Dos ratones, de Sergio Ruzzier, es un álbum amable para los más pequeños y de construcción más compleja de lo que parece. La narración se apoya en la sucesión de las imágenes que van acompañadas, simplemente, de algunas palabras sin enlazar unas con otras: «Dos ratones / tres pastas / tres barcas, dos remos / un barquero / un nido, dos huevos / tres patitos…». Son simpáticas las figuras de los personajes, atraen sus andanzas y sus pequeñas reacciones de pillería, comodidad o enfado, y el pequeño argumento tiene tensión. En este comentario al libro hay una explicación del autor de por qué los números se limitan del uno al tres: podrían ser más sin dificultad pero la idea es repetirlos una y otra vez dejándose llevar por el ritmo de las palabras. Como suele ocurrir con muchos álbumes así, habrá quienes piensen que tal vez es mucho libro para tan poco contenido, por más que el formato sea pequeño: es decir, es un libro de los que vale la pena pedir en la biblioteca primero y hay que pensarse un poco más si comprarlo según cuál sea la aceptación del lector pequeño…
Sergio Ruzzier. Dos ratones (Two Mice, 2015). Barcelona: A buen paso, 2017; 32 pp.; trad. de Lara Meana; ISBN: 978-84-945038-9.4. [Vista del libro en amazon.es]
En Vaclav Havel. Una vida se pone de manifiesto que los grandes temas de Havel fueron el de la identidad, el de vivir en la verdad y de actuar con sentido de responsabilidad. Él mismo habló de ellos en el que sería su manifiesto político, El poder de los sin poder, pero se anunciaron ya en un discurso pronunciado en 1968, en un congreso de escritores chescoslovacos: «La cuestión es sencillamente si en última instancia todos somos capaces de responsabilizarnos de nuestras palabras, si somos capaces, realmente y sin reservas, de responder por nosotros mismos, de avalar nuestras proclamas con nuestros actos y su continuidad, y nunca caer —por muy buenas que fueran nuestras intenciones— en nuestra propia trampa, ya sea por vanidad o por miedo. Este no es un llamamiento al cálculo sino a la autenticidad».
Su biógrafo afirma que Havel intentó siempre seguir una máxima de Jan Patocka según la cual «la medida de un hombre no es cómo afronta las metas que se ha marcado, sino cómo sobrelleva los desafíos que la vida pone en su camino». Entre otras frases que describen cómo entendió la resistencia que debía oponerse a los políticos y funcionarios que lo acosaron y encarcelaron, escribió que jamás una mentira puede protegernos de otra mentira; que un acto moral sin ningún efecto visible político inmediato, puede adquirir, con el tiempo, una gran trascendencia política; que «una sobria perseverancia es más efectiva que las emociones entusiastas». Son criterios de actuación que, a pesar de sus tropiezos y decaimientos, intentó mantener, y que pueden guiar cualquier resistencia frente a los abusos de poder.
En esa línea van unas instrucciones que, desde el gobierno checoslovaco, se dieron a la población para comportarse ante las tropas invasoras rusas en 1968, un texto en el que parece verse la mano de Havel: «Afronte la presencia de tropas extranjeras igual que afrontaría, por ejemplo, un desastre natural: no negocie con ellas —igual que usted no negociaría con una lluvia torrencial—, sino que actúe al respecto y huya de ella de la misma forma que haría con la lluvia: utilice su ingenio, su inteligencia y su imaginación. Al parecer el enemigo es tan impotente frente a ese tipo de armas como lo es la lluvia frente a un paraguas. Utilice contra el enemigo cualquier método que él no se espere: no le manifieste ningún tipo de comprensión, ridiculícele y muéstrele lo absurdo de esta situación».
