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Valores y derechos
Sociedad actual (Robert Spaemann) ● Religión | SociedadRobert Spaemann: «El contexto público en el que hoy se habla de los valores es profundamente relativista. Se habla de “nuestros valores”. Cuando los políticos occidentales viajan a China se sienten en el deber de hacer algo en materia de Derechos Humanos y de proclamar “nuestros valores”, a lo que sus interlocutores chinos responden, con toda razón: “Vosotros mismos decís que se trata de vuestros valores, que tenéis en alta estima. Nosotros poseemos nuestros propios valores, distintos de los vuestros. Entonces, ¿qué queréis de nosotros?” Justificar los Derechos Humanos con los valores es, por otro lado, algo harto peligroso. “Derecho” es un concepto bastante claro. Pero, ¿los valores? Desde luego, con frecuencia se habla de los valores cristianos: la Iglesia debería anunciar los “valores cristianos”. Pues bien, no existen valores “cristianos”. Jesús abrió los ojos de los hombres a los “valores” que ya existían antes de que Él apareciera. También…
20 julio, 2014Natán y sus hijos
Aventuras ● 15 años: lectores jóvenes | Aventuras | Narrativa: AventuraMirjam Pressler explica, en la nota final que pone a Natán el Sabio, sus fuentes y sus intenciones: desea recomponer la obra teatral del mismo título de Gotthold Ephraim Lessing, para volver a proponer su mensaje de convivencia pacífica entre religiones y de rechazo del fanatismo. Cuenta su historia, situada en Jerusalén en el siglo XII, centrando cada capítulo en alguno de los personajes: Recha la hija adoptiva de Natán; Daja, una cristiana, la acompañante de Recha; un joven templario que salva a Recha de un incendio; Gesem, un chico tullido que trabaja en la casa de Natán; etc. Todo se dirige al momento en el que Natán cuenta la parábola de los tres anillos a Saladino. El ejemplo de tolerancia y confianza en la razón de Natán cala en todos los que le tratan por más que la brutalidad siga su curso. Como corresponde a una escritora experta, Natán…
20 junio, 2013La gran añoranza cultural
Verdad ● Comunismo | VerdadEscrito en los años ochenta, un texto de Adam Zagajewski que me ha parecido interesante, aunque por momentos también confuso, es el titulado «Una muralla alta». En él comenta un ensayo de Milan Kundera sobre la idea que tenían de Europa quienes vivían en la Europa sovietizada. Señala que «el relativismo, esa herrumbre que ataca la verdad allí donde no le amenaza un solo peligro mortal, desaparece por completo en los países totalitarios. Aquí, la verdad, un bien inasequible, se muestra en todo el esplendor de su frescura y de su pureza como el día de la creación del mundo, y tanto es así que no le cuesta nada componer poesías y cánticos en su honor». E indica que «la Rusia soviética implantó en nuestra zona de Europa cosas de lo más diferentes. Creó confidentes, traidores, mentirosos, censores y gandules que no dan palo al agua, pero de paso, sin…
10 junio, 2011Burlas e insultos
Verdad ● VerdadJosé Jiménez Lozano: «Es una grandeza de nuestro tiempo el que, hasta cierto punto, hayan entrado en la conciencia general la idea y el sentimiento de que un hombre es como otro hombre, y que sus diferencias son meros accidentes. Pero estas diferencias son facilidades para unos hombres y un peso o un cepo para otros, y no cabe el orgullo de nuestra propia civilización y el desprecio de otras, y lo que unos hombres conquistan es para todos, y hay obligación de ofrecérselo. No podemos decirle a un africano, sin despreciarle ni ofenderle, que los sonidos del tantán son como una coral de Bach, o la medicina europea como la suya; esto sería una burla y un insulto». José Jiménez Lozano. Los cuadernos de Rembrandt (2010). Valencia: Pre-Textos, 2010; 233 pp.; ISBN: 978-84-92913-52-7.
