Un libro infantil-juvenil se dirige a niños y jóvenes. Por eso, una buena opción es acentuar mucho lo narrativo (igual que otra puede ser subrayar el humor). Otra, es centrar el interés en la evolución y las cualidades del personaje central (igual que otra puede ser centrarlo en un argumento interesante). Y otra, como una gran mayoría de los lectores leen personajes más que historias, es presentar sus aventuras con formato de serie (de igual modo que hay autores que, por principio, renuncian a escribir series). Por eso, intentar desmerecer los libros de Harry Potter comparándolos con El señor de los anillos es como hacer de menos un partido de fútbol juvenil comparándolo con uno de primera división. Querer hacerlo poniendo a Rowling al nivel de Roald Dahl es como esperar... Leer más
El amuleto de Samarkanda, de Jonathan Stroud, es un relato bien escrito, divertido, intrigante... Desde algunos puntos de vista, es de lo mejor que he leído en la estela de Harry Potter. Pero lo cierto es que los préstamos de obras anteriores son tantísimos que todo parece ser un ensamblaje de piezas, un ensamblaje muy bueno, eso sí. La novedad está en un toque posmoderno realmente sabroso: las notas a pie de página a cargo de uno de los narradores tienen verdadera gracia y funcionan francamente... Leer más
Un relato de fantasía reciente basado en cuentos populares nórdicos antiguos, del que también se anuncian secuelas, es La colina de los trolls, de Katherine Langrish. Un chico huérfano que vive con sus malvados y brutos tíos se hace amigo de una chica vecina de su edad cuyo padre se ha embarcado, y ambos averiguan que los tíos desean el tesoro de los trols y para eso pretenden regalarles un chico y una chica humanos. Buena parte de los pasos del argumento son muy predecibles, se carga mucho la mano en la mezquindad y estupidez de los malvados así como en el sufrimiento del huérfano maltratado que merece toda la compasión del mundo. A favor tiene la originalidad del escenario y de algunos seres que son menos habituales en esta clase de tramas. Solo para entusiastas, por... Leer más
Una saga más de aventuras fantásticas, de las muchas que nos invaden en los últimos tiempos detrás de la estela de Harry Potter, es la firmada por Suzanne Collins, cuyos dos primeros libros son Gregor: La profecía del Gris y Gregor: La profecía de la Destrucción. Son como esas películas de acción que repiten lo ya conocido pero que, como vienen filmadas por un buen director y están realizadas con profesionalidad, se dejan ver y, además, siempre contienen algún hallazgo novedoso (en este caso, por ejemplo, que las cucarachas sean unos seres nobles aunque no muy listos)... Eso sí, vale la pena tomar nota de la decisión moral que toma un protagonista de once años que, aunque todo parecía empujarle a lo contrario, decide no matar una rata recién nacida: porque es «el peor... Leer más
En los últimos meses han proliferado todo tipo de obras con la buena intención de acercar el Quijote a los niños que aún no he tenido tiempo ni ganas de mirar: dejaré que vayan decantándose las cosas. Sí he leído Brandabarbarán de Boliche, de Ramón García Domínguez, un relato sobre la infancia de don Quijote que me ha parecido valioso y me ha resultado simpático. Una segunda edición se ha publicado sólo con el subtítulo de la primera, Aventuras y desventuras de Alonsico Quijano: los editores han debido pensar que Brandabarbarán es una palabra muy... Leer más
Los libros de la serie protagonizada por Artemis Fowl, de Eoin Colfer, son entretenidos pero, tal como yo lo veo, en ellos no encajan bien marcos y contenidos: el género de aventura fantástica y los seres que la pueblan no son apropiados para usar los estereotipos y el estilo narrativo y conversacional propios de los «thriller» y las películas de acción. Sin duda, es enorme la facilidad del autor irlandés para esto último y por eso sus libros gustan a los aficionados a esa clase de ficciones con grandes tragaderas, pero no funcionan con quienes no ven nada sabrosa esa inverosímil mezcla en la que una pequeña elfa se comporta y habla como Bruce Willis. Personalmente no me parece que sean productos mínimamente duraderos: espero cosas mejores de Colfer para incluirlas en una... Leer más
Cuando va subiendo la marea del próximo Harry Potter se puede leer una novelita que fue una favorita de la infancia de Joanne K. Rowling: El pequeño caballo blanco, de Elizabeth Goudge. A pesar de sus defectos constructivos merece la pena pues tiene calidad literaria y una simpática... Leer más
Uno de los libros juveniles estrella de las navidades del año 2004 fue Eragon, de Christopher Paolini, que llegó precedido de un éxito masivo en los EE.UU. En su contra tiene no pocos defectos literarios y de construcción que lo hacen un producto inconsistente y superficial. A su favor juega que su autor lo escribió con sólo quince años y que tiene ritmo y engancha. Sin duda, puede conectar con los sueños de aventura de muchos adolescentes aunque a cualquier lector experto, y esto muchas veces tiene que ver poco con la edad, se le caiga de las... Leer más