La contracubierta de Las fabulosas aventuras del Profesor Furia y Mr. Cristal, de César Mallorquí, pone sobre aviso: el relato está dedicado a las víctimas de los asesinatos en el instituto Columbine, hace unos años. El lector esperará, y encontrará, por tanto, una trama semejante a lo que ocurrió allí: un grupo de chicos violentos (en este caso pronazis) que irrumpirán, disparando, en un instituto de secundaria. Un chico superdotado, al que le gusta pasar inadvertido y gran aficionado a los cómics, percibe y termina sabiendo las razones del comportamiento de un profesor que irrita muchísimo a los alumnos y, antes de que suceda, también intuye algo raro en el cabecilla de la agresión.
Como es de esperar del autor, la narración está bien construida, bien escrita, y atrapa el interés. El narrador hace algunas apostillas a lo que va sucediendo para señalar los errores que cometieron algunos personajes y que se fueron sumando hasta el trágico final. Son certeras las descripciones de muchos personajes con dos excepciones. Una, la del héroe, asombrosamente perspicaz aunque sea tan atractivo. Otra, el individuo al que se culpabiliza sin atenuantes: el padre del chico que se vuelve loco, un militar autoritario, en su casa y en la educación de su hijo, hasta extremos enfermizos. Este segundo es un cliché muy recargado y, parcialmente al menos, se ha quedado algo antiguo ya.
César Mallorquí. Las fabulosas aventuras del Profesor Furia y Mr. Cristal (2015). Barcelona: Edebé, 2015; 271 pp.; col. Periscopio; ISBN: 978-84-683-1953-7. [Vista del libro en amazon.es]