Ha fallecido hace unos días George Steiner (1929-2020), un autor al que he leído bastante.
Un libro suyo, que me pareció deslumbrante y utilicé mucho en La discreción del bien [1], fue Tolstoi o Dostoievski (1960).
Otro, que menciono en Un comentario a Antígona [2], fue Antígonas (1990).
Y en esta página he puesto notas tomadas de varios libros:
—De Lenguaje y silencio (1976): Clases de analfabetos [3], De la enseñanza de la literatura [4], Remedio y veneno [5].
—De Presencias reales (1989): Por qué hay creación estética [6], Apuesta por la supervivencia [7].
—De George Steiner en diálogo con Ramin Jahanbegloo (1992): Tratamientos de antes [8].
—De Errata (1997): De padres e hijos [9], Fundamentalismo [10], Nuestra propia trivialidad [11], Alguien que nos lee [12].
—De Lecciones de los maestros (2003): Fidelidad judía [13], Reivindicación de la memoria [14], Profesores que no buscan la verdad [15], Un chiste judío [16].
—De Un largo sábado [17] (2014).
Además, hablé de unas entrevistas de su amigo Nuccio Ordine reunidas en el libro George Steiner, el huésped incómodo. [18]