Quien conozca sólo las novelas de la Trilogía polaca, Quo vadis? o A través del desierto, puede hacerse una idea simplista de la mente de Sienkiewicz. Esa impresión puede corregirse un poco con la lectura de Bartek el triunfador, una novela irónica contra un patriotismo estúpido.
La acción se sitúa en la guerra franco-prusiana de 1870, cuando el valor inconsciente de un campesino polaco proporciona grandes victorias al ejército alemán. Repetidamente condecorado, cuando vuelve a su pueblo pensando que fue un héroe, sigue sin darse cuenta del papel que ha desempeñado.
Este retrato tragicómico y sin embargo realista de un personaje patético, de un hombre metido dentro de un engranaje que no comprende, puede hacer pensar al lector en la importancia de saber por qué y para qué se lucha, en aquello (que no sé quién decía) de que la tragedia del hombre no es morir sino morir como un imbécil.
Henry Sienkiewicz. Bartek el triunfador (Bartek zwyciezca, 1882). Madrid: Celeste Ediciones, 2001; 97 pp.; col. Letra Celeste; trad. de Amando Lázaro Ros; ISBN: 84-8211-316-X.