Ernest Bramah (1868-1942) fue un escritor inglés que creó al detective aficionado ciego Max Carrados en 1914. La colección con el título Los mejores casos de Max Carrados comienza con el primero de sus relatos, La moneda de Dionisos (The Coin of Dionysius, 1914), en el que vuelve a entrar en contacto con Louis Carlyle, un amigo de juventud que resulta ser detecive privado y con quien colaborará en más ocasiones. En otros casos su interlocutor, que servirá para poner de manifiesto la gran agudeza de Carrados, será el prosaico inspector Beedel, de Scotland Yard.
Carrados es aficionado a la numismática y coleccionista de antigüedades, y tiene un mayordomo llamado Parkinson cuya capacidad de observación fuera de lo común le sirve a su jefe para confirmar lo que casi siempre sospecha de antemano. Tienen interés la gran habilidad con la que se construyen los casos, la singularidad del personaje y de un ayudante como Parkinson, y la recreación de algunos ambientes. A la vez, leídos unos pocos casos (a mí al menos me) resulta cansado no sólo ver en acción a alguien siempre optimista y seguro de sí mismo, sino apreciar su tono de superioridad moral: «Mi palabra está sujeta a las contingencias y circunstancias, como todo lo que me concierne. Si hago una promesa, es con la condición de que no surja algo más importante que me obligue a actuar en sentido contrario. Esto lo puede entender cualquiera que tenga un mínimo de sensatez».
Ernest Bramah. Los mejores casos de Max Carrados (Best Max Carrados Detective Stories, 1972). Madrid: Siruela,2017; 326 pp.; col. Biblioteca de clásicos policiacos; trad. del inglés de José C. Vales; ISBN: 978-84-17151-18-8. [Vista del libro en amazon.es