Un piojo se instala en la cabellera de la profesora, la señorita Calipso, y allí tiene piojitos que van alcanzando las cabecitas de todos los niños de la clase. Resolverá el problema la decidida intervención del señor Trucha, el director.
Un piojo se instala en la cabellera de la profesora, la señorita Calipso, y allí tiene piojitos que van alcanzando las cabecitas de todos los niños de la clase. Resolverá el problema la decidida intervención del señor Trucha, el director.