Una de las mejores novelas juveniles de aventuras que conozco (que conocí el año pasado, cuando se publicó en castellano) es Carta al Rey, de Tonke Dragt. Lo mejor que se puede decir de su continuación, que acaba de ser publicada recientemente, Los secretos del Bosque salvaje, es que no baja el nivel. No tiene la fuerza de una primera novela que descubre personajes, ni el tirón del hilo argumental clásico del largo viaje para cumplir una misión, pero engancha igual y tiene todo el atractivo de unos protagonistas bien perfilados y una trama tensa.
27 diciembre, 2006