Hace pocos meses se publicó de nuevo ¡Dídola pídola pon! o la vida debe ofrecer algo más, uno de los libros infantiles de Maurice Sendak menos conocidos. El relato habla de una perra sealyham terrier llamada Jennie, que lo tenía todo, incluso un «amo que la quería», pero que decide marcharse de casa porque, dice, «la vida ¡tiene que ofrecer algo más que el tenerlo todo!». Su ambición es llegar a ser «la primera dama del Teatro Mundial de Mamá Oca» cosa que, después de unos cuantos episodios, acaba consiguiendo.
Las ilustraciones en blanco y negro van, al principio de la historia, en las páginas izquierdas y, más adelante, ocupan las derechas y hay imágenes en ambas páginas cuando Jennie actúa en la representación de Dídola Pídola Pon, una nursery rhyme de las Mother Goose’s Melodies que, en inglés, dice: «Higglety, pigglety, pop! / The dog has eaten the mop; / The pig’s in a hurry, / The cat’s in a flurry, / Higglety, pigglety, pop!». Fue algo característico de Sendak tomar pie de una cancioncilla infantil popular, sonora y de contenido confuso, para construir álbumes de argumentos surrealistas y pensados para ser leídos en voz alta.
Uno de los aspectos de interés del libro, que también orienta su interpretación, lo indica Ellen Duthie en este texto sobre Sendak cuando habla de la importancia que tienen para él las ventanas: en la primera imagen vemos a Jennie asomarse a la ventana mientras piensa que «la vida debe ofrecer algo más que tenerlo todo»: «tiene claro que ese algo más está al otro lado de la ventana y no a éste. Aquí la ventana sirve de frontera entre lo conocido, rutinario y desesperadamente complaciente y la esperanza de algo mejor, más entretenido, que haga que la vida de la perrita cobre sentido».
Maurice Sendak. ¡Dídola pídola pon! o La vida debe ofrecer algo más (Higglety Pigglety Pop! Or, There Must Be More to Life, 1967). Pontevedra: Kalandraka, 2018; 70 pp.; col. Libros para soñar; trad. de Agustín Gervás; ISBN: 978-84-8464-408-8. [Vista del libro en amazon.es]