Para que no pase más tiempo desde que lo leí, pongo aquí una breve noticia de La Lira de Linos, de Gabriel Insausti, un libro denso y rico que necesitaré leer de nuevo y que contiene jugosas reflexiones acerca del arte y, en concreto, acerca de las obras que se presentan como transgresoras. Tiene tres apartados. En el primero, «Estética del Atrio», el autor habla de cómo «el modo más obvio de sacar a la luz lo sagrado es la transgresión» y de cómo «la negación de Dios solo se comprende desde una afirmación previa (y en la medida en que ambas son comprensibles para el lector)». En el segundo, «La luz en el túnel», analiza obras de varios autores y, al hablar de T.S.Eliot, señala que «Eliot apostaba por una idea de la cultura precisamente como vida, como participación, como vínculo. La cultura era lo que hacía que la vida del hombre fuese humana y quedaba mutilada o vacía si olvidaba su significado último, que es religioso». En el tercero, «La cultura: ¿liturgia o akelarre?», indica cómo «el arte abyecto pudo tener una pertinencia: mostrar en crudo esa verdad incómoda que callamos a diario. La gestualidad del aquelarre resulta pueril: la blasfemia y el sacrilegio solo son posibles desde la fe, contienen un recordatorio, aunque invertido, de sacralidad; el blasfemo y el sacrílego perpetúan la presencia de lo religioso en el mundo, un error que un ateo lúcido no cometería nunca». En el epílogo señala que las cosas han cambiado a partir de la posmodernidad: hay artistas que no podrán echar de menos a quien nunca ha estado ahí. Hay más información en este comentario y en este otro.
Gabriel Insausti. La lira de Linos. Cristianismo y cultura europea (2021). Madrid: Encuentro, 2021; 376 pp.; ISBN: 978-8413390246. [Vista del libro en amazon.es]
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