
De dos hermanos, cuyo nombre no se nos da, el mayor es listo pero tiene miedo y el pequeño es tonto pero no lo tiene. El sacristán de su pueblo se ofrece para que pase miedo y se lo lleva para darle un susto de muerte pero el resultado para el sacristán no puede ser peor. Se marcha luego de casa y nadie logra que pase miedo. Acaba casándose con una princesa y, por fin, la doncella de su esposa consigue asustarlo.
21 noviembre, 2006