Aunque son más frecuentes, como algunas veces he dicho, los álbumes que tratan del afecto entre madres e hijos o hijas —he citado recientemente Mi amor y Lucy Goosey— que los álbumes que tratan de lo mismo entre padres e hijos (o hijas), también entre los últimos hay algunos excelentes —que recuerde ahora Mi papá, Adivina cuanto te quiero…—. Uno notable de hace poco es Tú y yo, yo y tú, de Miguel Tanco, una historia sencilla pero ilustrativa: en escenas de la relación cotidiana entre padre e hijo, este va diciéndole a su padre cuántas cosas aprende gracias a él: «te hago las preguntas más difíciles…», «te llevo a lugares que nunca has visto…». Normalmente comienza con una frase que abre: «te enseño a jugar…», y sigue con otra que cierra: «y a perdonar». La opción por unas ilustraciones alegres y sencillas, dibujos coloreados en los que predomina un luminoso amarillo, va de acuerdo con el tono amable y nada enfático del relato. Por otro lado, es un álbum que también se puede poner como ejemplo de que los mejores álbumes para y sobre los más pequeños nacen de ideas y reflexiones cotidianas muy sencillas, o que parecen muy sencillas.
Miguel Tanco. Tú y yo, yo y tú (2017). Madrid: Bruño, 2017; 36 pp.; trad. de Virtudes Tardón Sánchez; ISBN: 978-8469606537. [Vista del álbum en amazon.es]