa ciudad después de un periplo de siglos por Aragón y Cataluña, es el mismo cáliz que usó Jesucristo en la última Cena: el Grial. Según indica el autor, en un apéndice final donde aclara qué hay de cierto y qué no en su relato, tal cosa no se puede probar afirmativamente, aunque algunos indicios sean sugerentes, pero tampoco se puede probar lo contrario. Pocas semanas después de la muerte de Franco, un funcionario jubilado de nombre Antolín Alfonso, pone por escrito un episodio que protagonizó: el año 1940 trabajó en una investigación sobre si el santo Cáliz de Valencia era o no el Grial, pues Himmler iba a viajar a España para buscarlo; de paso cuenta que, con ocasión... Leer más
En Agua de noria (buena novela con espantosa portada), casi una continuación de Ronda de noche (mucho mejor portada), pues comparten algunos personajes y situaciones, José Jiménez Lozano centra su interés en las peripecias y los pensamientos de dos policías: el comisario Valtodano y el inspector Ledesma. Al leerla me vinieron a la cabeza No es país para viejos, de Cormac McCarthy, por las reflexiones tipo «dónde vamos a ir a parar» de los protagonistas; las novelas de Henning Mankell sobre Wallander, por lo mismo y por la forma que tienen de afrontar el trabajo cotidiano —«ser policía era desde luego lo más parecido a lo que hacía un asno con los ojos cubiertos, dando vueltas a una noria, andando, andando, sin saber a dónde iba, y sin ir a ninguna parte»—; El día de la... Leer más
El día de la lechuza, de Leonardo Sciascia, es una buena narración sobre hombres que intentan hacer su trabajo bien en ambientes donde un poder mafioso maneja los hilos para corromper a unos y atemorizar a otros. Se ambienta en Sicilia, en los años posteriores a la segunda Guerra Mundial. Su argumento es que un honrado empresario de la construcción muere de un disparo y el íntegro jefe de policía local, el capitán Bellodi, consigue aclarar quién lo hizo y por encargo de quién. De las narraciones del autor con el mismo tema que recuerdo es la que más me gusta. El motivo es que la narración es limpia, que los pasos son todos claros, y que Bellodi es un personaje convincente y atractivo; es antológico su interrogatorio al mafioso local don Mariano Arena, otro personaje... Leer más
Más de Cornell Woolrich. Cuando leí, hace tiempo, 18 relatos cortos recogidos en un volumen de Acervo, La ventana indiscreta entre ellos, tomé unas notas. Aquí están: bien armados, bien contados, optimistas; juega con la sorpresa, tiene un aire a O. Henry algunas veces; sus protagonistas son gente dispuesta a meterse en la boca del lobo sin sentir temor, policías honrados, hijos de policías que colaboran con sus padres; ambientes conseguidos, sentimientos humanos bien pillados muchas veces, sin detalles crudos ni explotación de lo sensual, alusiones a supersticiones banales; finales satisfactorios en los que se esclarece la verdad y se hace justicia... Cornell Woolrich. Obras escogidas. Barcelona: Acervo, 1973, 5ª ed.; 476 pp.; selección y prólogo de José A. Llorens;... Leer más
El afgano, de Frederick Forsyth, es una lección que da un maestro (a tantos aprendices poco competentes), de cómo debe ser un thriller: soltura narrativa, ritmo rápido, ironía medida, dominio de la materia, información precisa, ningún desparrame lírico, apuesta mundial en juego... y, cómo no, buenos y malos bien definidos. Vale, hay un evidente tufillo probritánico, hay una sobrevaloración de lo bien que funcionan algunos servicios secretos..., y, sobre todo, la inmoralidad de fondo de muchas acciones no sólo ni se plantea sino que se da por buena. En cualquier caso, los mismos o parecidos defectos encontramos en la prensa de todos los días, pero el relato de Forsyth tiene más enjundia y proporciona más información fiable que la inmensa mayoría de los reportajes... Leer más
Recientemente ha llegado a las librerías Veneno mortal, un nuevo relato policiaco de Dorothy Sayers, que se suma a los otros dos publicados en los últimos meses, Los nueve sastres y El misterio del Bellona Club, y que tiene iguales cualidades: lenguaje rico, diálogos ágiles, escenas conseguidas, observaciones inteligentes, descripciones medidas, certeras alusiones literarias. Pero quizá es más sabroso: tiene más humor, el hilo de la pesquisa es más lineal, es un acierto que parte de la investigación recaiga en los ayudantes de lord Peter Wimsey: Bunter, su ceremonioso mayordomo; la señorita Murchinson, que aprende a reventar cajas fuertes en un plis-plás; y la señorita Climpson, que se hace pasar por una experta médium. De todas maneras, el principal gancho está en el... Leer más
Hace no mucho se publicó en castellano Los nueve sastres, una de las novelas policiacas de Dorothy Sayers protagonizadas por lord Peter Wimsey. Ahora le toca el turno a El misterio del Bellona Club y la editorial Lumen anuncia que continuará editando las restantes. Amiga de Chesterton y Eliot, entre muchos otros escritores, Sayers dedicó gran parte de su vida a la traducción al inglés de La Divina Comedia de Dante, un trabajo que, hasta la fecha, sigue siendo una referencia. Entre otras cosas escribió también la serie de novelas policiacas a la que pertenecen las dos citadas y, dentro del género, se la considera también una referencia. El misterio del Bellona Club se plantea cuando, poco antes de la hora de cenar, el viejo general Fentiman aparece muerto en el sillón orejero... Leer más
