El secreto de If, de Ana Alonso y Javier Pelegrín, una historia que reúne y ensambla bien muchos elementos de cuentos clásicos, atrae y se lee con interés.
El relato comienza con la noticia de que se han concertado las bodas entre la princesa Dahud, heredera del reino de Kildar, y el príncipe Arland, heredero del contiguo reino de If. Pero Dahud desea saber antes más cosas de su futuro esposo y, con ese fin, urde un plan: por un lado manda por barco a una de sus doncellas para que se haga pasar por ella; por otro, viaja a If disfrazada de hombre y en compañía del anciano pero fuerte y hábil Sirio. En el camino rescatan de la muerte a una mujer anciana y un poco impertinente que, sin embargo, promete a Dahud que se cumplirán sus deseos, y, además, rescatan también de un hechizo a un joven encerrado en una torre.
Lo mejor es que la intriga está bien urdida y la historia bien contada, ya desde que la cita introductoria de La vida es sueño de Calderón de la Barca por un lado da pistas al lector y, al mismo tiempo, le hace pensar en una resolución distinta de la que tendrá la novela. Luego, el que algunos pasajes sean predecibles y el que, salvo el personaje de Dahud, los demás son algo esquemáticos, es algo normal en los relatos con acentos de cuento popular y también en eso está su encanto. El texto ganaría si evitase frases vacías y algo rimbombantes (por ejemplo la de que «un navegante nunca deja de ser un navegante: elegante, extraño e impredecible»). Supongo que las ilustraciones que van en todas las páginas, dibujos que presentan las acciones que se cuentan en el texto, se pueden dar por buenas si contribuyen a meter más en el relato a ciertos lectores pero, para otros como yo, no lo mejoran.
Ana Alonso y Javier Pelegrín. El secreto de If (2008). Madrid: SM, 2008; 216 pp.; col. El Barco de vapor; ilust. de Marcelo Pérez. ISBN: 978-84-675-2935-7.