Dos extraordinarios libros de y sobre Saul Steinberg, uno de los dibujantes en prensa más importantes del siglo XX: Reflejos y sombras, una narración autobiográfica, y Cartas a Aldo Buzzi, 1945-1999, una epistolario que da mucha idea de las lecturas, amistades e intereses de Steinberg.
El primer libro contiene una narración, que proviene de las conversaciones de Steinberg con Aldo Buzzi, un antiguo compañero de estudios, y que tiene cuatro capítulos: «Rumanía», «Italia», «Norteamérica», «El oficio de dibujante». Hay después un álbum de ilustraciones de Steinberg y una biografía sintética suya firmada por Vicente Ferrer.
El título tiene que ver con el gran interés de Steinberg por los reflejos y las sombras, que una y otra vez aparecen en sus dibujos: los «reflejos me encantan por la extrañeza de su existencia (la extrañeza es una cualidad de los milagros)». Son muy interesantes todas sus disquisiciones sobre el valor del dibujo al natural (que citaré más adelante) y sus consideraciones acerca de su trabajo como dibujante de humor: «un oficio difícil, sobre todo porque uno debe ser su propio editor: eliminar, eliminar, eliminar».
En el epistolario del segundo libro, del que se han suprimido textos más personales y material circunstancial —de acuerdo con Steinberg, que dio el visto bueno a la publicación—, Steinberg habla de sus lecturas —algunas continuas, como Chéjov, otras que son redescubrimientos, como las novelas de Evelyn Waugh o Willa Cather—, de películas que le gustan —como Los duelistas— o no le gustan —como Blade Runner—, de su amistad con escritores como Saúl Bellow, etc.
Al leerlo es fácil entender por qué Steinberg decía de sí mismo que «era un escritor que en lugar de escribir dibujaba». En este segundo libro hay un gran comentario a la obra de Steinberg que toma la forma de un intercambio de postales entre el editor y Carlos Pérez. En él hay un interesante apartado acerca de la influencia de Steinberg en humoristas españoles como, sobre todo, Chumy Chúmez; se le describe con acierto como «un observador que se autoobserva»; y se recuerdan los elogios que le dedicó Gombrich cuando indicó que Steinberg era quien más sabía «sobre filosofía de la representación».
Saul Steinberg y Aldo Buzzi. Reflejos y sombras (Riflexi e ombre, 2001). Valencia: Media Vaca, 2012; 141 pp.; col. Grandes y pequeños; trad. de María José Gil Mendoza ; ISBN: 978-84-938692-1-2. [Vista del libro en amazon.es]
Saul Steinberg. Cartas a Aldo Buzzi, 1945-1999 (al cuidado del destinatario) (Lettere a Aldo Buzzi 1945-1999, a cura del destinatario, ). Valencia: Media Vaca, 2012; 261 pp.; col. Grandes y pequeños; trad. de Juan Carlos Gentile Vitale; el libro contiene una parte final compuesta por 17 postales de tema steinberguiano intercambiadas entre Carlos Pérez y Vicente Ferrer; ISBN: 978-84-938692-2-9. [Vista del libro en amazon.es]