El hijo de Manfred, príncipe de Otranto, fallece poco antes de celebrar su boda con Isabella, hija del Marqués de Vicenza. Entonces, Manfred pretende divorciarse de su mujer, Hippolita, y casarse con Isabella. Se opondrán a sus deseos un fraile llamado Jerome y el joven campesino Theodore, y contarán con la colaboración de fuerzas misteriosas.