El principio de la sabiduría es una novela de 1910, firmada por Henry Handel Richardson, seudónimo de la escritora australiana Ethel Florence Richardson (1870-1946). En ella se cuentan los años que Laura, una chica de origen modesto, pasa en un internado de Melbourne, entre los 12 y los 17 años, en medio de compañeras de clase más alta que la suya. Todo se centra en los problemas que Laura tiene: en el trato con su madre y hermanas, y en las relaciones con las demás internas: por su insatisfacción interior, por su tendencia natural a meter la pata, por los métodos educativos y por la rigidez de los comportamientos, el suyo y el de quienes la rodean.
Es un relato bien escrito e históricamente interesante por la forma inusual, para la época, en que se aborda el tema. Aunque no pretenda ser infantil, por su tono, lo cierto es que se mantiene dentro de los relatos semejantes del género pero, eso sí, sin la más mínima concesión al buen humor. Es difícil sobreponerse a la sensación que deja de que es una historia descompensada: todo es demasiado serio y tenso, la narradora y protagonista vive en un agobio continuo, sus profesoras son casi siempre duras y distantes, y, salvo al final, ni siquiera entre sus compañeras encuentra un poco de apoyo y descanso. En cualquier caso tiene valor si la leemos como una narración más entre las muchas que presentan un itinerario formativo.
Henry Handel Richardson. El principio de la sabiduría (The Getting of Wisdom, 1910). Barcelona: Alba, 2014; 332 pp.; col. Rara Avis; trad. de Elena Bernardo Gil; ISBN: 978-84-8428-962-3. [Vista del libro en amazon.es]