Ha sido una buena y larga lectura el libro de Tony Judt titulado Postguerra: una historia de Europa desde 1945. Aunque no lo he leído con igual atención en todos sus tramos, y aunque me ha parecido inevitablemente plano —muchos personajes y sucesos todos al mismo nivel— y desigual —se ve que algunas cosas el autor las conoce más de cerca o de primera mano, y otras no tanto—, es difícil no sentirse impresionado por un trabajo de síntesis y clarificación tan ambicioso y tan ameno. Para mí los capítulos más interesantes han sido los primeros, los que tratan de las décadas inmediatamente posteriores a la segunda Guerra Mundial. Los de las últimas décadas me han servido para reforzar el esquema mental que ya tenía de los acontecimientos, y no tanto para comprender mejor... Leer más
Cómo la Iglesia construyó la civilización occidental es un clarificador trabajo historiográfico de síntesis que coloca muchas ideas en su sitio. Ordenadamente, y con las referencias bibliográficas oportunas, el norteamericano Thomas Woods proporciona datos de interés acerca del nacimiento de las Universidades en Europa, sobre cómo se pusieron las bases del Derecho internacional y de la Economía, quiénes fundaron las instituciones de atención a los más necesitados, etc. Personalmente me alegra que dedique un espacio generoso al mundo de la Ciencia y que deje claro, para quien no lo sepa, por qué se desarrolló en el Occidente cristiano y no en otras civilizaciones... Thomas Woods. Cómo la Iglesia construyó la civilización occidental (How the Catholic Church Built the... Leer más
Otro tramo de Causas sagradas que me pareció revelador es la descripción de los credos de la Nueva Era, que fusionan «trocitos de misticismo oriental, astrología y ocultismo, ecología y psicoterapia...», tal vez porque he notado más de una vez esas querencias en algunos libros infantiles y juveniles. Michael Burleigh afirma que «las religiones de la Nueva Era retroceden a menudo hasta culturas y épocas premodernas (o totalmente fantásticas) —los indios nativos norteamericanos y el rey Arturo figuran entre los preferidos— o se desplazan hacia afuera hasta las sociedades menos desarrolladas. (...) Esas religiones parecen (...) un encogimiento cultural postimperial que ha sustituido la supuesta arrogancia del imperialismo occidental con credulidad ilimitada como reacción a las... Leer más
He leído con interés Poder terrenal y Causas sagradas, de Michael Burleigh. En algunos tramos me han parecido periodísticos en exceso, creo que el autor no es siempre preciso en los calificativos y que, a veces, acentúa innecesariamente la extravagancia de ciertos comportamientos (como hace Paul Johnson, por ejemplo, en Intelectuales)... Es también patente, como el mismo Burleigh advierte, que se deja llevar por sus simpatías y antipatías. Por ejemplo, en el malicioso comentario que formula cuando, al comentar la Francia de finales del XIX, hace referencia a que «una de las características más persistentes de la izquierda es la proyección sin inhibiciones de sus propias fantasías conspiratorias y su propio modus operandi corrupto». Pero, entre otras, para mí destaca la... Leer más
Insiste Anne Applebaum a lo largo de su libro Gulag en que las historias de cada tragedia masiva del siglo XX han sido únicas y en la importancia de conocerlas bien. Mi libro, dice al final, «no ha sido escrito "para que no se vuelva a repetir", tal como dice el cliché. Este libro ha sido escrito porque casi con seguridad ocurrirá otra vez. Las filosofías totalitarias han tenido, y continuarán teniendo, un gran atractivo para millones de personas. La destrucción del "enemigo objetivo" como decía Hannah Arendt, sigue siendo una meta fundamental de muchas dictaduras. Necesitamos saber por qué, y cada relato, cada texto de memorias, cada documento de la historia del Gulag es una pieza de este rompecabezas, una parte de la explicación». Y sí, nuestra sociedad consumista también... Leer más
Me ha gustado mucho Gulag, de Anne Applebaum (quizá gustado no sea la mejor palabra). Son interesantes y acertadas las distinciones que hace para señalar cómo «el Gulag y Auschwitz pertenecen a la misma tradición intelectual e histórica», pero a la vez son distintos, «tanto entre sí como respecto a otros sistemas de campos establecidos por otros regímenes». Me ha convencido la explicación de por qué todos esos hechos espantosos, tan conocidos, «no han penetrado en la conciencia colectiva occidental» como lo han hecho los del nazismo. Y comparto el subrayado que hace de que resulta lamentable el espectáculo de occidentales que se sentirían incómodos al pensar en llevar una esvástica, pero no tienen inconvenientes en llevar la hoz y el martillo en la camiseta o en la... Leer más
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