BENTLEY, Edmund Clerihew

BENTLEY, Edmund ClerihewAutores
 

Escritor inglés. 1875-1956. Nació en Londres. Fue compañero de estudios y uno de los mejores amigos de CHESTERTON. Fue periodista, publicó libros de poesía —se le considera el creador de un poema humorístico de cuatro líneas que llamó clerihew—, y varias novelas policiacas. Su hijo Nicolas Bentley fue un conocido ilustrador.


El último caso de Philip Trent
En la red se puede leer la edición en inglés. En las bibliotecas españolas hay algunos ejemplares de una edición en castellano titulada El último caso de Trent; Buenos Aires: Librería Hachette, 1945; 236 pp.; col. Biblioteca de bolsillo, serie naranja; versión castellana de Vicente Canoura. Nueva edición en castellano, titulada El último caso de Philip Trent, en Madrid: Siruela, 2017; 226 pp.; col. Libros del Tiempo, Biblioteca de Clásicos policíacos; trad. de Guillermo López Gallego; ISBN: 978-84-17151-17-1. [Vista del libro en amazon.es]

Un hombre de negocios importante aparece muerto en el jardín de su casa, en Inglaterra. El crimen parece haberse cometido de madrugada pues está vestido y no tiene la dentadura postiza puesta. Por las marcas en las muñecas se supone que ha forcejeado antes con su asesino. Tanto su joven viuda como sus dos eficientes secretarios y el personal de su casa dan explicaciones convincentes de su inocencia. Sin embargo, el conocido detective Philip Trent —de cuyos casos anteriores se nos hará un resumen al hilo de la narración— reconstruye minuciosamente todo lo sucedido y lo deja por escrito a la viuda para que use sus revelaciones como le parezca. A continuación, como el caso le ha conmocionado más de lo debido, se marcha fuera del país y prefiere no averiguar más. Pero, pasados unos meses, le llegan noticias que le chocan mucho y decide volver.



Novela que autores como CHESTERTON, Agatha CHRISTIE y Dorothy SAYERS elogiaron como la mejor del género. Uno de los motivos era que fue la primera de un nuevo tipo de relatos policiales: por primera vez el detective protagonista no era un ser infalible como lo habían sido Dupin, Holmes y los demás. Otro rasgo de originalidad, para la época, era que Trent cayera enamorado a la primera de la principal sospechosa.

Leída hoy, aunque sea lenta para los gustos actuales, sigue siendo intrigante y amena, pues la trama está bien urdida y bien escrita, y tiene observaciones al paso muy atinadas. También sigue siendo atractivo su protagonista, Philip Trent, un aristócrata y periodista con aficiones artísticas y deportivas, con un dominio completo de las técnicas policiales del momento, aparte de tener un conocimiento exhaustivo de toda clase de zapatos.

La especial simpatía de Chesterton por esta historia —que Bentley le dedicó en devolución de la dedicatoria de Chesterton a él de El hombre que fue jueves— estaba causada por sus cualidades narrativas, pero también por ser su autor un gran amigo, porque las consideraciones acerca del millonario americano eran las mismas que podría haber hecho él, y, en lo que se refiere a la resolución del enigma, por la importancia del elemento «atmósfera» o la idea de que cualquier persona puede cometer un crimen pero hay determinados crímenes que una persona concreta nunca puede cometer.

Otros libros: la novela Philip Trent y el caso Trent, la colección de relatos Trece casos para Philip Trent.


18 febrero, 2010
Imprimir

Comments are closed.