Tejima emplea una técnica semejante a la del tradicional grabado en madera, y logra unas imágenes evocadoras, óptimas para narrar relatos sencillos acerca del ciclo de la vida de distintos animales. Sus ilustraciones ocupan casi siempre la doble página y emplean perspectivas de los clásicos grabados japoneses de paisajes. A pesar de ser oscuras, pues la vida de los búhos se desarrolla de noche, son sin embargo luminosas, pues las luces y las sombras están manejadas de modo sobresaliente. Tejima usa el espacio alrededor de las ilustraciones para guiar la vista del lector y emplea también recursos narrativos del cómic, con secuencias de imágenes que acercan la escena desde un plano general hasta un primer plano. Los textos que acompañan las imágenes, siempre muy cortos, a veces son caligramas. Tanto en este como en otros relatos, Tejima muestra unos lugares en los que la vida natural se desarrolla sin intrusiones humanas. Y con sencillez y realismo, habla de los distintos modos de vivir, del cuidado de unos por otros, de la necesidad de trabajar, de la vida y de la muerte… Este mensaje se subraya también al contar el relato siempre en presente, como sugiriendo la perennidad de los sucesos que se narran.
Otros álbumes, publicados por la misma editorial y ambientados también en Hokkaido, tienen iguales calidad, rasgos y mensajes:
—El cielo del cisne (Ohakucho no sora, Swan Sky, 1983); ISBN: 84-261-2641-3.
Historia que habla de afecto y unidad familiar, y que trata sobre un joven cisne que no puede emigrar con su familia a las tierras del norte y, cuando llega el momento, su enfermedad se agrava y muere.
—El sueño del zorro (Kitakitune no yume, Fox´s Dream, 1985); ISBN: 84-261-2450-X.
La continuidad de la vida, en un relato sobre un zorro con hambre y frío que llega a un desconcertante bosque invernal, donde sufre un sueño-alucinación añorando su feliz infancia, después del cual se recobra y se marcha detrás de una hembra a la que ve a lo lejos.
—El otoño del oso (Higuma no aki, Bear´s Autumn, 1986); ISBN: 84-261-2512-3.
Más enseñanzas para vivir, en este caso a cargo de una mamá-oso que enseña a su bebé-oso a pescar salmones.