Jimmy Liao es un autor que tiene un estilo propio reconocible no sólo por sus imágenes sino, también, por los contenidos y enfoques de sus álbumes. Un ejemplo más está en No soy perfecta, un álbum parecido a Soy feliz pero tomando las cosas desde otra perspectiva. Da idea del contenido la dedicatoria: «Este libro está dedicado a los niños y adultos que han dejado de buscar un mundo perfecto».
Casi todas las ilustraciones son caras, muchas de la protagonista principal, Perfecta Nueno, y otras de amigos o primos, que aparecen recuadradas en el centro de cada página. Cada una tiene una frase de presentación arriba —«Este es un primer plano perfecto», «Esta es una prima perfecta», etc.— y un comentario más largo, abajo, en primera persona. Hay algunas ilustraciones a doble página: unas recopilan las ilustraciones pequeñitas que suelen ir en alguna esquina de las páginas previas; otras contienen frases de alguien famoso —por ejemplo, la primera es de Dalí: «No temas la perfección, nunca la alcanzarás»—, que van acompañadas de algún comentario biográfico del personaje; y otras son «perfiles de perfección», donde hay como tablas de evaluación de la pobre Perfecta.
Reconozco que, aunque la insistencia de Liao, libro tras libro, en cosas tan parecidas, puede cansar, su talento gráfico hace que todo se lleve muy bien. Por otra parte, abundan los golpes de buen humor y, a pesar de las térmicas que a veces coge para elevarse no se sabe dónde, sin duda sus libros son muchísimo mejores y más enriquecedores que los de autoayuda. Supongo que la multitud de caras y aspectos con las que vemos a la protagonista tiene mucho de desfile de modelos, o de disfraces: tal vez una manifestación más de cómo el mundo posmoderno, a la vez autosatisfecho e incómodo consigo mismo, propone continuos cambios de imagen.
Jimmy Liao. No soy perfecta (2011). Granada: Barbara Fiore, 2012; 132 pp.; trad. de Jordi Ainaud i Escudero; ISBN: 978-84-15208-25-9.