- Bienvenidos a la fiesta - https://bienvenidosalafiesta.com -

BARBA, Andrés

En Historia de Nadas el autor usa un narrador oral que cuenta las cosas ordenadamente, presentando primero al pueblo y a los personajes que luego emprenderán el viaje, y usando repeticiones explicativas al modo de un niño que quiere ser claro. Compone así un relato ameno que por momentos es verdaderamente ingenioso: es todo un acierto, por ejemplo, que Nadas tenga una réplica en miniatura en la que todo se repite un día después y en la cual pueden sus habitantes ver cómo pasaron exactamente las cosas. En el argumento hay elementos de cuentos clásicos y, como en ellos, algunos pasos de la historia se resuelven gracias al olvido de uno mismo y a la generosidad con los demás. Pero hay también conexión con el mundo imaginativo y de sentimientos de un niño de ahora, como es el caso de los irrefrenables deseos de jugar al fútbol, de marcar un gol y de celebrarlo luego haciendo el avión por todo el campo, que tiene continuamente una chica llamada Jimena Delalmena.

La alucinante… es también un libro divertido, contado con muchos diálogos, expresiones coloquiales y descripciones excelentes: un día los protagonistas iban «con pensamientos tristes y pensamientos alegres todos mezclados, como una ensaladilla rusa, en la que los pensamientos alegres fueran los guisantes y los tristes la mayonesa». El argumento, el tipo de humor y algunos personajes recuerdan a Charlie y la fábrica de chocolate [1] de Roald DAHL [2]. Pero el narrador no tiene ni la intención ni los acentos sarcásticos de Dahl y prefiere subrayar más lo positivo y las actitudes generosas de los protagonistas, como se ve cuando Verónica le dice a Juanito que «Klaus Wintermorgen está triste en el fondo, porque siempre gana y no disfruta las cosas con los demás, si siempre ganas siempre estás solo, y ganar un premio es muy triste, si no tienes con quién disfrutarlo. Es igual que cuando estás en el colegio y te escondes para comerte tu bocadillo tú solo para que nadie te lo pida. Entonces es como si el bocadillo no estuviera tan bueno y te lo comes rápido y no lo disfrutas lo mismo».

Las ilustraciones son apropiadas al tipo de historias y contrapuntean con acierto los textos.

Otro libro: Arriba el cielo, abajo el suelo [3], La microguerra de todos los tiempos [4].