Dentro de los relatos que vuelven a contar episodios bíblicos, uno que me ha parecido bien construido y literariamente cuidado es Adara, de Beatrice Gormley. Con un mapa de la zona y, quizá, reproduciendo el texto en el que se basa, creo que la edición sería más atractiva para los lectores perezosos.
16 noviembre, 2005