Barcelona: Juventud, 1960; 198 pp.; ilust. de Hedvig Collin; trad. de Carlos Guerendiain; agotado.
Bibi es hija de un jefe de estación de Jutlandia, viudo. De vez en cuando siente «la misma sensación que si tuviese ruedas en los pies y un pito de locomotora en la cabeza», un cosquilleo en las puntas de los pies y en los pelos, que la impulsa lejos, a viajar por su país. Pero, desde allí donde va, escribe a su padre contándole las cosas que le pasan. Dibuja continuamente, conoce a gente, se hace con una cigüeña…, y acaba encontrando a sus riquísimos y nobles abuelos, padres de su madre, a la que desheredaron por casarse con un jefe de estación.
27 junio, 2012