Michael Žantovský. Havel. Una vida (Havel. A Life, 2014). Madrid: Galaxia Gutenberg, 2016; 798 pp.; col. Biografías y memorias; trad. de Alejandro Pradera Sánchez; ISBN: 978-8416734221. [Vista del libro en amazon.es]
En bienvenidosalafiesta: notas del mes de mayo. Una selección de pocos pero excelentes libros comentados en el mes es esta: —para pequeños (y sus padres), dos álbumes extraordinarios: Pregúntame y Un camino de flores; —un álbum especial, para entusiastas de los libros, del diseño editorial, y de la tipografía: La niña de los libros; —una novela gráfica tan absorbente como los grandes libros de aventuras decimonónicas: La leyenda de Sally Jones; —un libro para todos: Pájaros en la cabeza; —dos libros conmovedores: Últimos testigos y Govindo; —una biografía de la que he puesto una primera nota: Havel. Una vida. En Medium he publicado dos notas con selecciones de libros, que serán las últimas del curso:... Leer más
Me ha interesado Jane, el zorro y yo, de Isabelle Arsenault y Fanny Britt, porque su narrativa gráfica tiene atractivo y porque trata con serenidad algunos problemas propios de adolescentes. La protagonista, Hélène, es una chica de unos once años que piensa que está gorda por más que su comprensiva y amable madre, desbordada, intenta decirle que no lo está. Sus compañeras se meten cruelmente con ella por ese motivo y hace una vida un tanto aislada. Su evasión es la lectura de Jane Eyre, con cuyos problemas se identifica un poco, momentos en los que la narración gráfica tiene color y los perfiles de las figuras adquieren nitidez. Con motivo de un campamento colegial, en el que Hélène y otras chicas también al margen del grupo principal ocupan una tienda, Hélène ve a un... Leer más
La niña de los libros, de Oliver Jeffers y Sam Winston, es uno de esos álbumes premiadísimos y elogiadísimos. Sin duda lo merece: Jeffers es un maestro de los álbumes y Winston es un experto tipógrafo y, por tanto, de su colaboración tiene que salir algo bueno o, al menos, algo que seguro que gustará a quienes siguen el mundo de los álbumes (como yo). Además, el libro habla sobre libros y lectura para gente a la que le gustan los libros y la lectura, así que tiene los aplausos garantizados entre quienes se dedican a los libros y a la lectura (como yo también)... El relato trata sobre una niña que, «a través de un mar de palabras» llega junto a un niño solitario y le anima a vivir aventuras a través de «los bosques de cuentos de hadas», de las «montañas de... Leer más
En Un lobito muy educado, de Matthieu Maudet y Jean Leroy, el protagonista sale a cazar al bosque por primera vez (nada menos que con un cazamariposas gigante). Como sus padres le enseñaron que «la última voluntad debe respetarse siempre», hace caso a lo que le piden sus dos primeras víctimas, un conejo y un pollo, pero comprueba con disgusto que ellos no cumplen su palabra, pues son unos mentirosos y huyen. Las cosas serán diferentes con su tercera víctima: un niño. Relato cuyo argumento recuerda un poco, al menos al principio, al de Voy a comedte, y que, como él, arranca la risa debido a los buenos golpes y a la simpatía de los personajes. Funciona como una tira cómica también porque los diálogos entre los personajes se presentan en globos. Contra los fondos de las... Leer más
¡Qué aburrimiento!, de la ilustradora alemana Henrike Wilson, trata sobre un oso pequeño al que, durante siete dobles páginas consecutivas, lo vemos en el bosque, en distintas situaciones, manifestando con palabras y con sus gestos y posturas que se aburre. Hasta que, finalmente, hay cosas a su alrededor que le llaman la atención. Las imágenes son pictóricas y atractivas: el oso, que puede recordar un poco a Winnie the Pooh, es amable a pesar de su tono quejoso. No sé hasta qué punto el álbum servirá para transmitir, a los lectores pequeños, la idea tan aprovechable que hay detrás de la historia: que los momentos de «aburrimiento» son propicios para poner en marcha la imaginación, la reflexión, la observación y el descubrimiento del mundo… Desde un punto de vista... Leer más
