Escritora chilena. 1944-. Nació en Ioncoche. Estudió Periodismo en Santiago. Autora de varias novelas y libros de relatos para niños.
El archipiélago de las PuntuadasSantiago de Chile: Andrés Bello, 1987; 40 pp.; ilust. de Eduardo Osorio; ISBN: 956-13-1472-X.
Forman el archipiélago de las Puntuadas siete islas situadas en el Océano Pacífico: dos tienen forma de admiraciones, tres de puntos suspensivos, y dos de interrogaciones. Las islas Exclamativas y las Interrogativas están en conflictos permanentes por lo que los reyes de las Suspensivas intentan mediar. No sin muchas dudas previas, organizan unas fiestas de disfraces a las que invitan a todos y durante las que se suspenden las hostilidades. En ellas se conocen el príncipe interrogativo y la princesa exclamativa que, a pesar de los repetidos choques que sufren, se acaban gustando.
Cuando un relato es justo lo que dice ser y su autor no intenta equilibrios poéticos ni desparrames imaginativos donde no debe, están puestas las bases para que sea eficaz. Si además la idea es simpática, la narración está bien llevada para crear la tensión del cómo se logrará resolver lo que todos sabemos que sucederá, la historia ya tiene casi todo lo necesario para ser excelente. Para conseguir el pleno sólo falta que los diálogos estén bien confeccionados y los nombres de los protagonistas bien escogidos, como en este caso: los reyes exclamativos Recórcholis y Barahúnda, y su hija Zambomba; los reyes interrogativos Rompecabezas y Quisicosa, y su hijo Jeroglífico; y los reyes suspensivos Titubeo y Perpleja.
27 agosto, 2014