13 febrero, 2011Hacer valer los hechos
Verdad ● VerdadMarcello Pera: «Contra el relativismo en la ciencia se pueden hacer valer los “hechos de los experimentos”: al final, ni siquiera el ptolemaico más obstinado pudo ya negar que Venus tenía fases. Contra el relativismo de las culturas se pueden oponer los “hechos de las expectativas”: al final, ni siquiera Derrida niega que, para hacer frente al terrorismo es auspiciable una decisión por parte de los organismos internacionales. Y contra el relativismo de las civilizaciones, se pueden oponer los “hechos de las preferencias”: al final, ni siquiera el relativista multiculturalista más lanzado niega que todos los hombres, si se les deja libres, prefieren vivir en condiciones de seguridad, respeto, salud, bienestar y paz» (o, como se decía tiempo atrás, no hay más que fijarse a dónde va el «voto con los pies»). Marcello Pera – Joseph Ratzinger. Sin raíces (Senza radici. Europa, relativismo, cristianesimo, islam, 1004). Barcelona: Península, 2006; 144…
26 diciembre, 2010El fundamento de la tolerancia
Sociedad actual (Robert Spaemann) ● Sociedad | VerdadRobert Spaemann: «Es una norma ambigua el decir que cada uno debe hacer lo que le gusta. Puede significar que cada uno tiene que habérselas con los gustos de los demás como le apetezca, amigable y tolerantemente, o de manera violenta e intolerante. Puede también significar que cada uno debe respetar los gustos de los demás. Una tal exigencia de tolerancia limita justamente los propios gustos. Se debe dejar claro que la tolerancia no es de ningún modo, como se dice a veces, una consecuencia evidente del relativismo moral. La tolerancia se funda más bien en una determinada convicción moral que pretende tener validez universal. El relativismo moral, por el contrario, puede decir: ¿por qué debo yo ser tolerante? Cada cual debe vivir según su moral y la mía me permite ser violento e intolerante». Robert Spaemann. «Ética filosófica o ¿son relativos el bien y el mal?», en Ética: Cuestiones…
19 diciembre, 2010Estructuras que se derrumban
Verdad ● VerdadPienso que tiene razón Allan Bloom (a quien cito casi literalmente hasta el final) cuando sostiene que hoy, desacreditado el machismo, abundan los moralistas que se han propuesto la tarea positiva de que los hombres sean cariñosos y sensibles —y para eso invaden las escuelas, la psicología popular, la televisión y el cine—, intentando reeducarlos para que acepten los elementos «femeninos» de su naturaleza. Los hombres tienden a soportar esa reeducación con cierta hosquedad, pero aplicadamente, para conservar la paz con sus esposas y amigas y para evitar el oprobio de ser etiquetados como poco sensibles o lo que sea. Pero este planteamiento termina fracasando porque, en un mundo individualista, no se puede forzar a nadie a ser altruista, y menos aún pueden hacerlo aquellos cuyo altruismo es menor; y porque, sobre todo, la tarea de cuidar a otros y de preocuparse por otros es una virtud y no una…
20 septiembre, 2009Los límites del discurso
Sociedad actual (Robert Spaemann) ● Sociedad | Verdad | ViolenciaRobert Spaemann: «Los mayores crímenes del siglo XX, la ejecución de millones de hombres, no sucedieron porque esos hombres fueran supuestamente malos sino porque, según se decía, eran objetivamente perniciosos, es decir, porque dada su pertenencia a una clase o a una raza, se hallaban en una relación antagónica respecto de los hipotéticos intereses de sus verdugos. El relativismo, que prohíbe —si se hace pretendiendo darle validez universal— denominar malos a los actos de esos verdugos, no sería sino la definitiva traición a las víctimas. Quien dice que también se puede matar a la propia madre —dice Aristóteles señalando los límites del discurso— no merece argumentos sino reprimendas». Robert Spaemann. Felicidad y benevolencia (Glück und Wohlwollen, 1989). Madrid: Rialp, 1991; 285 pp.; col. Cuestiones fundamentales; trad., notas y estudio introductorio de José Luis del Barco; ISBN: 84-321-2689-6.