Havel. Una vida, una biografía de Václav Havel escrita por Michael Žantovský, su amigo y jefe de prensa durante unos años, sigue ordenadamente su vida, habla de sus años de infancia y formación, de su dedicación al teatro desde muy joven, de su actividad como disidente y de cómo llegó a descubrir, entonces, «que vivía en un sistema que no solo no funcionaba, sino que no podía funcionar», de su participación en los acontecimientos que le condujeron a liderar la Revolución de Terciopelo, en 1989, y de su vida política posterior. El autor se detiene también a explicar la actividad de Havel como dramaturgo y escritor y no deja de contar los incidentes de su ajetreada vida personal. Además, da los pormenores de las discusiones y rivalidades políticas que tuvieron lugar... Leer más
Govindo. El regalo de Madre Teresa, de Marina Ricci, es un extraordinario libro testimonio (que, apunto para quienes pertenezcan al mundo de la LIJ, gustará mucho a quienes hayan leído y disfrutado con La lección de August). La autora, una periodista italiana, tuvo que ir a Calcuta en 1996 para realizar un reportaje sobre Nirmal Hriday, la casa de los moribundos que llevan las hermanas de la Madre Teresa, y sobre Shishu Bhavan, un orfanato que también atienden. En este vio a Govindo, un niño minúsculo con una evidente discapacidad que le ganó el corazón. Su marido Tommaso y sus cuatro hijos —tres chicas y un chico— respaldaron su propuesta de adoptarlo, por lo que dieron todos los pasos para llevarlo a Italia, donde le diagnosticaron una parálisis cerebral espástica y... Leer más
Historium, de Richard Wilkinson y Jo Nelson, es un álbum construido con los mismos criterios organizativos y compositivos que Animalium y Botanicum, y tiene igual buen aspecto externo e igual buena presentación —con textos escuetos e ilustraciones con aires antiguos—, pero, por lo que diré, me ha parecido un libro menos atractivo. Los autores presentan bien cuál es el trabajo propio de los arqueólogos y una «línea del tiempo» para poner en paralelo la información que van a presentar. A continuación muestran 160 objetos divididos en seis «salas»: África, América, Asia, Europa, Oriente Medio, y Oceanía. Al tener el libro entre las manos surge la pregunta de si no hubiera sido mejor que, puesto que se trata de mostrar objetos —ánforas, figuras, estatuas…—, no... Leer más
Célebres casos del detective John Chatterton, de Yvan Pommaux, es un libro que reúne tres historias del mismo protagonista que se habían publicado por separado. Chatterton es un gato detective que resuelve unos casos que se parecen mucho a Caperucita Roja —la madre de Caperucita pide a Chatterton que la busque, pues ha desaparecido—; a Blancanieves —aquí a Chatterton la madrastra le dice que descubra el paradero de su hijastra Lilia—; y a La bella durmiente —cuyos padres le dicen a Chatterton la maldición que recae sobre su hija, justo cuando está a punto de cumplir quince años, y lo contratan para que la proteja—. En su momento leí estos relatos y me parecieron brillantes desde un punto de vista gráfico: todo se cuenta con una sucesión de escenas compuestas de... Leer más
Pregúntame, de Bernard Waber y Suzy Lee, es uno de esos grandes álbumes que dan seguridad al niño y que presentan de modo genial su descubrimiento del mundo. En él vemos a un padre y a su hija pequeña —muy parecida a la niña de otros álbumes de la ilustradora— dar un paseo y atravesar un parque mientras la niña le pide a su padre que le pregunte qué cosas le gustan, qué cosas le gustan más, por qué le gustan, etc. La conversación, que viene y va entre la niña y su padre de un modo sobrio, sin blandura ni falsa poesía, atrapa bien los modos de decir insistentes de la chica y la paciencia del padre que se pliega sin más a los requerimientos de su hija. Es una forma de animar al niño lector a preguntar cosas y a preguntarse cosas; es una forma también de mostrar... Leer más
