Ilustradora española. 1914-1997. Nació y falleció en Barcelona. Hija de pintor, sobrina de escultor, profesora de dibujo desde muy joven, le influyeron mucho Arthur RACKHAM y los ilustradores ingleses de finales del XIX y principios del XX. Sus ilustraciones de línea frágil fueron muy populares.
Un día en la vida de Bibí, una pequeña chica rubita y mofletuda, desde que se levanta hasta que se acuesta.
A un insistente niño pequeño, su joven madre le deja unas tijeras mientras atiende una visita. Después de recortar todo lo que tiene a mano, el niño se queda dormido y tiene un sueño: es un muñeco de papel más en un mundo de muñecos de papel y entonces da su tijera a una bruja que la usa para destrozarlo todo…
Tic tac: las horas del día de una niña fue el álbum con el que se consagró su autora. Pero quizá sea El muñeco de papel el mejor de sus álbumes propios. El relato tiene acentos narrativos antiguos, que se notan en la clara voluntad educativa que se confiesa en la primera página, pero también en los tipos de nombres, en el uso frecuente de diminutivos, en la misma narración en tercera persona cuyo estilo no es apropiado para niños de la edad del protagonista. Pero el libro merece ser conocido, por su valor histórico y porque su trama, así como su concepción y ejecución gráfica, tienen calidad. En este aspecto es destacable que las ilustraciones son muchas, de distinto tipo y tamaño, y que van dispuestas en las páginas según convenga de modo que se pueda seguir con ellas el argumento. Es notable la expresividad de los dibujos, la capacidad de la ilustradora para mostrar el movimiento de las figuras, y cómo en algunas ocasiones usa enfoques cinematográficos impactantes.
En su vida profesional Llimona ilustró muchos clásicos, el último de los cuales fue una versión adaptada de Peter Pan y Wendy, de James BARRIE, editada en Barcelona: Destino, 1994; 58 pp.; versión de Xavier Roca-Ferrer; ISBN: 84-233-2394-3.
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