Adam Zagajewski: «En las películas siempre domina el “ojo del mundo” de la época: el modo de mirar, de caminar, de rodar, la técnica de la cámara, la moda (en el vestir, en el maquillaje, en la forma de sonreír, de encogerse de hombros, de manifestar la malicia y la ternura); todas estas “contemporaneidades”, que cambian cada ocho o diez años y que la poesía, a diferencia de la novela realista, por regla general no registra en absoluto, se adhieren a la obra cinematográfica y hacen que amarillee como una vieja fotografía. La poesía —naturalmente, sólo la grande, la excelente— es una de las artes que menos amarillean».
Adam Zagajewski. «Observaciones acerca del estilo sublime», En defensa del fervor (Obrona żarliwości, 2002). Barcelona: Acantilado, 2005; 215 pp.; trad. de J. Sławomirski y Anna Rubió; ISBN: 84-96489-15-9.