Uno de los discípulos más populares de Pyle [1] fue N. C. Wyeth [2], a quien le debemos buena parte de las ilustraciones clásicas de muchos libros de aventuras, algunas recuperadas para el mercado español por Valdemar.
Uno de los discípulos más populares de Pyle [1] fue N. C. Wyeth [2], a quien le debemos buena parte de las ilustraciones clásicas de muchos libros de aventuras, algunas recuperadas para el mercado español por Valdemar.