Se suele decir que La máscara de Dimitros, de Eric Ambler, es el mejor relato en su género. Su protagonista es Charles Latimer, un novelista inglés que, en la Turquía de Kemal Ataturk, puede ver el cuerpo sin vida de Dimitrios Makropoulos, un tipo con una vida pasada singular: asesinatos, magnicidios, tráfico de blancas y de drogas, etc. Decide reconstruirla visitando los lugares donde actuó: Grecia, Bulgaria, París..., pero las cosas se van complicando. La novela tiene cualidades sobresalientes: cuidadas descripciones de ambientes, tramos de prosa excelente, un conseguido modo indirecto de ir ofreciendo las informaciones tanto al protagonista como al lector de modo a que a los dos se les conduce al mismo paso. Entre sus defectos están el que no queda claro por qué Latimer... Leer más
Según cuenta él mismo, Graham Greene redactó El agente confidencial con rapidez, con deseos de ganar dinero, a la vez que por las tardes escribía con más calma la que sería su mejor novela: El poder y la gloria. Un profesor de lenguas románicas, llamado D., llega a Inglaterra para conseguir un importante contrato de carbón, del cual podía depender el destino de su país, asolado en ese momento por una guerra civil. Una vez allí le comienzan a pasar cosas extrañas y no se sabe bien quién trabaja para quién. Lo mejor del relato es la forma en que se dibuja el clima de desconfianza en torno al protagonista, sus aires escépticos y su progresiva consciencia de las consecuencias inesperadas y trágicas que tienen sus acciones, incluso sus acciones bondadosas. Con una... Leer más
El agente secreto, firmado por William Somerset Maugham, es otro «thriller» clásico. Son varios episodios protagonizados por un escritor llamado Ashenden, que acepta trabajar como agente secreto al servicio de Su Majestad en los años anteriores a la segunda Guerra Mundial, y que viaja por el mundo con misiones variadas. Abundan los personajes curiosos en esta narración aristocrático-humorística, en la que se introducen relatos dentro del relato que se alejan del hilo principal. No es una novela excepcional pero es fácil ver cómo, sobre la personalidad de Ashenden, se modelarán futuros agentes secretos. Así, cuando es reclutado, su jefe le advierte con claridad: «Hay una cosa que debe tener en cuenta antes de empezar su trabajo. Si lo hace usted bien, nadie le dará las... Leer más
Distinta de la versión cinematográfica posterior que haría Hitchcock, Los 39 escalones es una novela cortita que su autor, John Buchan, escribió para entretenerse durante una enfermedad. En su dedicatoria menciona su entusiasmo por las novelas baratas de aventuras, que describe como una clase de «relato en el que los incidentes desafían a las probabilidades y rozan los límites de lo imposible». Cuando, en 1914, Richard Hannay, 37 años, está en Londres aburriéndose, un desconocido le aborda, le cuenta los planes para una conspiración y le pide ayuda. Hannay se la ofrece pero, poco después y sin más ni más, el hombre aparece muerto en su apartamento. Como todo le incrimina decide huir e intentar desenmascarar él la trama que le había revelado el asesinado. Con la... Leer más
Pocos años después de que Robert Erskine Childers escribiera El enigma de las arenas, Joseph Conrad publicó El agente secreto, otra novela fundacional de los thriller de espías. Un agente secreto al servicio de los rusos está felizmente casado con una buena mujer que no sabe nada de sus ocupaciones: ambos habían construido su vida, nos dice Conrad, absteniéndose «de ir al fondo de los hechos y las motivaciones». Conrad se centra en la psicología de los personajes y habla de la imposibilidad de llevar una vida doble sin conflictos, de cómo no se puede separar lo público y lo privado, de cómo hay secretos que terminan destruyendo a quien los lleva... El autor no alcanza esta vez el nivel de sus otras obras, pero si su éxito popular con esta historia es escaso eso se debe no... Leer más
Eric Ambler, cuya mejor y más conocida novela fue La máscara de Dimitros, está considerado el inventor de la novela de suspense y espionaje. Quien no le haya leído antes puede apreciar su pericia y su originalidad en Motivo de alarma, una historia realista sobre cómo un tipo cualquiera puede terminar en medio de un complicado enredo, con un argumento bien entretejido con los sucesos políticos del momento, en ese caso los de una Europa convulsa y al borde de la guerra. Después de un corto pero magistral e inquietante prólogo, la intriga está estructurada en tres partes. En la Inglaterra de 1937, el ingeniero Nicky Marlow se queda sin trabajo y su novia le presiona para que opte a trabajar en la empresa de armamento Spartacus en Italia y por un año. Ya en Milán se le acercan... Leer más