
Poco después de Johnny Tremain, otro relato norteamericano que presentó un protagonista discapacitado que también tiene que «combatir por fuera y por dentro»: La puerta en la muralla, de Marguerite de Angeli. No es tan bueno como Johnny Tremain pero está bien. A la derecha, una ilustración de la misma autora, de la edición original.
26 agosto, 2009