15 febrero, 2009Tolerancia y convicciones
Sociedad actual (Robert Spaemann) ● Sociedad | VerdadPara responder a si hemos de relativizar todas nuestras convicciones o hemos de combatir por ellas, Robert Spaemann pone un ejemplo: si tengo la convicción de que la ablación femenina es algo malo, consideraré falsa la convicción contraria y la combatiré; de otro modo no podría considerar mi convicción como tal. Y cuando le preguntan cómo no asociar convicciones con intolerancia, explica que las convicciones son teóricamente intolerantes pero que una intolerancia teórica no implica una intolerancia práctica. Así, continúa, quien prescribe un medicamento no tiene por qué obligar al otro a tomarlo. Es decir: se puede tener la convicción de que no se puede forzar a otras personas en cuestiones de convicción. Robert Spaeman. Texto modificado de una entrevista del año 1999 contenida en Ética, política y cristianismo (2007). Madrid: Palabra, 2007; 299 pp.; col. Biblioteca Palabra; ed. de José María Barrio, trad. de José María Barrio y Ricardo…
19 octubre, 2008Culturas diferentes…
Verdad ● VerdadAllan Bloom: «Sólo en las naciones occidentales, esto es, en las influidas por la filosofía griega, existe cierta disposición a dudar de la identificación del bien con las formas de actuar propias. Del estudio de las culturas no occidentales se desprende que es primario, e incluso natural, no sólo preferir las propias formas y estilos, sino también creer que son los mejores, superiores a todos los demás». Y no sólo eso, sino que «el estudio científico de otras culturas es un fenómeno casi exclusivamente occidental, y en su origen estuvo claramente relacionado con la búsqueda de nuevos y mejores estilos, o, al menos, con la esperanza de poder confirmar que nuestra propia cultura es realmente la forma mejor de vida, confirmación, por cierto, que otras culturas no experimentan como necesaria». Allan Bloom. El cierre de la mente moderna (The Closing of the American Mind, 1987). Barcelona: Plaza & Janés, 1989;…
17 febrero, 2007Como una pastilla de jabón
VerdadEn Rechicero, una novela de Terry Pratchett cuyo protagonista es un octavo hijo de un octavo hijo de un octavo hijo, es decir, un hechicero al cuadrado o un rechicero, una fuente permanente de magia, se hacen algunas interesantes afirmaciones. Una, citada en la ficha del autor y que se puede poner en paralelo con una nota de hace unos días: que «en la bañera de la historia, la verdad es tan difícil de aferrar como una pastilla de jabón, y aún más difícil de encontrar». Otra, que «si pones demasiado potencial mágico en un solo punto (…) empujas a la realidad, ya sabes, hacia abajo, [con lo que se puede] romper la realidad en el punto más frágil y ofrecer, quizá, un camino de entrada a los habitantes del plano inferior que los deslenguados denominan Dimensión Mazmorra». Terry Pratchett. Rechicero (Sourcery, 1988). Colección Martínez Roca. Barcelona: Martínez Roca, 1992;…
13 diciembre, 2006La edad no es relevante
Verdad ● VerdadEn el prólogo a la biografía de Dietrich von Hildebrand escrita por su esposa, el entonces cardenal Ratzinger subrayaba y comentaba una anécdota: «En el transcurso de un paseo con su hermana mayor, ella trata de explicarle —con creciente exasperación—, que todos los valores morales son relativos, y que están completamente determinados por nuestras circunstancias, por nuestro tiempo y valores concretos. El joven von Hildebrand reacciona instintivamente contra tal afirmación y arguye con vehemencia que eso no puede ser así. Al llegar a casa, su hermana pide, en beneficio propio, el apoyo de su padre, que de manera displicente dice que Dietrich sostiene tal punto de vista porque sólo tiene catorce años, por lo que Dietrich se ve obligado a defenderse haciendo notar que su edad no es, realmente, relevante en la discusión. Ese pequeño incidente, quizá nada raro en cualquier familia, revela algo fundamental sobre el carácter» de von…
3 diciembre, 2006Camellos diferentes
Verdad ● VerdadHay quienes dicen que los valores de una época pueden ser enteramente distintos a los de otra. En ese caso, ¿por qué los llamamos igual? «Es lo mismo que si un hombre dijera: «los camellos son totalmente diferentes según los lugares: algunos tienen seis patas, otros ninguna; los hay con cuernos, con alas, de color verde, de forma triangular. No tienen un solo aspecto en común». La persona sensata preguntará: «Entonces, ¿qué es lo que hace que se les llame a todos camellos? ¿Qué es lo que se entiende por camello? ¿Cómo se sabe que el uno es camello y el otro también?»» G. K. Chesterton. «El ingenio de Whistler», capítulo XVII de Herejes.
28 agosto, 2005