Hablé hace tiempo de Zdeněk Miler y veo que se han publicado ahora dos álbumes más, en formato pequeño y en cartoné, del mismo personaje: Topito y la sorpresa y Topito y las galletas, con relatos de Kateřina Miler. En el primero, Topito y su amigo Pinzón encierran a tres gusanos que se han comido una flor pero cuando van a liberarlos tienen una sopresa. En el segundo hacen galletas con mermelada de ciruelas e invitan a los amigos. Como es lógico en libritos para prelectores, el ilustrador se ha propuesto que sean amables, que sus héroes sean tipos activos de aspecto gracioso y que desprendan simpatía —pues no dejan de sonreír—. Topito, un personaje negro y con ojos grandes, destaca contra el fondo de una rica vegetación, y lo mismo cabe decir de su amigo Pinzón, de cara... Leer más
Me ha parecido estremecedor y luminoso Últimos testigos, el segundo libro que leo de Svetlana Alexiévich. En él recopila testimonios, tomados de conversaciones con personas que vivieron la Segunda Guerra Mundial cuando eran niños o niñas, en los que hablan de algunas experiencias y recuerdos que se les quedaron grabados para siempre. Esta reseña explica bien su contenido. Se puede añadir a ella que la enorme dureza de las situaciones que se describen se compensa con momentos extraordinarios de bondad y humanidad. Uno, por ejemplo, el de una mujer judía que habla de la familia que la escondió: «Los hubiesen podido fusilar en cualquier momento… A toda la familia…, a los cuatro hijos… Por haber refugiado a una niña judía. Del gueto. Yo era su muerte… ¡Hay que tener un... Leer más
He puesto datos de nuevas ediciones de Memorias de la casa muerta y El castillo encantado. También, de la primera edición en castellano de Afortunadamente, un antiguo álbum de Remy Charlip cuya edición en inglés tenía comentario en la página desde hace... Leer más
Brevemente, mencioné hace tiempo El juego de las golondrinas, un cómic en el que la dibujante libanesa Zeina Abirached hablaba de su infancia en Beirut. El piano oriental es también un largo cómic parcialmente autobiográfico —en memoria de su abuelo, dice al final—, en el que se entrelazan dos hilos argumentales: en los años cincuenta y sesenta, la historia de Abdalah Kamanja, el inventor de un piano en el que se puedan tocar a la vez melodías occidentales y orientales —en estas, el intervalo mínimo es de un cuarto de tono; en los pianos occidentales el intervalo es siempre de un semitono—; y a finales del siglo XX, el relato de su nieta, una chica que se marcha de Beirut en 2004 y que «lucha» por saber pronunciar bien los dos idiomas con los que ha crecido, el francés... Leer más
Es tu turno, Adrián, de las autoras suecas Kristin Lidström y Helena Öberg, es una buena novela gráfica que vale la pena conocer. Trata sobre un chico que tiene problemas para hablar en público hasta que encuentra una perra, llamada Niebla, cuya presencia y contacto le serenan y le hacen capaz de vencer sus miedos; pero Niebla un día desaparece. El relato tiene lugar tiempo atrás, como se deduce de los escenarios y de que Adrián es un entusiasta del mundo del circo y de personajes como Houdini. La historia está bien contada. Las palabras del relato son del mismo Adrián. Sus dificultades no tienen origen en las personas que le rodean pues sus padres y los adultos que le rodean son atentos y amables. En la primera parte, «Antes de conocer a Niebla», vemos el mundo imaginativo... Leer más
Búscame, de Ana Palmero Cáceres, es un álbum de los que juegan a estimular el espíritu de observación del lector, confeccionado con los mismos patrones que Cuéntame. Esta vez las dobles páginas están compuestas a base de repetir muchas veces la figura de un animal —un armadillo, un pez volador, una pata, un mono sin cola y un mono de cola larga, una iguana, un escorpión, etc.—, formando diseños geométricos que bien podríamos ver en telas o alfombras, y en cada una se le propone al lector que busque alguno que no encaja bien, porque tiene otra forma, o está en otra posición, o tiene otros colores. Ana Palmero Cáceres. Búscame (2017). Barcelona: Ekaré, 2017; 28 pp.; ISBN: 978-980-257-383-7.... Leer más