Hace unas semanas puse aquí un libro de números de Richard Scarry y hoy traigo otro más, El gran libro de la escuela, toda una referencia para generaciones de chicos en su país y otro ejemplo de libro que aspira a ser divertido y entretenido y, a la vez, a enseñar muchas cosas y ayudar a vencer temores infantiles. La contracubierta tiene una frase publicitaria magnífica: «¡Por fin un libro que habla de la escuela y que lo cuenta todo!». Y, efectivamente, los lectores verán al simpático gato Floro en distintas situaciones: «Antes de salir», «De camino a la escuela», «La escuela», «El aula», «La lección de ortografía» (cuatro dobles páginas con todo el alfabeto, el nombre de cada alumno tiene la letra correspondiente, en los párrafos que acompañan cada una se muestra la letra en cuestión en otro color; la traducción tiene un particular mérito porque porque no siempre se pueden conservar las palabras originales, por ejemplo la o de naranja-orange), «Los oficios», «El recreo», «Los días de la semana», «La lección de aritmética» (del 1 al 10, dos dobles páginas), «Las horas del día» (dos dobles páginas), «La señorita Tarro de Miel (una osa, miss Honey en el original) tiene muchos ayudantes» (en dos dobles páginas, tareas de los alumnos en clase, incidentes), «Las medidas», «Las formas», «El dibujo y la pintura», «Los colores», «Las mezclas de colores» (una sola página) y «Cada uno con sus historias» (una página que luego se prolonga en una excursión al campo que cuenta Floro y que dura cinco páginas más), «Lección de caligrafía», «La visita del médico», «Pepe el Manitas y los meses del año» (cinco páginas), «La biblioteca» (tres páginas), y una doble página final para una excursión anual al campo de toda la clase.
Richard Scarry. El gran libro de la escuela (Richard Scarry’s Great Big Schoolhouse, 1975-2003). Madrid: Kókinos, 2010; 69 pp.; trad. de Miguel Ángel Mendo; ISBN: 978-84-92750-16-0. [Vista del libro en amazon.es]