La novela de Tonke Dragt, Carta al Rey, considerada el mejor libro juvenil holandés de los últimos cincuenta años, es ciertamente una sensacional novela de aventuras. Algunos escritores de ahora deberían fijarse: ¿por qué gustan siempre libros así? ¿qué pautas en la confección y en la forma y en los contenidos hacen posible que permanezcan historias como esta?
23 noviembre, 2005